sábado, 22 de febrero de 2014

SOCIECONOMIA POLITICA DEL SOCIALISMO REAL


 FORMACIONES  SOCIALISTAS EN LA HISTORIA  *

 


Prólogo

Antes de pasar a transcribir la formación socioeconómica del socialismo real o marxista, voy a compendiar las formaciones socialistas habidas en la historia del socialismo que a continuación se  describen:



El socialismo utópico: Las duras condiciones de la revolución industrial y la gran injusticia social que generó, estimularon una nueva forma de pensamiento igualitario: el socialismo utópico, llamado así por su romanticismo e idealismo. Entre sus principales exponentes se encontraban a Robert Owen (1771-1858), el francés Claude Henri, con de Saint-Simon 1760-1825) su tarea consistía en dirigir la sociedad hacia un bien común, basado en el derecho comunitario al trabajo, la propiedad, la herencia, la libertada personal y el derecho a competir.

 

Otros socialistas utópicos importantes fueron Louis Blanc (1811-1882), Pierre-Joseph Proudhon (1809-1865), Auguste Comte  (1798-1857), Charles Fourier (1772-1832), Jean Charles Leonard Simonde de Sismondi (1773-1842), Karl Rodbertus (1805-1875), Ferdinand de LaSalle (1825-1864).

 

 

 El socialismo científico: Carlos Marx (1818-1883) y Federico Engels (1820-1895) realizaron una revolución en toda la ciencia de la sociedad, incluida la Economía Política. Las obras fundamentales de los clásicos del marxismo-leninismo, que caracterizan el objeto y el método de la Economía política son: Contribución a la crítica de la Economía política; introducción (De los manuscritos de 1857-1858, de Marx, Prefacio de Engels a la primera edición del II tomo de El Capital; Anti-Dühring (apartado II) y la recesión de Vladimir Lenin (1870-1924) sobre Curso breve de ciencia  económica, de A. Bogdánov.

 

El calificativo de científico al socialismo se le dio solo por algo realizable, practicable, y por estar basado en principios debidamente estudiados y presentados en forma sistemática.

 

En la Historia del Socialismo aparte del Socialismo utópico y del Socialismo científico, se dieron otros tipos de socialismo que exponemos seguidamente: **

 

Socialismo Corporativo: Es una variedad del socialismo, con vigencia en Inglaterra, movimiento que apareció en 1906 y que postuló la defensa y restauración del sistema de gremios medievales, con adaptación a la modernidad. Consideran los socialistas corporativos que la sociedad crea el valor en forma colectivas, no individual, al mismo tiempo que criticaban al sistema capitalista por la forma individual de acrecentamiento de la riqueza. Propusieron organizar los sindicatos obreros en forma de corporaciones, quedando a su cargo las industrias una vez que se nacionalizaran. Atacaron también al socialismo estatal.

 

Socialismo cristiano: Teoría que procura conferir a la religión cristiana un tinte socialista. El socialismo cristiano surgió en las décadas 1830 my 1840 como variedad del socialismo feudal, en el que se revelaba la hostilidad de las clases feudales. La misión del socialismo cristiano consiste en luchar contra el movimiento revolucionario, en reconciliar las clases enemigas 1.

 

1. Mientras que la riqueza que se produce en el mundo esté en manos del 10% de los “privilegiados uncidos por la gracia de Dios”, el socialismo cristiano flaco favor le hace a los menos favorecidos; esto es, al proletariado. Mientras no desaparezca  la lucha de clases este tipo de socialismo, jamás podrá reconciliar las clases enemigas, que no sólo son contradictorias, sino que son extraordinariamente antagónicas. (A.R.P.)

 

 

Socialismo de cátedra: Denominación irónica aplicada a un grupo  de profesores y políticos alemanes libeles representantes de la escuela ético-social de la segunda mitad del siglo XIX, los cuales fundamentaron teóricamente, por primera vez, la idea de integración pacífica del capitalismo en el socialismo2. Figuraban entre los socialistas de cátedra Lorenz Stein, Adoph  Wagner, Gustav von Schmoller, Lujo Brentano y Werner Sombart.

 

 

2. La integración pacífica entre el capitalismo y el socialismo, es una idea prácticamente imposible de conjugar, debido a la lucha de clases existen entre ambas formaciones. En momentos puntuales puede surgir, pero al igual que mezclan do agua con aceite, en tanto y cuanto agites ambos líquidos tienden a unirse. En el momento que no se agiten los dos componentes acuosos, cada líquido se separan y toma su forma original. (A.R.P.)

 

 

Socialismo de estado: Tendencia política que no tiene nada de común con el socialismo marxista o socialismo revolucionario. El socialismo de Estado tiene de colectivismo solamente los programas de beneficio social que pretende, pero con una concesión a las masas y no como derecho de estas

3. El socialismo de Estado no busca la eliminación de la estructura estatal, sino antes bien la fortalece y mantiene la propiedad privada de los medios de producción.

 



3. Podemos decir que se trata de un socialismo paternalista. Por una parte, engaña al ciudadano concediéndoles ciertos beneficios, pero por otra, sustenta la piedra angular del capitalismo: la propiedad privada de los medios de producción. (A.R.P.)

 

 

Socialismo democrático: Ideología oficial del reformismo moderno, proclamada en el Congreso de Francfort 1951 de la Internacional socialista “Objetivos y tareas del socialismo democrático” y contrapuesta a la ideología del marxismo-leninismo. Las raíces teóricas del socialismo democrático arrancan del  neokantismo. Según esta ideología, el socialismo no constituye el producto de un desarrollo histórico natural 4, sujeto a ley; es una ideal moral, accesible por igual a los representantes de todas las capas de la sociedad.

 

4.  Poner esto en entredicho es negar al mismo tiempo, que la ideología capitalista no constituye el producto de un desarrollo histórico natural. Esta tendencia se debe sobre todo, a los reformistas, revisionistas y arribistas interesados en parar a toda costa la evolución mediante la revolución. (A.R.P.)



Socialismo ético: Interpretación neokantiana del socialismo, realizada a partir de loa ética de Kant. Los teóricos Kantianos burgueses y socialdemócatras (Cohen, Paul Natorp, Rudolf Stammler, Karl Vorlander y otros) al rechazar la filosofía del marxismo, el materialismo dialéctico, han intentando unir el  socialismo científico con la filosofía moral kantiana, entendiendo por ética una ciencia cuyo fin estriba en eliminar las contradicciones de la relaciones sociales 5. Se desechaban los problemas cardinales del marxismo (Las clases, la lucha de clases, la evolución social, la dictadura del proletariado, etc.) y se situaban en primer plano la relaciones morales y la idea del perfeccionamiento moral paulatino de la humanidad. Propagaron el socialismo ético, entre otros, Marx Adler (Austria) y Mijail Tugan-Baranovski (Rusia).

 

5. Este intento fue loable, pero no fue exitoso pues las relaciones sociales pueden ser beneficiosas por sus contradicciones, resultan ser nocivas cuando en dichas relaciones intervienen los antagonismos. El agua y el aceite cuando se agitan fuertemente ambos componentes se emulsionan, pero una vez reposados, se separan. (A.R.P.)

 

 

Socialismo Guildista: Corriente del pensamiento originada en Inglaterra a principios del siglo XIX, cuya idea principal es que los sindicato, transformados en guildas 6, deben ejercer el control de la industria y deben eliminar el sistema de salarios, asumiendo los obreros, junto con el Estado y los municipios en su caso,  la administración de la explotaciones, pero si que esto signifique que sena ello los propietarios de estas que pertenecerán a la colectividad.

 

 

6. Institución de carácter comercial desarrollada entre los siglos XI y XVI, fundamentalmente en los países germánicos y del norte de Europa, formada por los artesan9os y mercaderes que ejercían una misma profesión: la finalidad de las guildas era la defensa del comercio, la regulación de los precios y los monopolios y la seguridad de las comunicaciones. Era una asociación encaminada  conseguir a sus afiliados mejores condiciones comerciales. (A.R.P.)

 

 



Socialismo libertario 7: Corriente anarquista colectivista cuyas ideas principales son las siguientes:

 

1) Persigue destruir toda autoridad coercitiva. 2) Exige la propiedad común. 3) Cree en la felicidad de toda comunidad, basada en la asociación voluntaria y en la ayuda mutua, desarrollada en alto grado. 4) Parte de que en el hombre hay una bondad natural, tergiversada a  través de la historia. 5) Preconiza la transformación del orden actual mediante la revolución. 6) Sostiene que los obreros controlen directamente la industria y la agricultura, sin la intervención de ninguna institución con pode, como el Estado o cualquiera otra. 7) La vida en sociedad debe estar regida por compromisos de cada uno, establecido espontáneamente, como verdadero contrato social. 8) Los principales impulsadores de esta corriente fueron Miguel Bakunin (1814-1876) y Pedro Kropotkin (1841-1921)

 

 

7.  Este tipo de de Socialismo libertario anarquista sigue siendo una utopía, sin antes haber consolidado el Socialismo real y el Comunismo. (A.R.P.)

 

 

Socialismo verdadero: Variedad del socialismo pequeño-burgués surgida en Alemania en la década de 1840 (Karl Grun, Moses Hess, Hermanri Kriege, Otto Lunig, Hermann Puttmann). Los socialistas verdaderos consideraban el socialismo como una teoría por encima de las clases sociales 8, la declaraban realización de cierta esencia humana universal; negaban la lucha de clases y propugnaban la conciliación de las contradicciones sociales; exhortaban al proletariado a no participar en las revoluciones políticas. Marx y Engels combatieron esta ideología y el influjo de misma entre los obreros.

 

 

8.  El socialismo no puede ser una teoría por encima de las clases sociales, sino dejaría de ser  socialismo;  así que no es de extrañar  que tanto Calos Marx, como Federico Engels combatieran la falacia del “Socialismo verdadero”. Más bien habría que rebautizar el socialismo verdadero, como socialismo espurio. (A.R.P.)

 

 

 

El socialismo del siglo XXI: El socialismo del Siglo XXI 9 es un concepto ideado por A.V. Buzgalin, 10 en una publicación originalmente en ruso en 1996 y en español en el año 2000. En efecto el primer texto sobre el tema no es el de Heinz Dieterich Steffan, sino uno del autor ruso titulado “El Socialismo del siglo XXI” (160 pp., Guanabo, Cuba, Enero 20, 2000). El de Heinz Dieterich Stefan, 11 es posterior, a partir de 1996, y muy difundido desde el 30 de en ero de 2005, por el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez en ese entonces desde el V Foro Social Mundial.

 

El modelo de Estado socialista del socialismo del siglo XXI es un socialismo revolucionario que bebe directamente de la filosofía y la economía marxista, y que se sustenta en cuatro ejes: el desarrollismo democrático regional, la economía de equivalencias, la democracia participativa y las organizaciones de base. Dieterich, en su obra Socialismo del Siglo XXI se funda en la visión de Karl Marx sobre la dinámica social y la lucha de clases. Dieterich profundiza la teoría marxista y la actualiza en el mundo de hoy, incorporando los avances del conocimiento, las experiencias de los intentos socialistas, develando sus limitaciones, entregando propuestas concretas tanto el la economía política como en la participación democrática de la ciudadanía  para construir una sociedad libre de explotación. Resumiendo, el socialismo del Siglo XXI supone que es necesario un reforzamiento radical del poder estatal democráticamente controlado por la sociedad para avanzar el desarrollo.

 

9. Posiblemente sea un ensayo teórico-revisionista para mejorar la evolución del marxismo, pero si  resulta un ensayo teórico-reformista, podría ser un engendro más de los muchos que se han hecho para denigrar el marxismo-leninismo. (A.R.P.)

 

10. Nacido en Rusia fue el inventor del Socialismo del siglo XXI. Dentro de un todo tiene alguna parte de razón al manifestar que la Unión Soviética  cayó porque allí surgió una gran capa de población inclinada al pancismo (Actitud de la persona que acomoda su comportamiento a lo que cree más conveniente y menos arriesgado para sus proyectos y tranquilidad: Su pancismo raya en la cobardía. Los hijos del barrio “bohemio”  del Arbat moscovita, son los nietos de los revolucionarios rusos que en su día dieron la sangre y la vida, en aras del surgimiento de una nueva era donde sus hijos y nietos no sufrieran la explotación del hombre por el hombre. Estos nietos son los nuevos pancistas que puede aludir Alexandre V. Buzgalin. (A.R.P.)

 

11. Nacido en Rotemburgo del Wulmme, Alemania en 1943. Heinz Dieterich Steffan supone uno de los referentes a la hora de analizar la deriva teórica-práctica de la izquierda anticapitalista posterior a la caída de la URSS. SUs aportes suponen una alternativa a la falta de un proyecto de construcción económica, política y social de la cual adolecía el movimiento altermundista surgido durante la década de 1990. Es de esperar que del llamado Socialismo del siglo XXI, se apliquen consecuencias revisionistas y dejen de lado las aberraciones reformistas. (A.R.P.)

 

 

 

 

 

Revolucionaria. Hugo Chávez expresó Hemos asumido el compromiso de dirigir la Revolución Bolivariana hacia el socialismo y contribuir a la senda del socil8ismo, un socialismo del siglo XXI que se basa en la solidaridad, en la fraternidad, en el amor, en la libertad y en la igualdad en un discurso a mediado del 2006. Además este socialismo no está predefinido. Más bien dijo Chávez “debemos transformar el modo de capital y avanzar hacia un nuevo socialismo que se debe construir cada día”

 

En un “Aló Presidente” (Programa de televisión moderado por el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez) en el 2003, Hugo Chávez también presentó la propuesta de Giulio Santosuosso para el Socialismo del Siglo XXI, Socialismo en un paradigma liberal, el cual el autor opina que en el mundo está en curso una extensa realineación ideológica, consecuencia del cambio de paradigma en curso de la economía; el viejo modelo ha muerto, pero todavía no han aparecido los nuevos criterios que permitirán la realineación conceptual 12.

 
 

12.  El capitalismo está agonizando pero no muerto. Antes de morir dará de coletazos como buen tiburón que es, llevándose por delante a todo aquel que pille. Si a esto hay que añadirle que todavía no han aparecido los nuevos criterios que permitirán la realineación conceptual del socialismo del Siglo XXI, la desaparición  por la vía  democrática liberal irá para largo. (A.R.P.)

 

 

Para contribuir a la búsqueda de dichos criterios, propone releer la historia de la economía política, porque en su opinión alguna de ellos no logran hacerse manifiestos por confusiones conceptuales en esa disciplina: la primera ocurrida a los largo de doscientos últimos años, identificó al capitalismo con el liberalismo; la segunda, ocurrida en este siglo, identificó al socialismo con el estatismo 13. Su tesis es que el camino más expedito para alcanzar la sociedad más justa a la que todos hemos anhelado, se con sigue con una alianza entre el socialismo y el liberalismo, una vez que socialismo hay dejado a un lado al estatismo y el liberalismo haya dejado a un lado el capitalismo14.  

  

 

13.  Los tres grandes pensadores C. Marx, F. Engels y V. Lenin no preconizaban que el socialismo fuera estatista. Que el socialismo se desarrollara  a medida que la ciencia y la técnica aportasen nuevos elementos que ayudasen al movimiento del socialismo para que no quedas anclado en el inmovilismo. (A.R.P.)

 

 

14.  Esto sería lo más adecuado, equitativo y justo, pero a mi entender, no deja de ser un pensamiento ecléctico. No se puede conciliar este razonamiento entre  sistemas antagónicos. Se puede acomodar dos sistemas contradictorios, los antagonismos difícilmente se pueden conformar. (A.R.P.)

 

 

Estructura ideológica: Dieterich no establece un modelo único y absoluto para lograr una sociedad democrática, participativa, socialista y sin clase sociales. Más bien establece  una metodología para elaborar lo que denomina  El Nuevo Proyecto Histórico cuyos pilares estratégicos son el Bloque Regional de poder (BRP), que sería la integración económica y política de los Estados Progresista de la Región y el Bloque Regional de Poder Popular (BRPP) que correspondería a la coordinación continental de los movimientos sociales que apoyan a la implementación del socialismo del Siglo XXI. A eso, se suma la colaboración igualitaria y solidaria entre los Estados y los movimientos sociales, es decir, entre el BRP y el BRPP. La autogestión y la idea de Comunidades Creativas y Sostenibilidad, ideario de Enzo Manzini y la Red Mundial para el Diseño Sostenible son igualmente prácticas tangibles de nuevo modelo.

 

 

Economía de equivalencias: Dieterich en el socialismo del Siglo XXI propone un modelo económico que no está basado en el principio de mercado, fundamentando la economía de mercado y del capitalismo, a los que considera fuentes de las asimetrías sociales y de la sobre explotación de los recursos naturales.

 

Propone lo que denomina una economía de valores fundado en el valor del trabajo que implica un producto o servicio y no en las leyes de la oferta y la demanda..Este valor del trabajo se mediría sencillamente por el tiempo de trabajo que precisa un determinado producto o servicio; además de los valores agregados a dicho trabajo, es decir,  el tiempo de trabajo que se usó para reproducir las herramientas o servicios que se emplean en el trabajo mismo, lo cual a su vez lleva a un ciclo complejo de tiempos de trabajo sumados recíprocamente. Para solucionar el problema práctico que implica la teoría de la Economía de valores.

 

Para Dieterich, el modelo de mercado ha puesto su atención principalmente en los alcances de la ganancia y la propiedad, desvirtuando completamente el sentido de la economía. En este sentido, el modelo responde a lo que denomina “crematística”, una perversión de la economía donde el acento está puesto en la ganancia. Según él, la economía política no debe operar como la forma en que unos pocos se hacen, sino con un criterio de productividad 15.

 

15. De hecho y derecho del más fuerte, la actual economía política se hace, precisamente, para que unos pocos se hagan más ricos, a costa de empobrecer a la mayoría de los ciudadanos.  El problema no estriba aplicando un criterio de productividad, sino  adonde va a parar el beneficio de la productividad y como se reparte la productividad lograda. (A.R.P.)

 

 

En este sentido, el precio, como principio operativo y cibernético  de la economía, determina dónde invertir, por cuanto trabajar, cuanto y qué comprar, cuánto y cuándo ahorrar y es, por lo tanto, la hebra ordenadora del sistema.

 

Para que el mercado funcione eficientemente, debería existir el suficiente poder adquisitivo para comprar, una formación libre del precio, un mercado que no sea monopólico de un Estado de derecho eficiente y no corrupto.

 

Ante la eficiencia ordenada del sistema de libre mercado, la planificación de un modelo socialista resulta insuficiente y deformadora de la interconexión en un mundo globalizado 16. Así, los incesantes intentos históricos para remediar las injusticias de la economía de mercado han fracasado sistemáticamente. La correcciones del sistema a través de la educación, la redistribución estatal, la expropiación y la democracia obrera, no han resuelto satisfactoriamente la impecable eficiencia cibernética que el modelo de libre mercado impone a las redes sociales.

 

16. Curiosamente esta interconexión ha sido cauce para globalizar las ganancias entre las multinacionales, trasnacionales y corporaciones financieras,  a costa de socializar las pérdidas entre el resto de la pequeña y mediana empresa y el ciudadano en general. (A.R.P.)

 

 

El modelo del Socialismo del Siglo XXI debería estar basado en una ecuación donde el valor (precio) del producto, se vinculara la equivalencia sobre los tiempos de producción y a la democracia participativa. De esta manera,  la  redistribución y los cambios a nivel de educación deberían recoger los intereses reales  de las personas que estructuran y definen los sistemas  político-económicos. Para Dieterich, el socialismo del siglo XXI es la ampliación y profundización de la democracia participativa, donde la dimensiones de lo cotidiano,  lo estético y lo racional-crítico den estar incorporados al cambio social 17.

 

 

17. Bellísimo razonamiento, pero cómo se resuelven los antagonismos dentro de las contradicciones existentes en la sociedad, para poder trasladar a buen fin el cambio social. (A.R.P.)

 

 

 

 

 

 

 

 

 

FORMACION SOCIECNOMICA DEL SOCIALISMO REAL

 

 

Aunque diagnosticada mucho antes por los marxistas utópicos la formación socioeconómica socialista, no fue  asentada hasta  la aparición  del  colosal  trabajo científico teórico de Carlos Marx y Federico Engels y más tarde desarrollada cuantitava y cualitativamente,  por el genial pensador Vladimir I. Lenin 18.

 

Esta se empezó a desarrollar después del año 1917 d.d.n.e. a raíz de la finalización de la revolución bolchevique. Es decir, que desde esa fecha hasta nuestros días 2013, con diversos cambios cuantitativos y cualitativos en cada país, el socialismo se consolidará antes o después en constante lucha ideológica contra la formación socioeconómica capitalista.

 

 

18. Lenin nació el 22 de abril de 1870 en Uliánovsk y murió el 21 de enero en Gorki Léninskiye. Su muerte acaecida a los 54 años, supuso a medio plazo, un  paso atrás en el desarrollo del socialismo real o marxista, tal cual en sus profundos trabajos quería que fueran desarrollándose según sus tesis, y  que desgraciadamente sus predecesores no quisieron o no pudieron desarrollar. (A.R.P.) 

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CONFORMACION Y DESARROLLO DE LA ECONOMIA DE LA SOCIEDAD SOCIALISTA  **

 

Leyes económicas de la conformación del socialismo y etapas de su desarrollo. El socialismo, primera fase del modo comunista de producción en  La Gran Revolución Socialista de Octubre, dio comienzo a la transformación revolucionaria de la sociedad capitalista en sociedad socialista. Esta transformación se realiza durante un período especial de transición del capitalismo al socialismo que termina con la edificación de este último 19. 

 

19. Aunque los comienzo fueron prometedores durante  el período que abarca 1917-1989, el socialismo no llegó cuajar del todo, debido sobre todo al estatismo interior del país, y a los errores ortodoxos de no saber querer y poder para abrir la filosofía y la economía marxista-leninista a los avances tecnocientificos, que dieron lugar en dicho período. (A.R.P.)

 

Las leyes socioeconómicas esenciales del surgimiento y la con formación del socialismo fueron descubierta por los fundadores del marxismo-leninismo. En u forma más generalizada se exponen el la Crítica del Programa Gotha (Capítulo IV), de Marx; en El Estado y la revolución (Capítulo V), Las tareas inmediatas del Poder soviético, Economía y política en la época de la dictadura del proletariado, Sobre el impuesto en especie, Sobre las cooperativas, y en varios más de Lenin. Una síntesis de la experiencia  de la nueva sociedad en la URSS y, posteriormente, en otros países del sistema mundial del socialismo, contienen los documentos de PCUS y de otros partidos comunistas y obreros.

 

 

Necesidad y esencia del período de transición del capitalismo al socialismo. La necesidad objetiva del paso del capitalismo al socialismo viene determinada por el hecho de que a medida que evoluciona el régimen  capitalista maduran en él las premisas materiales y sociales para un régimen social más avanzado para el socialismo. Esas premisas son: un elevado nivel de las fuerzas productivas, el carácter social de la gran producción mecanizada y una clase obrera revolucionaria con su partido marxista-leninista al frente. Con la formación de la economía capitalista mundial cristalizaron las condiciones para el triunfo de la revolución socialista  a escala universal. Ello dio pie a Lenin para deducir, ya a principios del siglo XX, que el conjunto del sistema mundial del capitalismo había madurado 20 para su transformación socialista.

 

 

20.  La deducción  del genial pensador se derrumbó en el año 1988, a la caída del sistema socialista que habían implantado en la URSS. Este socialismo ortodoxo cerrado a cal y canto a la evolución de los cambios de la sociedad,  los errores en la distribución de las mercancías y, sobre todo, el no saber aprovechar alguna cosas buenas que el capitalismo tiene. En esto, el partido comunista de China sí que sabido aprovechar algo bueno del capitalismo: La distribución de las mercancías no estatalizadas. (A.R.P.)

 

 

La fuerza social llamada a ejercer la misión histórica de destruir las relaciones capitalistas y crear un modo de producción nuevo, comunista, es la clase obrera que actúa en alianza con todos los trabajadores. La vanguardia de la clase obrera es el partido comunista, el cual vincula el socialismo científico con el movimiento obrero de masas, inculca la conciencia socialista al proletariado, le ayuda a comprender su gran misión histórica y los problemas que tiene planteadas, así como hallar la forma de solucionarlos, y aparece como inspirador y organizador de los trabajadores en la lucha revolucionaría.

 

El tránsito al socialismo implica la creación de unas relaciones sociales nuevas, básicamente distintas de las relaciones capitalistas que no pueden ser formadas en las entrañas del capitalismo. De ahí que, tanto que sistema social, el socialismo no puede surgir de las entrañas del capitalismo. “La diferencia entre la revolución socialista y la revolución burguesa –dice Lenin—está precisamente en el segundo caso, existen formas plasmadas de relaciones capitalistas, mientras en el Poder soviético… no se encuentra con relaciones plasmadas21.

 

 

21.  V.I. Lenin. VII Congreso Extraordinario del PC (b) de Rusia. Obras completas, tomo 36, páginas 6-7.

 

 

Bajo el imperialismo, la vigencia de la ley del desarrollo económico y político desigual del capitalismo agudiza de manera notable las contradicciones de dicho sistema y brinda la posibilidad de que se den simulaciones revolucionarias en diferentes países en períodos distintos. En consecuencia tal como previera Lenin, la revolución socialista no triunfa simultáneamente en todos los principales países capitalistas, sino primero en uno o en varios en el eslabón más débil  del sistema imperialista. En virtud de las circunstancias históricas, el  primer Estado socialista surgió en Rusia.

 

El contenido económico fundamental de la revolución socialista es la supresión de las relaciones de producción capitalistas y la afirmación de las relaciones de producción socialista, que se basan en la propiedad social de los medios de producción y el trabajo libre de explotación. De este modo queda resuelto el conflicto que existe bajo el capitalismo entre el carácter social de la producción y la forma capitalista privada de la apropiación de los frutos del trabajo.

 

La reorganización socialista de la sociedad en la Rusia soviética comienza por la implantación revolucionaria de la dictadura del proletariado. Se trata de un Estado de nuevo tipo que aparece con el principal instrumento de defensa de las conquistas revolucionarias y de la construcción del socialismo. La clase obrera, en alianza con el campesinado y con otros sectores laboriosos, se vale del Estado creado por él para acabar definitivamente con el poder económico, político e ideológico de la burguesía y cumplir su tarea principal: la de edificar una nueva sociedad.

 

Sostienen los revisionistas de derecha que el socialismo puede surgir de las entrañas del capitalismo: Los revisionistas de “izquierda” y los maoístas abogan por una revolución socialista hecha sólo por la fuerza de las armas, rechazan la vía pacífica de desarrollo de la revolución socialista y suplantan el marxismo-leninismo por la voluntarista “teoría de la violencia”, por una interpretación militarista del proceso histórico del tránsito al socialismo. En realidad, tal como demuestra la experiencia de los países del sistema socialista mundial, el socialismo só9lo puede afirmarse por la vía revolucionaria, siendo de notar que la conquista del poder político por la clase obrera puede  realizarse de distintas formas, incluida las vía pacífica, según la correlación de fuerzas en pugna del proletariado  y la burguesía. La condiciones históricas concretas del país que se trate, la experiencia política de la clase obrera y de las otras fuerzas revolucionarias y la agudeza de la lucha de clases determinan la forma de la dictadura del proletariado. En la URSS fue el Poder soviético, en otros países socialistas, el poder de la democracia popular.

 

 

Necesidad del, período de transición del capitalismo al socialismo. El feudalismo y el capitalismo tienen el mismo tipo de base –la propiedad privad--, debido a lo cual el modo de producción capitalista surgió y se desarrolló espontáneamente y por vía evolutiva ya en la sociedad feudal.  Diferencia de ello, las bases de la economía burguesa y de la socialista son diametralmente opuestas: la primera se asienta sobre la dominación de la propiedad privada y la segunda sobre la propiedad social de los medios de producción; el régimen capitalista es un régimen de explotación del hombre por el hombre y el socialismo libera al hombre para siempre de toda explotación. . Esta es la razón de que el sistema económico socialista surja y se afiance a la vez que se suprimen las relaciones de producción capitalista. 

 

La eliminación de la economía capitalista y la creación de la socialista no pueden produkcrse de golpe, en el curso de la conquista del poder político por el proletariado. Hace falta expropiar a la gran burguesía, entregar los medios de producción en propiedad de todos los trabajadores y organizar el funcionamiento de las empresas sobre bases nuevas, socialistas. Este cometido, ya de por sí extraordinariamente difícil, se complica por el hechote que la clase obrera carece de experiencia de gestión de la economía nacional. Se requiere mucho tiempo para llevar a cabo la reorganización socialistas de las pequeñas explotaciones campesinas, muy numerosas en casi todos los países capitalistas, así como para alcanzar el nivel de desarrollo de las fuerzas productivas necesario para elevar el bienestar material y la cultura de los trabajadores. En el curso de la edificación de la nueva sociedad hay que superar la tenaz resistencia de las clases explotadoras derrocadas 22.

 

22.  Este es el principal escollo para la edificación de una nueva sociedad, no basada en la explotación del hombre por el hombre. Las clases explotadoras al igual que los tiburones, antes de morir, darán cuantos coletazos sean necesarios. (A.R.P.)

 

 

Y es para la realización de estos cometidos para lo que se requiere un periodo histórico especial: el de la transformación revolucionaria de la sociedad capitalista en sociedad socialista, período que comienza cuando el proletariado conquista el poder e instaura su dictadura  y termina con la victoria plena del socialismo. La esencia económica de este periodo consiste en la eliminación de la base capitalista y la creación de una base nueva, socialista, del sistema económico del socialismo. Señalaba Lenin que la meta de la construcción del socialismo “no puede alcanzarse de golpe; ello exige un período de transición bastante largo del capitalismo al socialismo….porque se necesita tipo para introducir cambios radicales en todos los dominios de la vida y porque la inmersa fuerza de la costumbre de dirigirá de modo pequeño burgués la economía sólo puede superarse en una lucha larga y tenaz23.

 

 

23.  V.I. Lenin. Un saludo a los obreros húngaros. Obras completas, tomo 38, páginas 385-386.

 

 

La duración del período  de transición para los países que emprenden el camino de desarrollo socialista depende de las condiciones históricas concreta, esto es, del nivel de las fuerzas productivas, del grado de desarrollo de los diversos tipos de propiedad, de la correlación de la fuerzas de clase, de la tradiciones históricas y nacionales, del grado en que la viejazo ideología perdura en la conciencia, etc, etc. Es también considerable la importancia de la situación exterior. En el contexto, actual, resultan decisivos para reducir el período de transición la existencia del sistema socialista 24, del crecimiento sostenido de su fuerza y poderío y el fortalecimiento de la cooperación mutua de los Estados socialistas. 

 

 

24.  La transición del sistema del socialismo real se vio truncado a raíz de la caída del socialismo en la URSS en 1989. Flaco favor le hizo MIjaíl Sergéyevich  Gorbachov, ultimo Secretario General del PCUS, al movimiento de expansión y  consolidación  del socialismo tanto en Rusia como en los países que optaron por el sistema socialista real. Con esa actitud y aptitud, “Gorby” ha hecho retroceder el avance del proletariado en el mundo entero. Para restablecer este daño e inmensa  pérdida, harán falta algunos decenios para    restablecer y  recuperar la confianza de la clase trabajadora en el socialismo real. (A.R.P.)

 

 

 

Leyes generales del período de transición. A todos los países que han emprendido las vías de desarrollo socialista les son inherentes unas regularidades generales. Ello se debe, primero, el contenido común de la revolución proletaria; segundo, a que el objetivo y el resultado final de las transformaciones revolucionarias son para los países que han iniciado el período de transición los mismos: la construcción del socialismo; tercero, a que en todos estos países la pri8ncipal fuerza social de las transformaciones revolucionarias es la clase obrera, dirigido por el partido marxista-leninista.

 

Entre las leyes fundamentales, comunes para todos los países, de la transformación revolucionaria de la sociedad capitalista en sociedad socialista figuran:

 

            La dirección de las masas trabajadoras por la clase obrera, cuyo núcleo es el partido marxista-leninista, en la realizac8ón de la revolución proletaria en una u otras formas y la implantación de esta o la de otra forma de dictadura del proletariado; la alianza de la clase obrera con las masas campesinas  fundamental  y  con   los  demás sectores trabajadores;

la abolición de la propiedad capitalista y el establecimiento de la propiedad social de los medios de producción la transformación socialista gradual de la agricultura; el  desarrollo planificando de la economía orientado a la construcción del socialismo y el comunismo y a elevar el nivel de vida de los trabajadores; la revolución socialista en el terreno de la ideología  y de la cultura y la creación de una intelectualidad numerosa, fiel a la clase obrera, al pueblo trabajador y a la causa del socialismo; la supresión del yugo nacional y la implantación de la igualdad de derechos y la amistad fraternal entre los pueblos; la defensa de las conquistas del socialismo frente a los atentados de los enemigos de fuera y de dentro; la solidaridad de la clase obrera de cada país con la clase obrera de los demás países, esto es, el internacionalismo proletario.

 

La vida ha confirmado la justeza de previsión de Lenin en cuanto a la diversidad de formas y métodos de la construcción socialista en los diferentes países a partir de las leyes generales de la conformación  y el desarrollo del socialismo. En cada país que ha emprendido el camino socialista del tránsito al socialismo se lleva a cabo habida cuenta de las particularidades nacionales y del nivel de desarrollo. “Todas las naciones llegarán al socialismo, --dice Lenin--, eso es inevitable 25, pero no llegarán de la misma manera; cada una de ellas aportará su originalidad en una u otra forma de la democracia; en una u otra variante de la dictadura del proletariado, en uno u otro ritmo de las transformaciones socialistas de los diversos aspectos de la vida social” 26.

 

 

25.  Lamentablemente la previsión del gran revolucionario y pensador ruso, duro desde 1917 a 1989 en lo que se refiere a su propia Patria, puesto que los enemigos internos y, en menor medida, los enemigos externos fueron los principales causantes  para derrocar la implantación del socialismo real, que tanta sangre y sacrificios le costó al pueblo soviético. (A.R.P.)

 

 

26.  V.I. Lenin. Sobre la caricatura del marxismo y el “economismo imperialista”. Obras completas, tomo 30, página 123.

 

 

Ahora bien, tal como reafirma la realidad, se mantienen en pie y conservan su vigor las leyes fundamentales generales de la revolución socialista y de la construcción del socialismo 27. 

 

27. Las personas mueren y las ideas siguen. Dichas leyes continúan y continuarán en vigor hasta la construcción total socialista. No obstante, habrá que empezar a establecer la confianza entre la clase trabajadora y de todos aquellos humanistas, que quieren lo mejor para los hombres libres de explotación. (A.R.P.)

           

 

Los revisionista de derecha e “izquierda” niegan las leyes de la construcción socialista, comunes para todos los países, que fueron descubiertos por los clásicos del comuni8smo científico y probadas en la práctica de la edificación del socialismo en la URSS 28, y en otros países socialistas. El exagerar las peculiaridades del desarrollo de los distintos países hacia el socialismo sirve como demuestra la experiencia, de base teórica para el nacionalismo.

 

 

28. Período comprendido ente 1917-1989. Después optaron por un capitalismo espurio. Si la propaganda burguesa durante ese larguísimo período sostuvo una batalla ideológica contra el socialismo real, machacando una y otra vez con su propagan envenenado a la opinión pública de que la URSS era un Estado dictatorial e imperialista, donde confluía una gran miseria. Ahora que pasaron de socialismo solidario con la distribución de la riqueza producida por los trabadores y campesinos, a un capitalismo neoliberal en que la riqueza producida por las fuerzas del trabajo, va a parar insolidariamente   a las manos de unos pocos privilegiados, lo que conlleva que si antes, según la propaganda burguesa estaban mal, ahora se está comprobando que están considerablemente peor. De esto nada dice ahora la propaganda burguesa, no les interesa, puesto una vez metidos en el redil, no van a tirar piedras sobre su propio tejado. (A.R.P.)

 

 

 

Importancia del artículo de Lenin Economía y política en la época de la dictadura del proletariado. Lenin escribió este artículo como motivo del segundo aniversario del Poder soviético, es decir en un período en que el país atravesaba las gravísimas condiciones de la guerra civil y de la intervención extranjera. Pese a que quedó inconcluso, los problemas planteados y abordados en él constituyeron una contribución fundamental a la  teoría de la revolución socialista y de la construcción del socialismo.

 

Analizase en este escrito una cuestión decisiva para la teoría y la práctica de la edificación socialista: la relativa a la necesidad objetiva y a la esencia del período de transición del capitalismo al socialismo, en tanto que época histórica de transformación revolucionaria de la sociedad. Al comienzo de esta época, la economía de Rusia constituía al decir Len in la “lucha en que sus primeros pasos sostiene el trabajo mancomunado al modo comunista –en escala única de un enorme Estado— contra la pequeña producción mercantil, contra el capitalismo que sigue subsistiendo y contra el que revive sobre la base de esta producción” 29.

 

 

29.  V.I. Lenin. Economía y política en la época de la dictadura del proletariado. Obras completas, tomo 39, página 272.

 

 

A partir de una síntesis de la experiencia   de los dos primeros años de edificación socialista, Lenin definió los principales tipos de economía social comunes para todos los países, las fuerzas de clase fundamentales que corresponden a los mismos, las formas de lucha de clase y la política de la clase obrera dimanante de ello en el período de transición. El proletariado, como clase dominante, concentra en sus manos el poder estatal, dispone de los medios de producción ya socializados y aplasta a la resistencia de las clases explotadoras.

 

La elaboración del problema tocante a la relación de economía-política, el papel del Estado en la construcción socialista, Lenin prosiguió en varios de sus trabajos posteriores. Sus planteamientos siguen siendo válidos en el presente. La estrategia económica del PCUS arranca de las demandas de la sociedad socialista desarrollada que llaman a la puerta. Los partidos comunistas de los países que han emprendido la senda del socialismo se apoyan también en las ideas de Lenin a la hora de elaborar su política económica.

 

En nuestros días mantiene su valor de actualidad la crítica leninistas de los líderes  de la II Internacional, los cuales “o se desentienden de cualquier reconocimiento de todo un período histórico de transición del capitalismo al comunismo o consideran que su tarea es inventar planes para conciliar ambas fuerzas en pugna, en lugar de dirigir la lucha en una de estas fuerzas” 30. El artículo Economía y política en la época de la dictadura del proletariado nos ayuda a demostrar la inconsistencia de las ideas de los revisionistas de “izquierda”, como también del maoísmo, el cual promueve la tesis de que “la política es la fuera de mando” y suplanta la dirección de la construcción científica de la construcción socialista por el aventurerismo eco nómico 31.

 

30.  V.I. Lenin. Economía y política en la época de la dictadura del proletariado. Obras completas, tomo, 39, página 272.

 

31.  La Socialdemocracia es la que más apoya este comportamiento en casi todos sus actos, como partido revisionista de “Izquierda” (A.R.P.)

 

 

 

Principales estructuras económicas en el período de transición del capitalismo a socialismo. La economía de cada país en el período de transición del capitalismo al socialismo se  caracteriza por su multiplicidad de estructuras, eso es, por la existencia de varios tipos de economía social con unas relaciones de producción propias de ellos y con sus leyes económicas específicas. El número de estructuras y su peso relativo en la economía pueden ser distintos según las particularidades históricas concretas de cada país. En la URSS fueron cinco: el tipo socialista, la pequeña producción mercantil, el capitalismo privado, el capitalismo de Estado y la economía campesina patriarcal.

 

Surgimiento del sector socialista y su papel rector en la economía.  El surgimiento y el avance del sector socialista y su transformación, en definitiva, en el tipo de economía única y absoluta es resultado de la socialización socialista de la producción. Dicha socialización consiste en la transformación revolucionaría de la propiedad privada y la conversión voluntaria de la propiedad privada de los pequeños productores en propiedad socialista; en la organización de un tipo nuevo, socialista, de producción social.

 

La transformación de los medios de producción pertenecientes a los monopolios capitalistas o capitalistas individuales en propiedad socialista se efectúa la más de las veces mediante la nacionalización socialista, es decir, expropiando por vía revolucionaria los medios de producción a las clases explotadoras y entregándolos  en propiedad a todos los trabajadores encarnados por el Estado proletario.

 

La nacionalización socialista difiere de manera cardinal de la capitalista. Esta última convierte la propiedad capitalista privada en propiedad capitalista estatal en interés de la clase de la burguesía, no elimina la naturaleza capitalista de la propiedad y, por tanto, no suprime las relaciones de producción capitalistas.

 

La naciuonalización capitalista elimina la base de la explotación capitalista de los trabajadores. La conversión de los medios de producción en prolpiedad del pueblo crea las condiciones necesarias para que se conformen unas relaciones de producción nueva, socialista, libre de toda explotación, y permite supeditar la actividad económica de las empresas a los intereses de toda la sociedad. En virtud de ello, la nacionalización socialista de los medios de producción 32 básicos y de los bancos es una de las principales reivindicaciones programáticas de los partidos marxistas-leninistas.

 

32. La propiedad privada de los medios de producción, es el santo sanctórum de la burguesía capitalista y del neo liberalismo. (A.R.P.)

 

 

La dictadura del proletariado lleva a cabo la nacionalización principalmente confiscando  por completo y sin compensación de la propiedad de la gran burguesía. En ciertas circunstancias, es factible una nacionalización que indemnice parcialmente a las empresas y los bancos pertenecientes a la burguesía. A este respecto Lenin señala: “Marx tenia profundísima  razón cuando enseñaba a los obreros la importancia que tiene conservar la organización de la gran producción  precisamente para facilitar el paso al socialismo y les hacia ver que era admisible por completo  la idea de pagar bien a los capitalistas, de indemnizarlos en el caso… de que las circunstancias obligasen a los capitalistas a someterse pacíficamente y a pasar de una manera organizada y culta al socialismo respaldándose en la indemnización 33.

 

 

33.  V.I. Lenin, Acerca del  infantilismo izquierdista” y del espíritu del pequeñoburgués. Obras completas, tomo 36, páginas 305-306.

 

 

En la URSS, la nacionalización se llevó a término mediante la confiscación  obligatoria y total de los medios fundamentales de producción y de los bancos pertenecientes al gran capital. La necesidad de apelar a este recurso se debió a la encarnizada lucha que la burguesía desató contra el Poder de los Soviets, lucha que comenzó por el sabotaje contrarrevolucionario y desembocó en la guerra civil y la intervención militar extranjera..

 

El Poder soviético llevó a cabo también la confiscación de la propiedad privada terrateniente de los medios de producción y la nacionalización de toda la tierra, la cual pasó a ser propiedad de todo el pueblo. Una parte de la tierra agrícola nacionalizada  se utilizó para la creación de empresas del Estado (sovjoses), siendo entregada la mayor parte en usufructo gratuito a los campesinos. La inmensa importancia de la nacionalización de la tierra radica en que creó las condiciones más propicias para el paso gradual a las formas socialistas de producción en el agro.En los otros países que iniciaron el camino del socialismo, la nacionalización de las empresas y los bancos se produjo en un espacio de tiempo más largo. La principal peculiaridad de este proceso fue que la nacionalización socialista estuvo precedida por transformaciones democráticas en loa economía, las cuales habían sido puestas en práctica  en el período en que el régimen de democracia popular ejercía la función de dictadura democrática revolucionaria de la clase obrar y del campesinado.

 

La revolución proletaria se hizo en los países de democracia popular cuando el socialismo había triunfado en la URRS, en un contexto en que se fortalecían el movimiento obrero internacional y la alianza del proletariado con todas las masas de trabajadoras, y se debilitaban las posiciones del capitalismo. Ello permitió efectuar la nacionalización de las fábricas y los bancos no sólo mediante su confiscación sin indemnización alguna, sino también compensando parcialmente a la burguesía.

 

Pese a toda su inmensa importancia, la nacionalización socialista no es más que el comienzo de la transformación socialista de la producción. Lenin recalca que, después de confiscación de las empresas capitalistas, es muy importante socializar la producción en la práctica, asegurar la contabilización y el control por todo el pueblo de la producción y la distribución de los bienes 34 y dominar la ciencia y el arte de la dirección del proceso productivo.

 

 

34. La mala distribución de los bienes fue un fallo que cometió el socialismo, que se que cerró a cal y canto en una ortodoxia socialista  y no supo aprovechar algo eficaz del capitalismo: la distribución de los bienes y de las mercancías. (A.R.P.)

 

 

El sector socialista se amplía además como resultado de la transformación, a título voluntario de la pequeña propiedad privada de los campesinos y artesanos en propiedad cooperativa socialista.

 

Este sector desempeña el papel principal el papel principal en la economía del período de transición. Ello viene condicionado ante todo por el hecho de que tiene por base la propiedad social de los medio de producción y unas relaciones de cooperación de camaradas y de asistencia mutua de trabajadores libres de toda explotación. Ocupa las posiciones clave del la economía y abarca, en primer término, las grandes empresas que tienen un nivel económico y técnico mucho más elevado que las empresas capitalistas privadas, sobre todo las pequeñas.

 

Las estructuras no socialistas. En la economía del período de transición ocupa un lugar prominente la pequeña producción mercantil, que comprende las pequeñas explotaciones de los campesinos  y artesanos. Este tipo de economía se asienta en la propiedad privada de los medios de producción. Ahora bien, el origen de esta propiedad difiere del de la propiedad de la gran burguesía, puesto que se trata del trabajo individual acumulado del propio productor. El proletariado tiene en cuenta en su política la naturaleza, basada en el trabajo, de la propiedad de los pequeños productores y que los campesinos y los artesanos aparecen como aliados suyos en la lucha contra la burguesía.

 

Por otra parte, la pequeña producción mercantil sigue siendo una ase para el surgimiento del capitalismo, dado que el período de transición continúa la diferenciación de los campesinos en ricos, que mantiene la hacienda sobre principios capitalistas, y en pobres. El Estado socialita procura hacer frente al progreso diferenciador del campesino; presta ayuda económica a los campesinos trabajadores y pone restricciones a los ricos, a resultas de lo cual tiende a prevalecer en el campo el campesino medio.

 

El capitalismo privado comprende las empresas de los capitalistas pequeños y medianos de la industria y el comercio y las haciendas de los campesinos ricos en el campo. Su existencia se debe a que el Estado proletario no puede nacionalizar de golpe todas las empresas, sobre todo las pequeñas en vista de su gran dispersión. El Estado, haciendo uso de los resortes económicos, administrativos  y jurídicos, regula las dimensiones y la orientación de la actividad del capitalismo privado.

 

El peso relativo del capitalismo privado en la economía del período de transición es escaso.

 

En algunos países  socialistas desempeñó cierto papel en la economía del período de transición e capitalismo de Estado. En dicho período, este defiere de manera cardinal del capitalismo de Estado que rige bajo el dominio de la burguesía y comprende a los capitalistas que entablan relaciomnes contractuales con el Estado socialista y se compromete a desarrollar sus actividades en esta o la otra esfera de la economí8a en las condiciones y dentro de los límites fijados por los contratos.

 

La importancia y las formas del capitalismo de Estado en los países que construyen el socialismo dependen de las condiciones históricas concreta de cada uno de ellos.

 

En varios países socialistas (En la RDA, por ejemplo) se propagó, el período de transición, el tipo de de empresas mixtas-estatales.

 

En los países  en que se conserva parcialmente, hasta la revolución socialista, la economía de subsistencia, existe a principios del período de transición la economía patriarca, que comprende las explotaciones campesinas no vinculadas al mercado que mantienen una producción natural basada en unos instrumentos de trabajo rudimentarios.

 

El Estado socialista contribuye a impulsar las fuerzas productivas de las explotac89ones campesinas de subsistencia y a su paso a la senda socialista a través de los distintos tipos de cooperativas. La experiencia acumulada en la URSS y otros estados socialistas en este ámbito es de gran interés para los países que se han sacudido el yugo colonial.

 

Contradicciones del período de transición. El hecho de que en el período de transición existan diferentes formaciones socioeconómicas no significa que cada una de ellas se desarrolle aisladamente. Hay entre todas un intercambio de actividad económica. El sector principal y el más avanzado, el socialista, es el que ejerce el influjo determinante y decisivo sobre toda la economía.

 

Las clases principales de la sociedad son los obreros, que de clase explotada y oprimida pasa a ser la clase dominante y ejerce la dirección en la construcción del socialismo, y el campesinado trabajador, principal, principal aliado de la clase obrera. Subsiste aún la clase de la burguesía, la cual posee experiencia de gestión de grandes empresas, mantienen relaciones con el capital extranjero, dispone de medios de producción y de dinero y cuenta con el apoyo de una parte de los especialistas burgueses.

 

La multiplicidad de tipos de economía y la existencia de diversas clases sociales originan contradicciones  y dan lugar a la lucha de clases. La contradicción fundamental de la economía del período de transición es la que se da entre el socialismo ascendente y el capitalismo que desaparece del escenario histórico 35. Esta contradicción antagónica se resuelve en una enconada lucha por el principio de “quién vencerá a quien”. Lenin escribe que el “período de transición no puede menos de ser un período de lucha entre capitalismo agonizante y el comunismo naciente 36; o en otras palabras: entre el capitalismo vencido, pero  no aniquilado, y el comunismo ya nacido, pero muy débil aún” 37.

 

 

35.  Indudablemente antes o después, este más que agotada formación socioeconómica, desaparecerá como lo han hecho anteriormente otras formaciones socioeconómicas en épocas ulteriores. De momento a trancas y barrancas sigue su singladura en el tiempo y en el espacio, arrastrándose moribundo, pero sigue. (A.R.P.)

 

36. Hay si el gran pensador revolucionario levantase la cabeza, lloraría de pena al ver que lo que lo predijo. Cuando estaban en la fase inferior al comunismo, el socialismo, a punto de ser concluido lo enterraron por dentro los hijos del Arbat.  El comunismo naciente ni tan siquiera llegó a poner los pañales. (A.R.P.)

 

37. V.I. Lenin. Economía y Política en la época de la dictadura del proletariado. Obras completas, tomo 39, página 271.

 

 

 

Una contradicción esencial de la economía del período de transición  es la que existe entre el sector socialista y la pequeña producción mercantil. El Estado proletario se esfuerza en poner de su lado a los campesinos, en tanto que trabajadores, en la lucha contra la burguesía. Al propio tiempo, restringe con espíritu consecuente las tendencias del propietario privado y anárquicas propias de ellos.

 

Las contradicciones de la economía pluriestructural se superan por medio del desplazamiento económico y la eliminación del tipo de economía capitalista privada y la asociación voluntaria de los pequeños productores individuales sobre bases socialistas organizando cooperativas de producción.

 

En el período de transición comienzan a regir leyes económicas objetivas que expresan la  esencia de las relaciones socialistas de producción: la ley económica fundamental, la del desarrollo planificado proporcional, de la economía; la ley de la distribución según el trabajo, la de la acumulación socialistas, etc. Estas leyes, que operan mayormente del marco del sector socialista rector, ejercen un influjo decisivo sobre el desarrollo del conjunto de la economía.

 

Como quiera que las leyes económicas del socialismo del período de transición operan en medio de la contradicción antagónica existente entre el socialismo y el capitalismo, su aplicación por el Estado transcurre en una situación de lucha contra la burguesía.

 

El Estado socialista ejerce la dirección de la economía y planifica el sector socializado. Ahora bien, dado que este último no alcanza a toda la economía del país, la regulación de la producción directamente por la sociedad no se hace extensiva a la economía capitalista privada y a la pequeña economía mercantil.

 

En el sector capitalista privado rigen las leyes económicas del capitalismo (Ley de la plusvalía, de la acumulación capitalista, de la competencia y la anarquía de la producción, etc.) Su acción, sin embargo, se ve limitada por el papel rector que desempeña el sector socialista y por las leyes económicas propias de éste. La esfera de acción de las leyes económicas del capitalismo se reduce sin cesar y tras el afianzamiento y la dominación  absoluta de las relaciones de producción socialistas dichas leyes dejan de operar 38.

 

 

38. Esto no ha podido ser de momento, por dos causas objetivas fundamentales: La primera causa objetiva fue el estrago efectuado interiormente  del socialismo real en la URSS. La segunda causa se debió a la lucha ideológica  entre el capitalismo y el socialismo, estratagema  que los primeros han ganado. Se suelen ganar muchas batallas, pero a la larga, perderán la guerra con la desaparición de la formación socioeconómica capitalista, como en su día sucedió con las formaciones socioeconómicas: primita, esclvista y feudalista.  (A.R.P.)

 

 

En el período de transición existen relaciones monetarias mercantiles. Estas, así como las leyes del valor, condicionan la existencia de formas de categorías, relacionadas con ellas, como el dinero, el precio, el comercio, el crédito y la ganancia. Ahora bien, cambian la esencia y el papel de las mismas. Los resortes valorativos son, en manos del Estado socialista, un importante instrumento de regulación de la pequeña producción mercantil, así como de restricción, desplazamiento y, posteriormente, supresión de los elementos capitalistas.


Las leyes económicas del socialismo son, por su contenido, las leyes de las relaciones entre los productores libres de toda explotación y de intereses antagónicos. Difieren de manera  cardinal de las leyes del modo capitalista de producción, que son las leyes de la explotación de los asalariados, de las relaciones antagónicas entre la burguesía y la clase obrera.

 

Una particularidad esencial del socialismo es que la propiedad social de los medios de producción a nivel del país y el interés de los trabajadores por que la economía avance en línea ascendentes, hacen que resulte factible y necesaria objetivamente la aplicación planificada de las leyes objetivas en beneficio de toda la sociedad.

 

 

Transformación de la economía pluriestructural en economía socialista.

 

 

 Esencia de la política económica del Estado de la dictadura a del proletariado. El tránsito al nuevo régimen social se produce tras una gigantesca labor que el Estado socialista lleva a cabo para organizar la economía. La política económica  del Estado de la dictadura del proletariado parte, en el período de transición, del hecho de que en sus manos se hallan dos puestos de mandos de la economía y los medios de producción decisivos, tiene en cuenta la multiplicidad de estructuras en la economía, se apoyan en el conocimiento y el empleo de las leyes eco nómicas objetivas y va enfilada s asegurar el triunfo del sector socialista.

 

La base científicas de dicha política fueron formuladas por Lenin en la primavera de 1918. Ahora bien, resultaba imposible ponerla en práctica en toda su dimensión en las circunstancias extraordinarias difíciles de la guerra civil y la intervención extrajera y de la ruina económica causada por ellas. El Poder de los Soviets tuvo que aplicar temporalmente la llamada política de “comunismo de guerra”. Fue al término a de la guerra civil y después del aniquilamiento de la intervención extranjera cuando se crearon las condiciones para aplicar consecuentemente la política de la construcción del socialismo. La política económica elaborada por Lenin a raíz del paso a la organización pacífica de la economía e implantada en 1921, recibió del nombre de Nueva Política Económica. (Nep).

 

La Nep s basaba en la concentración en manos del Estado de los puestos de mando de la economía, estipulaba las regularización social panificada y directa del sector socialista de la economía, el influjo activo del Estado sobre las relaciones de mercado entre la industria socialista y las pequeñas explotaciones campesinas, el empleo del capitalismo de Estado en beneficio del socialismo, dar margen temporal al capital privado con ciertas restricciones,, una lucha tenaz  de los elementos socialistas contra los capitalistas y la victoria del socialismo sobre el capitalismo. .

 

En la  agricultura, a raíz de la Nep, el sistema de contingentación de víveres fue sustituido con el impuesto en especie, concediéndose a los campesinos el derecho a vender libremente en el mercado lo excedentes. Ello creó en los campesinos  un interés material para impulsar la producción agrícola.  Por su parte, el desarrollo de la agricultura contribuía al restablecimiento y el fomento de la industria arruinada por la guerra civil y la intervención militar extranjera. El hecho de que los puestos de mando de la economía se hallaban en manos del Estado garantizaba la regulación estatal del comercio y la circulación fiduciaria, así como el control sobre el capital privado.

 

El paso a la construcción en la paz fue de la mano de una restauración de la gestión económica sobre la base de los principios elaborados por Lenin ya en la primavera de 1918, antes de que se hubiera implanto el “comunismo de guerra”. Fue afianzándose  el aparato de planificación del Estado. Se empezó a hacer uso en gran escala del cálculo económico, el estímulo materil del trabajo, el crédito y la ganancia.

 

Lenin recalcó que la Nep, la cual se asentaba en la alianza económica de la clase obrera  con el campesinado trabajador, tenia una enorme importancia internacional: “La  tarea que estamos cumpliendo, por ahora –temporalmente—solos, parece una tarea puramente rusa, pero en realidad es una tarea que se planteará a todos los socialistas39.

 

 

39.  V.I. Lenin. IX Congreso de los Soviets de toda Rusia. Obras completas, tomo 44, página 329.

 

 

La existencia de la Unión Soviética evitó que en los países que emprendieron la vía localista se desencadenara una guerra civil asoladora y se perpetrara la intervención armada directa del imperialismo internacional. Esto les permitió eludir las penalidades y las privaciones relacionadas con ello y proceder inmediatamente después del surgimiento del Estado socialista, a la construcción del socialismo en la paz, aprovechando la rica experiencia de la URSS 40 y habida cuenta de las peculiaridades de cada país.

 

 

40.  Esta vasta y rica y rica experiencia que surgió ya desde 1917 comienzo de la victoriosa revolución bolchevique (defensores del socialismo real), fue vaciada de contenido en 1991, instaurándose en Rusia una socialdemocracia adulterada que cercenó la construcción del socialismo real. (A.R.P.)

 

 

Significación del trabajo de Lenin Sobre el impuesto en especie. La esencia de la política de la dictadura del proletariado se expone en varios artículos, informes e intervenciones de Lenin. En este sentido es fundamental el folleto Sobre el impuesto en especie, escrito en abril de 1921 y consagrado a fundamentar teóricamente los acuerdos del X Congreso del partido, congreso que representó el paso del “comunismo de guerra”, impuesto por la guerra civil y la intervención militar extrajera, a la Nueva Política Económica.

 

Lenin señala en su escrito que en la Rusia de aquel entonces se daban las condiciones políticas para el tránsito al socialismo –-la dictadura del proletariado--, pero no existían las premisas económicas par crear la gran producción, basada en la maquinaria más moderna, y para su organización estatal planificada. El país había quedado arruinado después de la guerra y prevalecía en la economía la pequeña producción mercantil campesina. La sustitución de la contingentación de víveres con el impuesto en especie y el hecho de que, a raíz de ello, se tolerara el comercio privado, hicieron que los campesinos  se vieran interesados en el fomento de la agricultura, lo cual contribuía al restablecimiento de la industria. Por otro lado, fortalecía la alianza de la clase obrera con el campesinado, que era la base de la dictadura del proletariado.

 

El producto espontáneo de la pequeña producción mercantil fue el capitalismo, a cuyo desarrollo contribuyó también la empresa privada en la industria, la cual había sido admitida a fin de suministrar artículos industriales a los campesinos. Al objeto de controlar la producción capitalista, el Estado proletario encauzó su desarrollo por la línea del capitalismo de Estado.

 

La realización del plan leninista se tradujo en un rápido restablecimiento de la economía de la URSS. Seguidamente el sector capitalista fue eliminado y las pequeñas explotaciones campesinas reorganizadas sobre la base de la cooperativización, constituyéndose la gran producción socialista.

 

La importancia teórica y práctica del folleto en cuestión reside en que argumenta la necesidad, en el contexto de de la multiplicidad de estructuras económicas del período de transición, de una política económica enfilada a cumplir la tarea estratégica principal: la de la construcción del socialismo.

 

Sigue conservando valor de actualidad también la crítica que Lenin hiciera de las tergiversaciones de la esencia de la Nep. Los economistas burgueses y los reformistas de nuestros días pretenden presentar la Nep como una forma de acercamiento del socialismo con el capitalismo, como la política económica del paso a una “economía mixta”, en la que los elementos de la planificación se supeditan a los métodos capitalistas de gestión económica basados en el mercado. En realidad, la Nep iba enderezada a eliminar los elementos capitalistas, a asegurar el triunfo de socialismo, a consolidad el dominio absoluto en el país de las relaciones de producción socialistas.

 

 

La industrialización socialista. En los países en que, al triunfar la revolución socialista, existen ya unas fuerzas productivas altamente desarrolladas, se plantea después de ella la tarea de supeditar la gran producción maquinizada a los intereses de toda la sociedad, de organizarla en todos los sectores y regiones económicas del país, y de modificar su estructura a tenor con su nuevo objetivo. En los que, antes de la revolución, es menester crearla. Estos problemas se solucionan en el proceso de la industrialización socialista.

 

La industrialización socialista significa un crecimiento de la gran industria maquinizada que permite asegurar que ésta desempeñe el papel rector en la economía, el progreso industrial de los otros sectores económicos, en primer lugar de la agricultura, y el triunfo de las formas de producción socialistas. La creación de una industria altamente desarrollada, de la pesada en primer término, fortalece las posiciones del socialismo en la lucha contra el capitalismo dentro del país y en el ámbito internacional.

 

Contrariamente a la industrialización capitalista, que contribuye  a afianzar y a ensanchar las relaciones de producción capitalista, así como a agudizar las contradicciones antagónicas del capitalismo, la industrialización socialista asegura la base material necesaria para elevar constantemente el bienestar del pueblo y permite erradicar esa herencia del pasado que es paro forzoso 41.

 

 

41.  Este argumento no representa  ninguna  demagogia como muchos defensores del capitalismo a ultranza defienden cabezonamente, puesto que en la actualidad, se confirma una vez más tal razonamiento: en el caso concreto de España, 6 millones de parados. Paro forzoso provocado sutilmente por el neoliberalismo, para que los capitalistas se enriquezcan más y más  y los trabajadores se empobrezcan en los mismos términos que aquéllos; es decir, el abanico cada vez abre más para los ricos explotadores y, por el contrario, se cierra más para los pobres explotados.

 

 

La industrialización  socialista transcurre de forma planificada, y no espontánea: Las ideas leninistas en cuanto a la transformación de la URSS, de un país atrasado en el aspecto económico y técnico, en una potencia industrial de primera fila, se plasmaron en el primer plan integral estatal de desarrollo de la economía del país, llamado plan GOELRO (plan estatal de electrificación de Rusia). Los principales postulados de este plan fueron desarrollados en los planes quinquenales prospectivos, sobre todo en el primero 1.929-1931, que pasó a la historia de la URSS como impresionante programa de industrialización socialista del país, como el plan de la construcción de las bases del socialismo.

 

Los estados burgueses para industrializarse se olieron de los recursos obtenidos de la explotación  de los pueblos de sus países y de naciones ajenas. La industrialización socialista se efectúa en lo fundamental a costa de los recursos internos del Estado socialista. En el momento actual 42, los países que edifican el socialismo tienen la posibilidad de utilizar, para su industrialización, distinta forma de préstamos exteriores. La URSS tuvo cerrada  esa fuente, puesto que los Estados imperialistas o bien se negaron a concederle préstamos, o los ofrecían poniendo condiciones onerosas 43.

 

42. A raíz de la caída del muro de Berlín en 1989, también se vino abajo el desplome del Consejo de Ayuda Mutua Económica, conocido popularmente con las siglas CAME o COMECON. De todos países que contribuyeron a formar el CAME o COMECON, sólo existen en la actualidad Mongolia, Cuba y Vietnam que prosiguen la senda de la construcción del Socialismo. (A.R.P.)

 

Afortunadamente la República Popular China con su peculiar filosofía oriental, esta desarrollando el socialismo real con mucho más inteligencia y pragmatismo que lo que se hizo en  la URSS, cuyos resultados se están viendo en la práctica y, que dentro de 15-20 años, se pondrán a la cabeza del mundo. (A.R.P.)

 

43.  El adjetivo oneroso es sumamente suave y piadoso, las condiciones eran más que onerosa, eran de patente de corso o filibusteros, filosofía típicamente neoliberal capitalista. (A.R.P.)

 

 

La industrialización de los países socialistas se realiza a un alto ritmo. Inglaterra, Alemania y los EE.UU. precisaron varias década para industrializarse, mientras que en la URSS este proceso ocupó un espacio de 13 años (de 1929 a 1941). La necesidad de unas tasas particularmente elevadas de industrialización se debió a que la URSS construyó el socialismo en medio del cerco capitalista, en circunstancias en que los países imperialistas, que contaban con una poderosa base industrial, trataron en repetidas ocasiones de acabar con el régimen socialista por medio de guerras.

 

La experiencia del País de los Soviets y su asistencia económica y técnica crearon condiciones propicias para la industrialización de los otros países que emprendieron el camino del socialismo. La división internacional  socialista del trabajo exime         a los países socialistas de impulsar todos los sectores industriales y les permite concentrar los esfuerzos en aquéllos que cuentan con las condiciones naturales, históricas y sociales más favorables.

 

 

La reorganización socialista de la agricultura. La revolución socialista se encuentra en la agricultura con dos formas de economía: una que se basa en la propiedad privada de los grandes propietarios agrarios  y los capitalistas arrendatarios y otra que se asienta en las pequeñas explotaciones cmpesinas. Consecuentemente, la reorganización socialista de la agricultura se efectúa siguiendo dos vías: la organización de empresas agrícolas estatales en las haciendas confiscadas a los grandes propietarios agrarios y la organización en cooperativas, a italo voluntario, de las explotaciones de los campesinos trabajadores.

 

Las grandes haciendas estatales soviéticas, esto es los sovjoses, basadas en las antiguas fincas de los terratenientes, se organizaron en la URSS inmediatamente después del triunfo de la revolución. Esta línea de reorganización de la agricultura, sin embargo, no obtuvo entonces un impulso sensible d l extrema penuria de recursos que sufría el Estado y la existencia de una masa inmensa de pequeñas haciendas campesinas.

 

La reestructuración socialista de la agricultura en la URSS y en la mayoría de los otros países se produjo principalmente a través de la organización de los campesinos en cooperativas. El resultado de la sustitución de la pequeña economía mercantil por la gran producción mecanizada con gran rendimiento mercantil es que se supera el retraso de la agricultura, aumenta su producción y se crea una base firme para elevar el bien estar y el nivel cultural del campesinado. No se puede dejar de tener en cuenta además el hecho de que la pequeña producción  mercantil crea el peligro que se proliferen los elementos capitalistas, por cuanto en el proceso de diferenciación de la misma nace constantemente la burguesía.

 

Lenin estudió a fondo todos los aspectos del problema relativo a las formas concretas de transformación socialista de la agricultura basada en loa pequeña producción  mercantil y subrayo  que en el contexto del Estado de la dictadura del proletariado y bajo la dominación de la propiedad de todo del todo el pueblo de los medios de producción, la forma socioeconómica fundamental de dicha de dicha transformación es la organización de cooperativas de producción, es decir, la socialización de la propiedad privada de los medios de producción basada en el trabajo personal, mediante la asociación gradual y voluntaria  de los campesinos en cooperativas de producción. “Cuando los medios de producción pertenecen a la sociedad –dice Lenin—cuando es un hecho el triunfo de clase del proletariado sobre la burguesía, el régimen de los cooperativistas cultos es el socialismo” 44.

 

 

 

44.  V.I. Lenin. Sobre las cooperativas. Obras completas, tomo 45, página 373.

 

 

El plan leninista de cooperativización del agro estimulaba el avance gradual del campesinado desde las formas más elementales de cooperación –empezando por las cooperativas de consumo, de abastos, de comercialización, de crédito, de procesamiento de productos agrícolas, de ejecución conjunta de algunas faenas del campo, etc. — hacia formas permanentes y más complejas de cooperativas de producción. Uno de los principales enunciados del plan cooperativo de Lenin es la asociación voluntaria de los campesinos. Recalcaba Lenin que para crear el régimen socialista en el campo, el Estado socialista debía suministrar debía de suministrar máquinas a las cooperativas agrícolas en condiciones ventajosas,  concediéndoles ampliamente créditos y otras formas de ayuda financiera.

 

En la URSS, al comienzo del período de transición existían tres tipos de hacienda colectivas: las sociedades para el laboreo conjunto de la tierra, las comunas agrícolas y los arteles agrícolas. La práctica de la edificación socialista demostró que la forma fundamental de cooperación era el artel agrícola, en el que se socializan los medios de producción básicos y se conjugan los intereses de la hacienda colectiva.

 

Al éxito de la reorganización socialista del campo  contribuyó la nacionalización de la tierra. También fue importante el papel que desempeño el despliegue en escala cada vez mayor de la mecanización de la producción agrícola. Un ejemplo convincente de las ventajas que ofrecía la gran hacienda socialista fueron para los campesinos los sovjoses, los cuales constituían a la vez punto de apoyo para las haciendas colectivas recién organizadas.

 

El paso del campo soviético a la gran hacienda socialista significó una gran revolución en las relaciones económicas, en todo modo de vida del campesinado. La colectivización liberó para siempre al campo del yugo de los campesinos ricos, de la diferenciación de clase, de la ruina y la miseria. La reestructuración del campo sobre la base del plan cooperativo de Lenin propició un crecimiento acelerado de las fuerzas productivas del agro, premisa imprescindible para el desarrollo planificado de toda la economía. Sin la colectivización de la agricultura hubiera sido imposible construir en el país la sociedad socialista.

 

Las condiciones históricas y socioeconómicas concretas en las que se halle este o el otro país que esté construyendo el socialismo determinan ciertas particularidades en cuanto a la organización  de los campesinos en cooperativas. En algunos países dicha organización se produjo en circunstancias en que la tierra era propiedad privada de los campesinos. Por eso formaba parte de las cuotas de ingresos en las cooperativas, y los ingresos de éstas se distribuyeron durante cierto tiempo no sólo según la cantidad y la calidad del trabajo, sino también con arreglo a la cantidad de tierra aportada.

 

La teoría marxista y la experiencia de los países socialistas muestran el peligro que para el socialismo supone la práctica de forzar artificialmente el ritmo de la cooperativización y de la transformación de las cooperativas en “comunas populares”, como sucedió en China.

 

 

 

El triunfo del socialismo



 

El período de transición termina al construirse la primera fase de la comunista: el socialismo. Ello quiere decir que se ha creado la base material y técnica del socialismo, se ha superado la multiplicidad de formaciones en la economía, establecido el dominio absoluto e las relaciones de producción socialistas en la ciudad y el campo y han sido suprimidas las clases explotadoras 45. De este modo se crea la sociedad socialista real.

 

 

45. Vuelta a ha empezar, habían sido suprimidas las clases explotadoras hasta 1998   y, desde ese fatídico año, paulatinamente se fueron estableciendo la clase explotadora, y con ello, retornaron los vicios, perversiones y todo tipo de lacras del sistema capitalista. (A.R.P.)

 

 

La base material y técnica del socialismo. En el curso de de la industrialización y de la organización socialista de la agricultura se produce una reestructuración de todos los sectores económicos sobre la base de la gran producción mecanizada. La base material y técnica del socialismo es la gran producción mecanizada y socializada en todos los sectores económicos, basada en la electrificación y el empleo a gran escala de los más modernos adelantos de la ciencia y la técnica y organizada en forma planificada a escala de todo el país a fin de satisfacer cada vez más plenamente las demandas materiales y culturales de los trabajadores.

 

Lenin decía: “La base material del socialismo no puede ser sino loa gran Industria mecanizada, capaz de reorganizar también la agricultura. Pero no debemos limitarnos a este principio general. Hay que concretarlo. Una gran industria, a la altura de la técnica moderna y capaz de reorganizarla agricultura, supone la electrificación de todo el país46.

 

 

46.  V.I. Lenin. III Congreso de la Internacional comunista. Obras completas, tomo 44, página 9.

 

El desarrollo de la producción mecanizada se lleva a cabo bajo el socialismo sobre la base de un plan económico de manera integral y a escala de toda la producción social. En este orden, era primordial en la URSS el fomento de la industria pesada, basada en los últimos adelantos tecnocientíficos; la concentración de la producción en grandes empresas, la eliminación de la desigualdad de su desarrollo técnico y una distribución de la industria por todo el país que acabara con el atraso económico de las regiones nacionales heredado del capitalismo.

 

El comienzo de la edificación del socialismo, la industria de los centros económicos desarrollados de Rusia estaba equipada principalmente con maquinaria que funcionaba a base de vapor. Por eso a la horade restablecer la industria, los transportes y otros sectores de la economía surgió la cuestión de hacerlo sobre una base técnica nueva: La electrificación.

 

En el curso de la revolución cultural se preparan los cuadros que se suponen al servicio de la gran producción mecanizada: ingenieros, técnicos y obreros de alta cualificación. Durante el tiempo que dura la vida de una generación, en la URSS  fue liquidado por completo el analfabetismo. Los trabajadores se convirtieron  en partícipes activos de la vida cultural, de la creación de los valores espirituales.

 

En los países socialistas, el problema de la creación de la base material y técnica del socialismo se resuelve habida cuenta de la división internacional socialista del trabajo sobre la base de la cooperación económica en todos los dominios y la asistencia mutua. Estos países impulsan la producción aplicando los últimos logros del progreso científico-técnico, los que les ha de aliviaren lo sucesivo las creación de la  base material y técnica del comunismo.

 

 

Dominación absoluta de las relaciones de producción socialista. En el período de transición se suprime la multiplicidad de la estructuras en la economía y se implanta la propiedad social, socialista, en todos los sectores económicos. En la industria, la propiedad socialista de los medios de producción se afirma mayormente como propiedad del pueblo (estatal), y en la agricultura, como propiedad de todo el pueblo y cooperativo-koljosiana. La producción social va encauzada a satisfacer de manera cada vez más plena las necesidades de todos los miembros de la sociedad.

 

Ahora, la dirigencia de Pekín se inclina  por una “economía mixta” que liga las formas de economía socialistas y capitalista y el sistema estatal centralizado con elementos de de regulación de mercado 47.

 

47.  Los dirigentes del pueblo chino han sido más inteligentes que los dirigentes de la URSS, pues partiendo de la premisa de que en la economía capitalistas también tiene cosas aprovechables, no han sido tan ortodoxos como los marxistas de la URSS y supieron fructificar algunos elementos de regulación de mercado del sistema capitalista, que ayudaron y auxilian  el avance del socialismo real.  (A.R.P.)

 

 

Al consolidarse el sistema económico socialista surge una nueva estructura de clase de clase de la sociedad, se suprimen las clases explotadoras. La sociedad socialista se compone de dos clases amigas: los obreros y los campesinos, así como los intelectuales, íntimamente ligados a ellas.

 

La fuerza rectora de la sociedad socialista es la clase obrera que, junto a los otros miembros de la sociedad, es propietaria de los medios de producción  decisivos. Progresa y se vigoriza la alianza entre la clase obrera y los campesinos cooperados    y ha desaparecido el antagonismo de intereses cardinales de la ciudad y el campo. Con la abolición de la propiedad privada fe eliminada la base originadora del antagonismo entre el trabajo manual y el intelectual. Los intereses cardinales de la nueva intelectualidad, salida de entre los obreros y los campesinos, coinciden con los de clase obrera y de los koljosianos. 

 

En el curso de la construcción del socialismo se supera la desigualdad económica, política y cultural entre las naciones que pueblan el país. Las relaciones de explotación y opresión son sustituidas por unas relaciones de igualdad de derechos, de cooperación entre camaradas y ayuda mutua de todas las naciones y pueblos libres.

 

En el período de transición se eleva sensiblemente el nivel de vida de los trabajadores. Se pone fin al paro y queda solucionado el problema del desempleo para todos.

 

La victoria del socialismo en la URSS tiene una significación histórica universal. Por primera vez en la historia de la humanidad fue organizada la sociedad socialista, en la que la producción se supedita a satisfacer las demandas de todo el pueblo. Se suprimió la explotación, desapareció la anarquía, la competencia y las crisis de superproducción, creáronse posibilidades para el despliegue de la iniciativa creativa de las masas y el empleo racional de los recursos laborales y materiales. Con el triunfo del socialismo en la URSS y en varios países más surgió el sistema socialista mundial 48, el cual fue la más importante de las consecuencias internacionales de la Revolución de Octubre que han determinado la fisonomía de la época contemporánea.

 

48.  Con la gloria de la Revolución de Octubre  en la URSS, surgió el sistema socialista en varios países. A partir del derrumbamiento del socialismo implantado en la URSS, arrastro  consigo la mayor parte de los países en los cuales se había implantado el socialismo real. (A.R.P.)

 

 

Particularidades de la vía no capitalista de desarrollo hacia el socialismo. Decía Lenin que si el proletariado revolucionario victorioso desarrollara entre los pueblos de los países atrasados la propaganda del socialismo, y los gobiernos socialistas le ayudaran a dichos países con todos los medios a su alcance sería erróneo suponer que la fase capitalista de desarrollo fuera inevitable para los pueblos atrasados. La experiencia de la historia ha reafirmado la justeza de estas palabras y atestigua el nexo indisoluble que hay entre la ruta  histórica de los pueblos que han dado el paso al socialismo eludiendo el capitalismo y el movimiento revolucionario mundial de la clase obrera con el triunfo del socialismo en uno o en varios países.

 

La revolución socialista en la URSS aseguró la rápida superoración del atraso histórico de una serie de regiones nacionales de Asia Central, de algunas de Transcaucasia y, sobre todo, del Extremo Norte. Gracias a la generosa ayuda del proletariado victorioso de Rusia, dichas zonas pasaron del feudalismo, y algunos pueblos del Extremo Norte,  incluso de las relaciones prefeudales, al socialismo, saltando la etapa capitalista.

 

Con la ayuda de la Unión Soviética, la República Popular de Mongolia emprendió el camino de la edificación del socialismo. Fue típico de este país la configuración de las relaciones de producción socialistas con un nivel relativamente bajo de desarrollo de la fuerzas productivas y sin contar casi con una clase obrera.

 

La existencia del sistema socialista mundial brinda en las condiciones de hoy buenas oportunidades para la puesta en marcha de transformaciones socioeconómicas progresistas en los países qu3e se han liberado de la dependencia colonial.

 

El desarrollo de estos países por el camino de progreso no transcurre de igual modo. Ahora bien, la tendencias principales son similares: eliminación gradual de las posiciones de monopolios imperialistas, de la gran burguesía autóctona y los señores feudales, y restricción  de la actividad del capital extranjero; asegurar al Estado del pueblo los puestos de mando de la economía, paso al desarrollo planificado de las fuerzas  productivas y promoción del movimiento cooperativo en el campo; el ascenso del papel de la masas de las masas trabajadoras en la vida social y reforzamiento del aparato estatal con cuadros nacionales fieles al pueblo; carácter antiimperialistas de la política exterior de la política exterior. En los países liberados crece el rol de los partidos revolucionarios, depositarios de los intereses de las grandes masas trabajadoras.

 

 

 

Etapas de madurez económica del socialismo



 

La construcción en lo fundamental, la sociedad socialista después de terminado el período de transición, constituye el comienzo de la primera fase del comunismo. El desarrollo ulterior de la sociedad sigue el camino del socialismo maduro que, a su vez, se transforma paulatinamente en comunismo completo.  En la etapa en la que se crea la sociedad socialista desarrollada, madura, el socialismo se desenvuelve ya sobre su propia base, se pone de manifiesto de manera más cabal cada vez las fuerzas creadoras del nuevo régimen y las ventajas del modo de vida socialista y los trabajadores gozan en creciente escala de los frutos de las grandes conquistas revolucionarias. Se han modificado notablemente las condiciones internacionales del desarrollo de la economía de la URSS: ya no existe el cerco capitalista, se han conformado la comunidad de los países socialistas, debilitándose seriamente las posiciones del capitalismo mundial.

 

L. Bréznev ha señalado que “nuestro avance hacia el comunismo pasa por la etapa de la saciedad socialista desarrollada…Es un período necesario, lógico e históricamente lago del devenir de la formación comunista 49.

 

 

49.  Documentos del XXVI Congreso del PCUS. Moscú, 1981, página 78.

 

 

Desarrollo de la base material y técnica del socialismo.  La premisa económica fundamental para el tránsito del socialismo triunfante a la etapa de la sociedad socialista madura es la creación de unas fuerzas productivas altamente desarrolladas a partir de la aplicación de los últimos logros del progreso científico-técnico. Ya en el proceso de reorganización socialista de la economía soviética  el nivel técnico de los fondos productivos, sobre todo de las empresas y sectores de nueva planta, alcanzó el de los países capitalistas evolucionados. En el período subsiguiente, a la par con la aceleración del progreso tecnológico, se logra en varias de sus líneas un nivel técnico básicamente nuevo. Ello guarde relación con el creciente papel de la ciencia en el desarrollo de la sociedad, con la elevación del nivel de instrucción general y de la cualificación profesional de los trabajadores con la diversificación de la red de centros de enseñanza superior y media, con la formación del ejército de millones y millones de obreros, especialistas e investigadores científicos altamente cualificados.

 

El resultado fue que se ha configurado en la URSS un poderoso complejo económico único que abarca todos los eslabones de la producción, la distribución 50 y los intercambios sociales en el territorio del país. La base de dicho complejo en la esfera de la producción material es una moderna industria multisectorial (pesada: metalurgia, energética, construcción de maquinaria y aparatos, equipos eléctricos, química y petroquímica; las ramas de la industria ligera y alimentaria) y una gran agricultura organizada sobre principios colectivistas y altamente mecanizada. Elo acrecentamiento y la renovación cualitativa del potencial productivo han constituido la base material para elevar la eficacia de la producción social y cubrir de manera cada vez más plena las variadas demandas de los miembros de la sociedad.

 

 

50.  El eslabón de la producción material y los intercambios sociales en el territorio del país, fue un completo y grandioso éxito, pero no así el eslabón de la distribución que ha sido un auténtico desbarajuste y un fracaso lamentable en la URSS. (A.R.P.)

 

 

 El avance de la división social del trabajo se ha traducido, en el contexto de la propiedad socialista de los medios de producción, en una mayor concentración de la producción, acentuándose su carácter social. La economía de las repúblicas que integran la URSS se ha convertido en parte inseparable del co malejo económico del país.

 

Importa señalar que la URSS tuvo que cumplirla tarea de crear una base material y técnica adecuada al socialismo desarrollado y después de que fueran construidos los fundamentos del nuevo régimen. Es, al parecer, el camino común de todos los países que comienan a poner en marcha las transformaciones socialistas a un nivel de desarrollo económico bajo o medio. Será distinta la situación en los países que al realizar la revolución socialista cuenten con unas fuerzas productivas altamente desarrolladas.

 

 

Desarrollo de la relaciones de producción del socialismo. El incremento de las fuerzas productivas es la base material para la reorganización en profundidad de todo el conjunto de las relaciones sociales sobre los principios colectivistas inherentes al socialismo. El socialismo desarrollado abre campo al perfeccionamiento progresivo de las relaciones de producción socialista, y la elevación notable del nivel de socialización de la economía. El desenvolvimiento sucesivo de la propiedad socialista en sus dos formas –estatal (de todo el pueble)  y cooperativo-koljosiana,  se expresa en la constante aproximación de las mismas, en el creciente grado de socialización de los medios de producción  y de trabajo y en el establecimiento entre los colectivos laborales de unas relaciones amplias basadas en la cooperación entre camaradas y la ayuda mutua y en el despliegue de la emulación socialista.

 

El principal factor de consolidación de las relaciones de propiedad socialista maduras es el desarrollo y el ascenso del papel rector de la propiedad de todo el pueblo. El sector estatal de la economía se convierte en un sistema económico integral único basado en la ciencia y la técnica de avanzada.

 

 

Se consolida el régimen koljosiano. Al triunfar el socialismo, la mayoría de los kiljoses era empresas relativamente pequeñas y escasamente equipadas técnicamente. El notable incremento de la base material y técnica del agro dio lugar a la concentración de la producción, hecho que junto con el fortalecimiento económico y organizativo de los kiljoses brindó la posibilidad de que se les vendiese con facilidades de pago la maquinaria concentrada hasta entonces en las Estaciones de Máquinas y Tractores del Estado (ETM). Los kiljoses se convirtieron en grandes empresas altamente mecanizadas. Su abastecimiento con medios de producción industriales ensanchó las relaciones económicas entre la ciudad y el campo y elevó el papel rector de la industria respecto a la agricultura.

 

Se abrió campo libre a la acción de las leyes económicas del socialismo, conformándose el mecanismo de su aplicación consciente por la sociedad dentro de cada país y la economía socialista mundial.

 

Elevose el grado de organización planificada de la economía, así como el papel de la planificación a largo plazo y la importancia del desarrollo equilibrado. Perfeccionáronse las formas de distribución de los bienes de consumo según la cantidad y la calidad del trabajo. Aumentó el papel de los fondos sociales en cuanto a la satisfacción de las demandas de los trabajadores 51.

 

 

51. Durante bastantes años se fueron perfeccionando las formas de distribución de los bienes de consumo, pero lo errores cometidos en los años posteriores, derivaron en un fracaso total, debido sobre todo  a la ortodoxia de los dirigentes del partido y a su inmovilismo y falta de visión futurista. (A.R.P.)

 

 

 Se han producido cambios profundos en la estructura de la sociedad. Creció el papel rector de la clase obrera. Por su condición social, los campesinos koljosianos se han aproximado a la clase obrera y hoy en día su nivel de instrucción y modo de vida a veces  se diferencian ya poco de los de la ciudad. Ensanchose la base social del régimen socialista. La alianza de la clase obrera y el campesinado koljosiano ha cobrado desarrollo en la firme unidad política e ideológica de estas clases con la intelectualidad salida del pueblo. Se ha configurado una comunidad socizal e internacional nueva desde el ángulo histórico: el pueblo soviético. Ello quiere decir que van adquiriendo gradualmente una significación decisiva los rasgos comunes que definen la conducta, el carácter y la concepción del mundo de los soviéticos, independientemente de las diferencias sociales y ncionales.

 

En la esfera política, la etapa del socialismo desarrollado se caracteriza por la transformación de la dictadura del proletariado en Estado de todo el pueblo y el desarrollo de la democracia en todos sus aspectos. En todas las vertientes de la vida social se ha elevado el papel dirigente del Partido Comunista 52.

            

 52. Por el devenir de los hechos, la transformación de la dictadura del proletariado en Estado de todo el pueblo y el desarrollo de la democracia, ha sido demasiado apresurado. Todavía se debió alargar más en el tiempo en el espacio, la dictadura de proletariado, puesto que tanto fuera como dentro del país quedaban residuos contrarrevolucionarios, que estaban al acecho para destrozar el esfuerzo de millones de hombres y mujeres que habían proyectado un nuevo Estado, más justo, equitativo y solidario. (A.R.P.)

 

 

El socialismo desarrollado y la revolución científico-técnica. El socialismo maduro se singulariza por conjugar los adelantos de la revolución científico-técnica con las ventajas del sistema económico socialista.

 

En los últimos descubrimientos  de la ciencia y la técnica  conllevan cambios cualitativos en las fuerzas productoras ampliando sensiblemente las posibilidades de su incremento. Así, los descubrimientos en el campo de la estructura atómica y molecular de la materia sentaron las bases para la creación de nuevos materiales; los progresos de la química hicieron factible la transformación del petróleo y el gas en plásticos y fibras sintéticas; el estudio de los fenómenos eléctricos  en los cuerpos sólidos y los gases se tradujo den la creación de la electrónica; las investigaciones de la estructura del núcleo atómico abrieron el camino para el empleo en la práctica de la energía atómica; el desarrollo de las matemáticas ha servido de base para la creación de los medios de automatización de la producción y la gestión. Todo prueba que ha surgido un nuevo sistema de conocimientos de la Naturaleza, que ha sufrido una transformación  radical la técnica y la tecnología de la producción y que se ha reducido la dependencia de su crecimientote las limitaciones condicionadas por las dotes fisiológicas del hombre y su entorno natural.

 

Las inmensas oportunidades creadas por la revolución científico-técnica son utilizadas bajo el capitalismo, por los monopolios mal objeto de consolidar su dominación e incrementar sus beneficios. El capitalismo imprime al desarrollo de la ciencia y la técnica un carácter unilateral, deformado. Bajo el socialismo se dan las condiciones objetivas par que la revolución científico-técnica siga una orientación que responda a los intereses del hombre y de la sociedad. Por otra parte, es sólo sobre la base del fomento acelerado de la ciencia y la técnica como se pueden cumplir las tareas finales del progreso social y construir la sociedad comunista.

 

“El Partido Comunista –señaló L. Brezhnev—pare de que sin la ciencia es simplemente in concebible la construcción de la nueva sociedad” 53.

 

 

53.  Documentos del XXVI Congreso del PCUS. Moscú, 1981, página 136.

 

 

Las ventajas del socialismo sobre el capitalismo en lo que a a revolución científico-técnica se refiere, residen en la propiedad social de los medios de producción, y consisten, primero, en que dicha revolución se produce bajo el socialismo en beneficio de toda la sociedad y no de los grupos monopolistas dominantes, como sucede en los países burgueses; segundo, en que las relaciones de producción socialistas ofrecen oportunidades para el libre desarrollo total de la principal fuerza productiva de la sociedad –los propios productores—y para que éstos estén profundamente interesados en el progreso tecnocientífico; tercero, en que, bajo el socialismo, se pueden prever el desarrollo de la técnica y la ciencia y organizarlo de manera planificada a escala de producción social como modo único; cuarto, en que  el socialismos brinda la posibilidad de utilizar íntegramente en la producción social la maquinaria más moderna y de alcanzar, sobre esta base, altas tasas de creciient0 de la productividad del trabajo colectivo.

 

El salto dado en el fomento de la fuerzas productivas de la sociedad y el acrecido grado de madurez de las relaciones sociales condicionan un nivel cualitativamente nuevo de toda la actividad del conjunto de la sociedad en la gestión de la producción social, mayores exigencias a los cuadros, a la labor de todos los trabajadores y a su grado de organización.

 

 

Lugar histórico del socialismo desarrollado. En la etapa del socialismo desarrollado se alcanza un grado de madurez de la nueva sociedad en que se lleva a término la reorganización  del conjunto de relaciones sociales sobre los principios colectivistas inherentes al socialismo. Esta reorganización alcanza la esfera material e espiritual, a todo el género de vida de la sociedad soviética.

 

Se plantea la tarea inmediata la de crear las premisas materiales y sociales para el tránsito al comunismo completo. Es una etapa objetivamente necesaria en el camino hacia el comunismo.

 

Para que el socialismo desarrollado se transforme en comunismo hace falta descubrir y utilizar las acrecidas ventajas del sistema económico socialista y dar libre campo a la acción de las leyes económicas del socialismo y a sus ventajas en todas las vertientes de la vida social. La economía socialista está basada en la propiedad social de los medios de producción, se administra  en forma planificada a escala nacional y tiene por misión asegurar el bienestar y el desarrollo integral de todos los miembros de la sociedad.  La particularidad de la etapa contemporánea consiste en que se han multiplicado dichas ventajas  y las posibilidades dimanantes de ellas, propias del socialismo en tanto que sistema económico. La URSS cuenta con unos fondos de producción inmensos, basados en la técnica de avanzada, , con un impresionante potenciad científico-técnico, un ejército de millones y millones de especialistas y obreros altamente cualificados y una rica experiencia de gestión, planificada  de la economía y de organización socialista de la producción. El aumento del bienestar material y del nivel cultural y técnico de los trabajadores propicia el desarrollo de su actividad creativa. Reviste gran importancia  la estrecha cooperación que hay entre los países socialistas, la integración de sus economías. La distensión  internacional crea condiciones para el empleo de la división mundial del trabajo 54.

 

 

54.  La distensión internacional para la creación de empleo de la división del trabajo, fue más formal que real, sobre todo, por parte del capitalismo que en el fondo y en la forma, perseguía  la batalla ideológica con objeto de socavar y minar sutilmente e hipócritamente, los logros y avances del campo socialista, como más tarde aconteció (A.R.P.)

 

 

El problema cosiste en aprovechar íntegramente las posibilidades que brinda la sociedad socialista. Ello determina la estrategia  y la táctica de la construcción comunista en la presente etapa. En el informe del CC del PCUS al XXVI  Congreso dice:

 

“En los años 80 el Partido Comunista continuará consecuentemente su estrategia económica, cuyo supremo objetivo es elevar de manera interrumpida el nivel de vida y la cultura del pueblo, crear mejores condiciones para el desarrollo multifacético del individuo, aumentando sucesivamente la eficiencia de toda la producción social, incrementando la productividad del trabajo y la actividad social y laboral de los soviéticos55.

 

 

55.  Documentos del XXVI Congreso del PCUS. Moscú, 1981, página 136.

 

 

En la realización de la metas a largo plazo, el undécimo (quinquenio 1981-1985) representará una etapa fundamental. Tiene por misión asegurar la continuidad del desarrollo socioeconómico del país y el cumplimiento de las orientaciones estratégicas del partido para los años 80, habida cuenta de la especificad  del próximo quinquenio. Será un nuevo paso importante en la creación de la base material y técnica del comunismo, el desarrollo de las relaciones sociales y la formación del hombre nuevo 56.

 

 

56.  En los años 80 nadie podía presagiar que la relaciones sociales y la formación del hombre nuevo, nueve años más tarde; es decir, en 1989 las relaciones sociales las puntearon los contrarrevolucionarios y, la formación del hombre nuevo, se trocó en formación del hombre viejo, con sus antiguos corrupciones y lacras de todo tipo. (A.R.P.)

 

 

 

EL PROCESO DE LA PRODUCCIÓN SOCIALISTA.

 

 

Se expone en esta unidad el contenido socioeconómico del proceso de producción socialista en su forma más general.

 

A partir del análisis de las relaciones de producción se examinan la ley económica fundamental, que determina el cauce principal de la actividad económica de los miembros de la sociedad, la ley del desarrollo planificado, proporcional de la economía y otras leyes del socialismo. El estudio de las bases científicas de la planificación permite llegar a comprender el mecanismo del empleo por la sociedad de las leyes económicas. Seguidamente se muestra la acción, de las leyes sobre el proceso mismo de la producción, la distribución de los bienes fabricados, la acumulación y el consumo.

 

El conocimiento de las leyes económicas y de las principales tendencias del avance de la sociedad socialista constituye la base científica de la política económica de los partidos comunistas y obreros de los países socialistas.

 

La obra de los clásicos del marxismo-leninismo contiene una caracterización de la producción socialista. Lenin, partiendo de la síntesis de los procesos reales en la configuración de la economía de la URSS, hizo un análisis de la esencia de la producción socialista. A este respecto revisten particular  importancia  sus trabajos Las tareas inmediatas del Poder soviético, Economía y política en la época de la dictadura del proletariado, Una gran iniciativa, El Estado y la revolución, etc. Los rasgos del régimen eco nómico del socialismo en sus distintas etapas de desarrollo se muestran en los documentos del los partidos comunistas y obreros de los países capitalistas.

 

 

LA PROPIEDAD SOCIAL DE LOS MEDIOS DE PRRODUCCIÓN. LA LEY ECON OMICA FUNDAMENTAL DEL SOCIALISMO

 

 

 

El carácter de las relaciones de producción socialistas viene determinado por la dominación de la propiedad social de los medios de producción. Esta condiciona el carácter directamente social de la producción, el contenido de las relaciones en la producción y en las demás esferas de la economía. En el artículo 10 de la Constitución de la URSS se consigna: “La base del sistema económico de la URSS es la propiedad socialista de los medios de producción en forma de propiedad del Estado (patrimonio de todo el pueblo) y propiedad de los koljoses y organizaciones cooperativas”. Por eso el análisis de las relaciones de producción del socialismo empieza por las relaciones de propiedad social y la argumentación de la labor de la sociedad como un todo único.

 

 

La propiedad social socialista de los medios de producción





La propiedad socialista de los medios de producción como categoría económica. La propiedad socialista de los medios de producción , en tnto que categoría económicas, expresa las relaciones entre los miembros de la sociedad socialista en su apropiación conjunta de las, condiciones materiales de la producción social. Por su contenido, difiere cardinalmente de todos los tipos de propiedad de los medios de producción que les han precedido.

 

Lo principal en la relaciones de propiedad socialista es que los miembros de la sociedad no se enfrentan unos a otos como propietarios privados. Cada trabajador es copropietario de los medios de producción y participa con los demás en el trabajo común, coordinando a escala de toda la sociedad. Junto ellos goza también de los frutos del trabajo colectivo.

 

Comoquiera que los medios de producción pertenecen a todos los trabajadores, no pueden intervenir en calidad de capital. Bajo el socialismo desaparece la posibilidad de la explotación del hombre por hombre y no existen clases antagónicas. Los medios de producción  constituyen una condición material del libre trabajo de los productores, un medio para elevar la productividad, así como para aumentar el bienestar e impulsar el desarrollo libre y completo de la personalidad de todos los miembros de la sociedad. Un principio esencial de la estrategia económica del PCUS es el inculcar a la personas una actitud de buenos gestores ante la propiedad socialista.

 

La propiedad privada de los medios de producción determina el nuevo modo de vinculación de la fuerza de trabajo con los medios de producción. Esta vinculación no se produce a través del mercado de mano de obras, sino directamente, ya que la sociedad socialista los productores aparecen simultáneamente como propietarios conjuntos de los medios de producción y como trabajadores. En tales circunstancias, la fuerza de trabajo deja de ser una mercancía, implantándose unas relaciones de cooperación entre camaradas y de ayuda mutua de los trabajadores.

 

La propiedad socialista de los medios de producción  genera unas relaciones nuevas de intercambio   que se expresan en una distribución consciente y coordinada por los miembros de la sociedad de su trabajo colectivo, como también unas relaciones nuevas de distribución de lo bienes materiales, cuando todo el producto creado pertenece a los trabajadores mismos. C9onsecuentemente, cambia el contenido socioeconómico del producto global (bruto) y de la riqueza de la sociedad.

 

El producto global (bruto) de la sociedad socialista son los bienes materiales producidos por la sociedad durante un período determinado (un año por lo común). Es creado por el trabajo libre de toda la explotación, con ayuda de los medio de producción que pertenecen a todos los productores; es, por tanto, patrimonio común de ellos y se utiliza en beneficio de todos los miembros de la sociedad. La naturaleza social de los bienes producidos bajo el capitalismo permanece velada y solamente se de manifiesto en el libre juego del mercado, mientras que el producto del trabajo socializado bajo el socialismo es directamente social, y su creación y distribución son regulados de manera planificada por la sociedad.      

 

La propiedad socialista de los medios de producción condiciona asimismo, el carácter de las relaciones que se establecen en el consumo de los bienes materiales. Los medios y los  objetos de trabajo son utilizados por los miembros de la sociedad socialista en común en el proceso productivo.  Los medios de vida que se emplean para la satisfacer las necesidades personales de los individuos son consumidos tanto a través de los fondos de consumo sociales, como según la contribución de cada trabajador al desarrollo de la producción.     

 

Los medios de producción y los bienes de consumo acumulados por la sociedad socialista constituyen la riqueza nacional de la misma. Dicha riqueza, que es patrimonio de los trabajadores mismos, constituye la base para la elevación del nivel de vida material y cultural de todos los miembros de la sociedad.

 

Así pues, la dominación absoluta de la propiedad socialista de los medios de producción significa la implantación de un sistema, nuevo en principio, de relaciones de producción y de distribución, intercambio y consumo de los bienes materiales que se diferencian de manera cardinal del sistema de relaciones de producción capitalistas.      

 

Todas las transformaciones que se realizan con vistas a garantizar a cada individuo unas condiciones de vida dignas de hambre se deben a la propiedad social.  Los conceptos de libertad, derechos del hombre, democracia y justicia social se llenan de un contenido real. El  socialismo ha inculcado a los hombres el sentido deser verdaderos  dueños del país. Por primera vez surge la posibilidad de de hacer extensivos los principios de la democracia a todas las vertientes de vida de la sociedad, comprendida su base: las relaciones de producción.  

 

La dominación de la propiedad social de lo medios de producción  es el principal rasgo que caracteriza al socialismo. Los economistas burgueses opinan, sin embargo, que dicha propiedad no tiene un significado sustancial para el socialismo. La perdida que la propiedad, socialista en su forma, está sufriendo en China de su contendido socialista es el ejemplo más patente de deformación de un régimen socialista 57. 

 

 

57.  La URSS que  intentó llevar a cal y canto en su forma el   contenido socialista, y que acusaba de deformación al régimen socialista de China, en el fondo fue lo que aniquiló el socialismo real  en la Unión Soviética. China con su sabia filosofía milenaria, supo adaptar el fondo dejando la forma aparte, y aprovechó las cosas buenas que tiene el capitalismo, sin por eso dejar de ser un régimen comunista.

 

 

El papel económico del Estado socialista. Decía Engels que, la socieadad sociaslista “los hombres aplicarán con conocimiento de causa las leyes de sus acciones sociales  propias, que hasta ese momento se les habían opuestos como leyes de la Naturaleza apenas que dominaba sobre ellos, y de este modo las someterán a su dominio58, y calificó ese nuevo estado de la sociedad como un ”salto de la Humanidad del reino de la necesidad al reino de la libertad”

 

 

58.  Federico Engels. Anti-Dühring. Carlos Marx y Federico Engels. Obras, tomo 20, páginas 294-295.

 

 

El estado socialista, que se apoya en la propiedad socia, sobre todo en la de todo el pueblo, de los medios de producción, ejerce la presión de la producción social a partir de conocimiento de las leyes económicas. Ahí reside su papel económico específico

 

Las causas de la acti8vidad del Estado y su política económica nacional e internacional los determina el partido comunista.

 

Para que la sociedad socialista avance es preciso que la política económica arranque de los intereses de todo el pueblo y conjugue acertadamente los intereses de las clases y de los grupos sociales. La actividad política y económica del Estado está mutuamente ligada. La política, al decir de Lenin, es la” expresión concentrada de la economía” 59.

 

 

59.  V.I. Lenin. Una vez más acerca de los sindicatos, el momento actual y los errores del camarada Trostki y Bujarin. Obras completas, tomo 42, página 278.

 

 

 

El influjo progresivo de la política del Estado socialista sobre la economía reside en que dicha economía parte de las demandas objetivas del desarrollo de las fuerzas productivas y de las relaciones de producción, se corresponde con los intereses de los productores y asegura el robustecimiento progresivo9 de las relaciones de cooperación entre camaradas y de ayuda mutua de todos los trabajadores: obreros, campesinos e intelectuales. La inexistencia de clases y grupos sociales interesados en que subsistan la relaciones económicas caducas, brinda la posibilidad de captar las contradicciones no antagónicas que existen en la economía y poner en marcha de manera planificada medidas que contribuyen a perfeccionar las relaciones de producción en consonancia con el desarrollo de las fuerzas productivas.

 

 

La propiedad social y la administración de la producción social.  Las relaciones dominantes de propiedad de los medios de producción determinan a esencia y el carácter de la administración de la producción social. En el contexto del socialismo, es directamente la sociedad la que lleva a cabo la gestión de la producción social a partir de la previsión científica.

 

Los productores en la sociedad socialista, ejercen la gestión a través del sistema de órganos de poder público que, en la URSS, son los Soviets de Diputados Populares. El artículo 93 de la Constitución de la URSS 60 dice “Los Soviets de Diputados Populares dirigen de manera inmediata y a través de los órganos formados por ellos todos los sectores de edificación estatal, económica y socialcultural, adoptan soluciones decisiones, aseguran su cumplimiento y controlan su aplicación”.

 

 

60.  La Constitución de la URSS fue una de las más avanzadas del mundo. Era una Constitución más real que formal, como son actualmente las Constituciones burguesas de la mayoría de los países de la tierra. (A.R.P.)

 

 

La gestión implica crear de manera planificada la estructura orgánica de la economía, planificación económica, incentivo material y moral del trabajo, con habilidad y control socialista, y enseñar a los trabajadores a administrar. El mecanismo económico de la sociedad socialista es un sistema de eslabones (órganos y palancas) económicos entrelazados. Con el desarrollo de las relaciones de producción, la sociedad va introduciendo los cambios necesarios en dicho sistema a fin asegurar  que la economía nacional avance con buen éxito.

 

Las relaciones entre los productores asociados en cuanto a la gestión coordinada de la economía y, por consiguiente, en cuanto al perfeccionamiento del mecanismo económico encuentran su expresión en el principio del centralismo democrático.

 

Al mostrar su esencia. Lenin señalaba que el centralismo democrático en la esfera económica debe asegurar la armonía y la unidad absolutas en el funcionamiento de empresas eco nómicas como los ferrocarriles, los correos, los telégrafos,              los otros medios de transporte, etc. “Asimismo –decía--, el centralismo, en su verdadera acepción democrática, presupone, por primera vez en la historia, la posibilidad de un desarrollo pleno y libre de obstáculos, no sólo de las peculiaridades específicas locales, sino también de la iniciativa local, con variedad de formas, métodos y medios de avance hacia la meta común” 61.

 

 

61.  V.I. Lenin. La primera variante del artículo “Las tareas inmediatas del Poder soviético”. Obras completas, tomo 36, página 152.

 

 

El centralismo en la gestión es  necesario puesto que la gran producción tiene carácter social; las empresas, todos los eslabones de la economía se hallan enana interconexión económica compleja y su actividad debe estar coordina da y regulada desde un centro. Al propio tiempo, la necesidad de considerar con todo detenimiento las variadas condiciones del desenvolvimiento de la economía implica desplegar la iniciativa de los colectivos de las empresas y de los trabajadores en general, una amplia democracia.

 

Al conjugar, sobre la base de la propiedad social de lo medios de producción, la dirección centralizada de los planes con la autonomía económica y la iniciativa de las empresas es un principio básico de la economía. La economía de los países socialistas se desarrolla siguiendo un plan; sus ciudadanos tienen derecho a participar  en la gestión de los asuntos estatales  y sociales.

 

La participación en la gestión de las grandes masas trabajadoras es el principal criterio de desarrollo de la democracia socialista. Al abrir el amplio campo a la actividad política, económica y espiritual de la ciudadanía y de sus representantes y organizaciones, encauza esa actividad hacia metas en cuya persecución se halla interesado todo el pueblo. Al propio tiempo se cumplen las aspiraciones específicas de los distintos grupos de la población y se garantiza la coordinación  de sus intereses con los del conjunto de la sociedad.

 

La función económica fundamental de la gestión socialista cosiste en asegurar el empleo racional de los recursos sociales de la producción en beneficio e todos los miembros de la sociedad fin de obtener el máximo incremento del producto social con el mínimo de gasto de mano de obra y de recursos materiales.

 

En la sociedad socialista desarrollada crece sensiblemente la importancia de la labor administrativa del Estado.  A medida que aumenta las proporciones de producción social son mayores las exigencias en cuanto a la perfeccionamiento técnico del aparato productivo, la organización del trabajo y de la producción y el empleo racional de la fuerza de trabajo, los equipos, las material prima y los materiales. “El trabajo organizado y coordinado de los colectivos laborales juega un papel cada más sustancial. Al  propio tiempo, el sistema económico y político del socialismo desarrollado debe asegurar una gestión  eficaz de la producción.

 

En el XXVI Congreso del PCUS. L. Brézhnev dijo que la solución de los problemas que tienen planteados el país y el aprovechamiento de las potencialidades con que cuenta éste, dependen  en gran medida del nivel en que se halle la gestión económica. La disposición “El mejoramiento de la planificación e incremento de la incidencia del mecanismo económico en la eficacia de la producción  y la calidad del trabajo”, aprobada en julio de 1979, contempla medidas para elevar el nivel de planificación y de gestión económica y adecuarlas a las demandas de la URSS en la etapa del socialismo desarrollado, para elevar la eficacia de la producción social, acelerar el progreso científico-técnico, incrementar la productividad el trabajo, mejorar la calidad de los productos y, sobre esa base, asegurar un ascenso sostenido de la economía del país y el nivel de vida de pueblo soviético.

 

 

Dos formas de propiedad social y dos tipos de empresas socialistas.  La propiedad  de los medios de producción aparece, bajo el socialismo, en forma de propiedad estatal (patrimonio de todo el pueblo) y de los koljosess y otras cooperativas.

 

La esencia de la propiedad estatal (de todo el pueblo) reside en que todos los miembros de la sociedad son copropietarios de los medios de producción decisivos. Es el patrimonio común de todo el pueblo, la forma fundamental de propiedad socialista 62.

 

        

62.  En la URSS, el 90% del total de los medios de producción corresponden a la propiedad estatal. Son propiedad exclusiva del Estado la tierra, el subsuelo, las aguas y los bosques. Pertenecen al Estado los medios básicos de producción en la industria, la costrucción y la agricultura, los medios de transporte y de comunicación, la banca, los bienes de los establecimientos comerciales, de servicios públicos y otras empresas organizadas por el Estado, así como otros bienes necesarios  para cumplir las funciones económicas del Estado.

 

 

Los medios de producción de todo el pueblo y otros objetos de propiedad estatal pertenecen conjuntamente a todos los miembros de la sociedad y no a cada coletito por separado. Lenin criticó duramente las ideas de los anarcosindicalistas que abogaban por la entrega en propiedad a lo distintos grupos obreros de las empresas industriales. “Toda legitimación, directa o indirecta –escribe--, de la propiedad de los obreros de una fábrica o profesión determinada sobre su producción peculiar, o de estatal constituye la mayor tergiversación de los principios fundamentales del Poder soviético y la renuncia completa al socialismo 63.

 

 

 

63.  V.I. Lenin. El carácter democrático y socialista del Poder soviético. Obras completas, tomo 36, página 481.

 

 

La propiedad estatal de los medios de producción bajo el socialismo difiere cardinalmente de la propiedad estatal capitalista. La del Estado burgués es propiedad colectiva de la clase capitalista, E decir, una variedad de la propiedad capitalista. El Estado socialista es el Estado de todo el pueblo y, por tanto, su propiedad es patrimonio de todos los trabajadores, de toda la sociedad.

 

Son propiedad de los koljosess y otras organizaciones cooperativas y sus asociaciones los medios de producción y otros bienes necesarios para realizar sus tareas estatutarias. La tierra que ocupan los koljosess les queda adscrita en usufructo y a perpetui8dad.

 

En la URSS le corresponde a la propiedad de los koljosess y otras organizaciones cooperativas el 11% de los fondos de producción fijos. Los koljosess trabajan el 44% de las áreas de cultivo y les corresponden el 41% de cabezas de ganado mayor y cuerna, incluido el 37% de vacas, el 38% de ganado porcino y el 31% de ovejas y cabras.

 

Son también propiedad socialista los bienes de las organizaciones  sindicales y otras organizaciones sociales necesarias para cumplir sus tareas estatutarias.

 

Por su naturaleza socioeconómica, las distintas formas de propiedad socialista son de un mismo tipo. Expresan el carácter social de la expropiación de los bienes materiales, la inexistencia de la explotación y la supeditación de la producción a los intereses de los trabajadores.

 

La diferencia entre las formas de propiedad de todo el pueblo y la de los koljosess y otras organizaciones cooperativas está en el nivel de socialización de los medios de producción. La primera supone la socialización de los medios de producción a escala de la economía nacional, y la segunda más que nada dentro del marco de una cooperativa concreta o unas cuanta cooperativas. Los miembros de las cooperativas de producción son a la vez, lo mismo que todos los demás miembros de la sociedad, propietarios de los medios de producción que son patrimonio del pueblo. La existencia de las dos formas de propiedad –la de todo el pueblo y la de los koljosess y otras organizaciones cooperativas—condiciona la división de la sociedad en dos clases amigas: la clase obrera, clase rectora de la sociedad, y la campesina.

 

A tenor con las formas con las formas de propiedad socialista, existen en el socialismo distintos tipos de empresas, en primer lugar las estatales (patrimonio de todo el pueblo) y las koljosianas y otras organizaciones cooperativas.

 

El producto de las empresas estatales es patrimonio de todo el pueblo y se comercializa en forma planificada a precios fijados por el Estado. El producto de los koljosess pertenece a los koljosess. Es adquirido por el Estado en su mayor parte y parcialmente se vende en los mercados koljosianos.

 

La fuente de ingresos es para los obreros el trabajo en las empresas. Para los koljosiano es principalmente el trabajo en sus huertos familiar.                                       

 

En la sociedad socialista desempeña el papel rector al propiedad estatal (de todo el pueblo). Bajo su  influjo va elevándose el nivel de la socialización socialista en los koljosess al tiempo que desaparece gradualmente la diferencia entre ambas formas

de propiedad socialista.

 

 

Importancia del artículo Sobre las cooperativas, de Lenin.  Las bases de la teoría  y la práctica de la organización de los koljosess y otras organizaciones  cooperativas, en tanto que modo de transformación socialista de la pequeña producción mercantil, fueron expuestas por Lenin en uno de sus últimos trabajos, en el artículo Sobre las cooperativas, escrito en 1923. Las ideas  y postulados que aparecen en dicho artículo constituyeron las bases de la política del PCUS y del Estado soviético en la organización socialista del campo.

 

Las cooperativas son, bajo el capitalismo, una empresa colectiva capitalista. En cambio bajo el socialismo, donde el poder estatal se halla en manos de los trabajadores y domina en la economía la propiedad de todo el pueblo de los medi8os de producción, constituye un empresa socialista y su simple crecimiento es igual al crecimiento del socialismo. Lenin mostró las ventajas del paso al socialismo de las pequeñas explotaciones campesinas a través de la cooperación y definió las tareas del Estado en cuanto a la organización de los campesinos en cooperativas.

 

La  gran agricultura socialista fue creándose de acuerdo con el plan cooperativo leninista. En el presente ha comenzado una nueva etapa de realización de sus ideas que tiene que ver con la especialización y la concertación de la producción agrícolas a partir de la cooperación entre las distintas empresas sobre una moderna base industrial. Mientras durante la colectivización se asociaban pequeñas explotaciones campesinas individuales con sus rudimentarios medios de producción, hoy los koljosess y los sovjoses mancomunan sus esfuerzos para crear grandes empresas tipo de alto rendimiento mercantil. De este modo se ensanchan las proporciones de la producción, se eleva el nivel de socialización de la producción koljosianas y se perfeccionan las relaciones sociales. 

 

Sigue en pie la importancia de la crítica que hiciera Lenin de las ideas burguesas sobre las cooperativas. Los representantes de la ciencia económica burguesa sostienen que la colectivización significó, clon respectos a los campesinos, el resurgimiento de la política de requisición del período de la guerra civil.

 

La colectivización aseguró un mejoramiento cardinal del nivel de vida de los campesinos, un desarrollo acelerado de las fuerzas productivas y la creación en el campo de una economía socialista de alto rendimiento mercantil.

 

 

La propiedad personal bajo el socialismo.  La propiedad personal expresa las relaciones, propias del socialismo, entre la sociedad o las cooperativas de producción (koljosess) y cada trabajador en lo que se refiere a la apropiación y la distribución de los bienes de uso y consumo individual y su fuente es el trabajo en la economía social.

 

Conforme a la Constitución de la URSS, los ingresos provenientes del trabajo constituyen la base de la propiedad personal de los ciudadanos. Pueden ser propiedad personal los utensilios de menaje y uso cotidiano, los bienes de consumo y comodidad personal, los objetos de la hacienda doméstica auxiliar, la vivienda y los ahorros procedentes del trabajo. Estos bienes no deben servir para extraer parasitarios ni ser utilizados en perjuicio de los intereses de la sociedad. Los medios de producción principales y decisivos no pueden pasar a ser propiedad personal. Refiriéndose a la sociedad socialista, Marx dice que “nadie puede dar sino su trabajo, y… por otra parte, ahora nada puede pasar a ser propiedad de individuo, fuera de los medios individuales de consumo” 64.

 

                     

64.  Carlos Marx, Crítica del Programa de Gotha. Carlos  Marx y Federico Engels, obras, tomo 19, página 18.

 

 

El aserto que encontramos en las publicaciones burguesas acerca de que con el tránsito al socialismo desaparece la propiedad personal de los bienes de uso y se reprimen los intereses, los gustos y las necesidades personales de los individuos se contradicen con la realidad. En realidad, el comunismo suprime la propiedad de los medios de producción nada más 65. La dominación de la propiedad social se los medios de producción y el aumento sostenido de la eficacia de la economía crean una firme base para satisfacerlas crecientes demandas personales de los trabajadores.

 

65.  Las publicaciones burguesas manipulan tergiversando el concepto de la propiedad privada de los medios de producción, con la propiedad privada de cada individuo, propiedad que pertenece a cada persona.  (A.R.P.)

 

 

Una variedad de la propiedad personal bajo el socialismo es la hacienda auxiliar del koljosiano, (del hogar koljosiano) que mantenida con el trabajo del propio koljosiano y de los miembros de su  familia en las horas libres del trabajo en la hacienda colecita con el objeto de tener un ingreso complementario (un producto suplementario para el consumo personal y la venta en el mercado koljosiano 66.

 

 

66.  El peso relativo de las haciendas individuales auxiliares constituye, en 1980, el 12% de la producción mercantil de la agricultura de l URSS.

 

 

 

Desarrollo de las formas de propiedad socialista. El desarrollo de la propiedad de los medios de producción está ligado a la acentuación del carácter social de la producción. La propiedad estatal avanza a medida que crece la gran industria mecanizada, se eleva la concentración de la producción, se ahonda su especialización y cooperación y se diversifican las interconexiones entre los eslabones productivos de la economía. Sobre esta base se robustecen las relaciones de colectivismo, de cooperación y de ayuda mutua entre todos los miembros de la sociedad y gana en fuerza el influjo de la propiedad estatal sobre la de los koljoses y demás organizaciones cooperativas.

 

El desarrollo de la forma de propiedad cooperativo-kojosiana tiene que ver con el fortalecimiento de la base material y técnica de la agricultura. El Estado suministra los koljoses en medida cada vez mayor bienes de equipo modernos, les ayuda en la preparación de especialistas, les concede créditos, realiza importantes obras de riego y avenamiento y contribuye a impulsar las ciencias agrícolas y a mejorar la organización del proceso productivo agrícola. La especialización y concentración de la producción agrícola a partir de una amplia cooperación, situándola sobre una base industrial moderna, constituye una nueva etapa de la realización de las ideas del plan de cooperativo leninista en el contexto del socialismo maduro.

 

Se acentúa en general el proceso de aproximación de la propiedad de los koljoses y demás organizaciones cooperativas con la de todo el pueblo y van desapareciendo gradualmente las diferencias sustanciales entre la ciudad y el campo. Sobre esta base se aproxima las formas de distribución de los bienes materiales, de prevención social y el nivel de ingresos de los obreros y campesinos. Como consecuencia del cumplimiento del plan cooperativo leninista, la producción agropecuaria ha llegado a ser un sector altamente desarrolladote la economía socialista.

 

 

 

El carácter del trabajo y los intereses económicos en la sociedad socialista





Trabajo libre para sí mismo y para la sociedad. La dominación de la propiedad socialista de los medios de producción determina el carácter del trabajo en el socialismo. Señalaba Lenin que en esta sociedad “por vez primera después de siglos de trabajo para los demás, de trabajo forzado para los explotadores, se tiene la posibilidad de trabajar para sí mismo y, además, beneficiándose de todas las de todas las conquistas de la cultura y la técnica más moderna” 67.

 

 

67.   V.I. Lenin. ¿Cómo debe organizarse la emulación? Obras completas, tomo 35, página 196.

 

 

El trabajo para sí mismo, para su misma sociedad, constituye el contenido de la libertada económica  de cada trabajador, condiciona el desarrollo completo de sus fuerzas físicas y espirituales y acentúa el contenido creador del trabajo mismo. Eludir el trabajo socialmente útil es incompatible con los principios de la sociedad socialista.

 

El Estado socialista concede suma importancia a la actitud consciente y creadora de sus ciudadanos ante el trabajo, a inculcarles el sentido de que son los dueños de la producción y la responsabilidad por el estado general de la economía socialista.

 

Los economistas burgueses presentan la libertad económica del individuo como si se tratara de la actividad económica independiente de cada hombre. En realidad, ello no es sino el poder de los elementos sobre los destinos del hombre.

 

El trabajo directamente social. El trabajo, en esencia, es siempre social. Pero bajo el dominio de la propiedad de los medios de producción aparece como un trabajo individual de productores separados. La socialización socialista de los medios de producción suprime su carácter individual y el trabajo de cada operario se convierte en parte orgánica inseparable de todo el trabajo de los productores conscientemente unidos a escala de la sociedad. La sociedad socialista organiza la distribución del trabajo entre las esferas  de la economía y sus subdivisiones, reglamente el régimen y las normas del trabajo y garantiza el mantenimiento de unas condiciones laborales normales y un proceso productivo al nivel de las últimas conquistas de la ciencia y la técnica.

 

El nivel del trabajo directamente social en las empresas estatales y en los koljoses y otras organizaciones cooperativas se diferencia de manera notable. Ello se debe a que los medios de producción de las empresas estatales pertenecen al conjunto de la sociedad y a que el régimen y las normas de trabajo en ellas los establece el Estado directamente. En los koljoses y otras empresas cooperativas una parte considerable de los medios de producción son propiedad de la cooperativa y el régimen y las normas de trabajo en ellas los regulan directamente los propios koljosianos bajo la influencia orientadora del Estado.

 

Por lo que respecta al trabajo en la hacienda individual auxiliar de los koljosianos, éste no es directamente social  y se regula  través del fomento de la economía social.

 

A medida que avanza la propiedad socialista, se borran paulatinamente las diferencias entre las empresas estatales y los koljoses y demás cooperativas en lo que al nivelo del carácter directamente social del trabajo se refiere.

 

 

El carácter general del trabajo. En la sociedad socialista, el trabajo de socialismo útil según la capacidad es un necesidad objetiva de cada miembro de la sociedad en edad de trabajar, esto es, el trabajo adquiere un carácter general. Este encuentre expresión en el derecho de los ciudadanos al trabajo.  El artículo 40 de la Constitución de la URSS reza: “Los ciudadanos de la URSS tienen derecho al trabajo, es decir, a obtener un empleo garantizado, renumerado según su cantidad y calidad, en cuantía no inferior al salario mínimo fijado por el Estado, incluyendo el derecho a elegir la profesión, género de ocupación y trabajo de acuerdo con su vocación, aptitudes, preparación profesional  y grado de instrucción y en consonancia   de las demandas de la sociedad68. Aseguran este derecho el sistema económico socialista, el crecimiento de las fuerzas productivas, la capacitación profesional gratuita, la elevación de la cualificación laboral y la enseñanza de nuevas especialidades, así como el desarrollo de los sistemas de orientación profesional y de colocación.

 

 

68.  Partiendo de la base natural del que no puede trabajar no come, no solamente el trabajo constituye un derecho para poder comer, sino que también establece, que el trabajo es una obligación. Por tanto en la URSS el trabajo era un derecho, pero a au vez, constituía que era una obligación el trabajar.

 

Sin embargo, en la supuestas “democracias” burguesas liberales, en la mayoría de las Constituciones,  el derecho es más formal que real. Es decir el derecho al trabajo está circunscrito a los privilegiados que tengan la “suerte” de encontrar un trabajo para poder comer. En cuanto a la obligación al trabajo ni es formal ni real, no existe les interesa un bledo que trabajen o no, y si no comen que se “jodan”, como dice alguna diputada de la Comunidad Valenciana. (A.R.P.)

 

 

 

El carácter general del trabajo propicia condiciones para suprimir el modo de vida parasitaria, la apropiación del fruto del trabajo ajeno, para que ningún individuo pueda desentenderse de su parte en el trabajo productivo,  que es condición  natural de la existencia humanas.

 

Los ideólogos burgueses  pretenden presentar el carácter general del trabajo como si se tratara de un trabajo forzoso 69. En realidad es condición esencial de la libertad de los productores. Sólo participando en el trabajo conjunto es como pueden revelarse como propietarios de los medios de producción y utilizarlos en interés común.

 

 

69. Curiosamente estos ideólogos economistas burgueses, que pretenden manipular los logros del trabajo socialista, como “forzado o forzoso”, nada refutan a las democracias burguesas cuando el paro llega a cotas del 27 %. A este brutal paro, no lo designan como “forzado o forzoso”; en todo caso aducen que el paro es debido a la demanda y oferta del trabajo, o en su defecto, a las circunstancia del mercado laboral. Con este simple razonamiento, los economistas burgueses matan dos pájaros de un tiro: acallar sus propias  conciencias y lavarse las manos cobijándose al sol que más calienta. (A.R.P.)

 

 

 

Los intereses económicos bajo el socialismo.  En la sociedad socialista, los intereses económicos, materiales, son móviles objetivos, condicionados por las relaciones de propiedad socialista, estímulos para la actividad laboral de los miembros de la sociedad.

 

Los hombres de ciencia burguesa ligan el estímulo al trabajo con al propiedad privada, nada más. Los revisionistas de derecha identifican los estímulos materiales bajo el socialismo con los de la empresa capitalista. Los revisionistas de “izquierda” 70 menosprecian la significación de los incentivos materiales y presentan la elevación del bienestar y del nivel cultural del pueblo Comond una degeneración burguesa. En realidad, son propios del socialismo unos estímulos especiales que difieren cardinalmente de los capitalistas. La condición del hombre en la sociedad socialista la determinan su trabajo personal socialmente útil y sus resultados, su grado de civismo  y sus cualidades ideológicas y morales. Ahí reside la fuente de iniciativas creadoras, del desarrollo espiritual del individuo, que es la manifestación más convincente de la justicia y la igualdad sociales.

 

70. Entre los revisionistas de “Izquierda” están las formaciones de la Socialdemocracia, y otras formaciones arribistas que, por todos los medios posibles, intentan retrasar a toda costa el avance del socialismo real; estos todavía actúan con más sutileza,  que los revisionistas y arribistas  de derecha  en el afán de no obstaculizar el desarrollo de los medios de producción privados  y, por tanto, favorecer al capitalismo. (A.R.P.)

 

 

El socialismo erradica el antagonismo entre la producción y el consumo y estable su unidad a escala de la sociedad. La producción se lleva a cabo no en aras de las ganancias, sino para satisfacer las demandas de todos los miembros de la sociedad. La fuente del aumento del bienestar de todo el pueblo y de cada individuo es el trabajo socialmente útil. Por consiguiente, los trabajadores están económicamente interesados en el fomento de la producción. Ahí reside la esencia de los incentivos materiales al trabajo en la sociedad socialista. La toma de conciencia por los miembros de la sociedad de su condición de copropietarios de los medios de producción y del producto del trabajo constituye la base de los incentivos morales al trabajo.

 

Los incentivos materiales y morales operan unidos, siendo un error oponer los unos a los otros. El gigantesco crecimiento económico de un país del socialismo es producto del trabajo de hombres que son conscientes de que trabajan para sí, para el bien común. Con avance del socialismo se acentúan el influjo sobre la producción de los incentivos al trabajo propio de él.

 

La sociedad socialista asegura la unidad de los intereses vitales de todos sus miembros, siendo prioritarios los intereses del todo el pueblo, que consisten en satisfacer al máximo las demandas sociales globales. En el socialismo desarrollado, como cosecuencia de la aproximación de las distintas formas de propiedad socialista, de la desaparición gradual de las diferencias sustanciales entre la ciudad y el campo y entre el trabajo manual y el intelectual, la relación entre los intereses reales de todos los sectores de la población se hace cada vez más estrecha.

 

Es incompatible con la dominación de la propiedad de todo el pueblo oponer los intereses de los miembros de la sociedad y de los colectivos laborales a los del conjunto de la sociedad. “Tuvimos que luchar --dice Lenin—en los medios obreros contra la falta de conciencia de la comunidad de intereses, contra distintas manifestaciones de sindicalismo, cuando entre los obreros de algunas fábricas o de algunos sectores industriales existía la tendencia a colocar sus intereses, los intereses de su fábrica, de su industria por encima de los intereses de la sociedad 71.

 

 

71. V.I. Lenin. Discurso en la I Conferencia de toda Rusia para el trabajo del partido en el campo. 18 de noviembre de 1919. Obras completas, tomo 39, página 309.

 

 

El aumento del bienestar de los trabajadores depende en última instancia del desarrollo de toda la producción social. La sociedad solamente puede disponer de lo que produce. Por eso, cuanto más altos sean los resultados de su trabajo, tanto más plenamente cubrirá las demandas individuales y sociales de las personas. Tal como se consigna en la Constitución de la URSS es ley de vida de la Sociedad socialista “el desvelo de todos por el bien de cada uno y el desvelo de cada uno por el  bien de todos”.

 

 

La ley económica fundamental del socialismo

 

 

Demandas de la sociedad socialista. Con la implantación de la propiedad privada de los medios de producción se hace no sólo factible sino imprescindible asegurar el bienestar y el libre y completo desarrollo de todos los miembros de la sociedad mediante el incremento de la producción.

 

La dominación de la propiedad social de los medios de producción garantiza la unidad orgánica entre el desenvolvimiento de la producción y las demandas y el consumo de todos los miembros de la sociedad. De acuerdo con el ideal comunista “el libre desarrollo de cada cual es condición para el libre desarrollo de todos”, el Estado socialista se plantea el objetivo de ensanchar las oportunidades reales para la aplicación por los ciudadanos de sus fuerzas creativas, aptitudes y dotes y para el desarrollo completo del individuo. En la sociedad socialista madura van creándose condiciones cada vez favorables para el aumento sostenido del bienestar del pueblo; en ella el fomento de la economía está orientado a solucionar diversos problemas que tiene que ver directamente con el mejoramiento de las condiciones de vida y trabajo de los soviéticos y donde el objetivo supremo de la producción socialista pasa a ocupar de manera lineal y directa el centro de la política del partido en la práctica.

 

Las demandas sociales globales de los miembros de la sociedad socialista comprenden loa de demandas personales y las de la producción.

 

Las demandas personales se cubren con bienes y servicios de uso personal. Las demandas de la producción expresan las necesidades de la sociedad de medios de producción.

 

El socialismo se caracteriza por el rápido aumento de las demandas personales y de la producción. “Cuando vemos salir de todas partes nuevas reivindicaciones  -indica Lenin--, decimos que así debe ser, que eso es el socialismo, cuando cada cual desea mejorar su situación, cuando todos quieren disfrutar de los bienes de la vida”72. Se trata, por supuesto, de reivindicaciones razonables adecuadas al modo de vida socialista.

 

 

72.  V.I. Lenin. V Congreso de toda Rusia de los Soviets de diputados obreros, campesina o, soldados y combatientes del Ejército Rojo. Obras completas, tomo 36, página 501.

 

 

La variación y el ascenso de las demandas tienen que ver con la producción. Su incremento y renovación cobran particular intensidad en el contexto de la revolución científico-técnica, la cual genera necesidades de bienes de consumo y de equipos desconocidas antes. A su vez, el desarrollo de las demandas es un móvil de la producción, una premisa de la misma. Las demandas originadas por la producción y cubiertas por la sociedad estimulan sin cesar a aquélla, le plantea nuevas tareas y condicionan la aparición de nuevos equipos.

 

 

Contenido de la ley económica fundamental del socialismo. El análisis de las relaciones económicas permite sacar una conclusión sobre el contenido principal nexo de causa y efecto entre la propiedad privada socialista, de todo el pueblo en primer término, de los medios de producción social que en ella determina. La dominación de la propiedad social de los medios de producción supedita de manera natural la producción a la misión de asegurar el pleno bienestar y el libre y total desarrollo de todos los miembros de la sociedad.

 

Este es el nexo que expresa la ley económica fundamental del socialismo, que podría se formulada  del siguiente modo: asegurar el pleno bienestar y el libre y total de desarrollo de todos los miembros de la sociedad mediante el incremento constante y el perfeccionamiento de la producción social.

 

De conformidad con la ley económica fundamental del socialismo, el artículo 15 de la Constitución de URSS manifiesta: “El objetivo supremo de la producción social en el socialismo es la más plena satisfacción de las demandas materiales y espirituales del hombre.

 

Apoyándose en la fecunda actividad de los trabajadores, la emulación socialista y los adelantos del progreso tecnocientífico y el perfeccionando las formas y métodos de gestión económica, el Estado asegura el incremento de la productividad del trabajo, la elevación de la eficacia de la producción y de la calidad del trabajo y el desarrollo dinámico, sistemático y proporcional de la economía nacional.”

 

La vigencia de la ley económica fundamental del socialismo se encuentra en la expresión cuantitativa en la relación entre la cantidad bienes necesarios para cubrir enteramente las demandas personales y de la producción y de la cantidad de bienes que se crean a un nivel dado de desarrollo de la producción social. En este orden hemos de distinguir dos niveles de demandas sociales: las absolutas, las máximas, que corresponden con los últimos adelantos de la ciencia y la técnica y que deben ser cubiertas en un futuro más o menos, y las reales, las que han configurado sobre las base del nivel de producción alcanzado y que son normales para un período concreto desde el pinto de vista social. Las primeras constituyen en la sociedad socialista el punto de referencia general para el fomento económico; las segundas muestran la posibilidad de cubrir demandas sobre la base de la aplicación de los adelantos de la ciencia.

 

La relación entre las demandas  sociales absolutas y la reales muestra el posible grado de satisfacción por la sociedad de sus demandas a un nivel concreto de desarrollo y de eficacia de la producción.

 

Si designamos las demandas absolutas con las letras DAm, las demandas reales con las letras DRm confrontamos los respectivos volúmenes del producto social, podríamos expresar la satisfacción por la sociedad de las demandas absolutas (SDAm) por medio de la fórmula:

 

SDAm     =         DRm

                      Dam

 

 

Sobre el avance de las demandas reales incide el incremento de las demandas absolutas y la elevación del nivel tecnológico de la producción social. El desarrollo de la producción a costa de la aplicación de los adelantos de la ciencia y la técnica hace que se reduzca la diferencia entre las demandas reales y las absolutas 73. Ahora bien, el progreso de la ciencia y la técnica condiciona a la vez el crecimiento de las demandas absolutas y éstas últimas constituyen el móvil que incita al crecimiento constante y al perfeccionamiento de la producción y, por tanto, de las demandas reales.

 

 

73. A este respecto cabe señalar que los plazos de aplicación de los descubrimientos más importantes de la ciencia en la segunda mitad del siglo (XX) se ha reducido a la cuarta parte frente a los registrados a principios del mismo.

 

 

 

Para cuantificar la ley económica fundamental del socialismo  resulta capital la relación entre las demandas sociales reales y el nivel del consumo popular. Si designamos  el nivel del consumo popular con las letras CPm podríamos expresar el grado de satisfacción de las demandas sociales reales (SDRm) con la fórmula:

 

 

SDRm    =    CPm

                     DRm

 

 

La elevación del nivel de vida de los miembros de la sociedad socialista. Se produce de manera que el consumo popular se va aproximando a las demandas sociales reales, y éstas últimas a las absolutas. Ello implica un incremento sostenido de la producción y la elevación de su eficacia sobre la base de los novísimos adelantos de la ciencia y la técnica.

 

Los economistas burgueses niegan la ley económica fundamental del socialismo. Al mismo tiempo pretenden demostrar que el desarrollo de la producción capitalista avanza hacia la creación de la “sociedad de la opulencia”. La realidad, sin embargo, desechan estos asertos.

 

Los revisionistas de derecha suelen reducir la esencia de la ley económica fundamental del socialismo a la distribución de los beneficios de las empresas proporcionalmente al trabajo de los productores. No ven, pues, la verdadera finalidad objetiva de la producción socialista.

 

 Los revisionistas de “Izquierda” hacen caso omiso de dicha ley y le eximen al Estado del desvelo por bienestar del pueblo 74.

 

 

74.  Los economistas burgueses están en perfecta sintonía con los postulados del capitalismo, negando la ley económicas fundamental del socialismo, aduciendo al mismo tiempo, que la producción capitalista avanza hacia la  sociedad de la opulencia, pero sin matizar que dicha opulencia va dirigida casi exclusivamente hacia los ricos, que son los dueños absolutos de la propiedad privada de los medios de producción. Estos cada vez son más ricos abriéndose para ellos el abanico en detrimento de empobrecer y cerrarlo todavía más a las clases trabajadoras. 

 

En cuanto a los revisionistas de derecha reducen la esencia de de la ley económica fundamental del socialismo, a la distribución de beneficios de las empresas  proporcionalmente al trabajo de los productores; nada más lejos de la realidad, cuando estas, están rebajando en la práctica más  y más los salarios y sueldos de la clase trabajador. La producción de las empresas capitalistas se realiza en base a la obtención de generar más y más beneficio, quedándose  en su totalidad con las plusvalías generadas   por la clase trabajadora, en detrimento de la clase productora.

 

Los revisionistas de izquierdas (Socialdemócratas), suelen hacer caso omiso de la ley económica fundamental del socialismo real, nadando entre dos aguas y favoreciendo en la mayoría los designios del capitalismo. Estos revisionistas intentan ignorar que la producción socialista se hace en base a la necesidad social de los productores, y no en base a los beneficios de los capitalitas. (A.R.P.)

 

 

 

La eficacia  de la producción como categoría económica. La ley económica del socialismo determina la necesidad de elevar el nivel de vida del pueblo tanto en el presente período como en el futuro. Este objetivo puede cumplirse tanto más plena y rápidamente cuanto más elevada sea la eficacia de la producción.

 

La eficacia de la producción socialista es la relación entre los gastos panificados de trabajo vivo y materializado y su resultado: la masa de los bienes producidos para satisfacer las necesidades de la sociedad.

 

Resultado relevante de la producción es la economía del tiempo y del trabajo, la cual permite aumentar la cantidad de bienes materiales con los mismos gastos de trabajo. Cuanto menos tiempo menos tiempo gaste la sociedad en la fabricación  de unos artículos, tanto más tiempo le quedará, siempre que las condiciones permanezcan invariables, para la confección de otros artículos indispensables.

 

Hay que diferenciar de la eficacia de la producción la eficacia de la economía nacional, la cual expresa el resultado de la actividad de la sociedad no sólo en la esfera de la producción, sino también en las de la distribución, el intercambio, y en última instancia, del consumo, y se caracteriza por el incremento de la producción y del consumo popular. Dicha eficacia implica aumento y empleo racional no sólo del tiempo del trabajo, sino también del tiempo libre.

 

Globalmente, el conjunto de gastos de tiempo de trabajo y tiempo libre es la principal forma de costos sociales, cuya reducción determina el contendido de la ley de economía del tiempo. “Para cada individuo, lo mismo que para la sociedad, --ha escrito Marx--, su desarrollo, consumo y actividad multilaterales dependen del ahorro del tiempo” 75.

 

 

75. Carlos Marx. Manuscritos económicos. (1857-1859). Carlos Marx y Federico Engels. Obras, tomo 46, I parte, página 117.

 

 

Existe también la noción de eficacia económica-social, la cual se caracteriza la eficacia de la producción y de la economía nacional habida cuenta de los resultados de mejoramiento de las condiciones de trabajo, enriquecimiento de su contenido creado y la superación de las diferencias esenciales entre el trabajo manual y el intelectual y entre la ciudad y el campo.

 

En la fase del socialismo desarrollado surge la necesidad y la posibilidad de elevar notablemente la eficacia de la producción frente te a las etapas anteriores. En las “Orientaciones Fundamentales del Desarrollo Económico y Social de la URSS para los años 1981-1985  y hasta 1998 y hasta 1990” 76 se consigna: “elevar con tenacidad la eficiencia de la producción social mediante la intensificación multifacética de la misma y mejorar la calidad de los artículos y de los servicios en  todas las ramas” 77.

 

76.  No fue posible elevar entre 1981-1985 hasta 1900, pues en 1989 se derrumbó el sistema económico de socialismo real en la URSS, debido sobre todo, a los errores de gestión, la desastrosa  guerra de Afganistán y a los oportunistas que se crearon y admitieron en el interior de la Unión Soviética. (A.R.P.)

 

77.  Documentos del XXVI Congreso de PCUS. Moscú, 1981, página 141.

 

 

La ley económica fundamental como del movimiento del modo comunista de producción.  La base del desarrollo de la producción socialista es la contradicción dialéctica no antagónica que existe entre las crecientes demandas de la sociedad y el nivel de desarrollo de la producción social alcanzado en cada período concreto. En la sociedad socialista aumenta el consumo de los trabajadores a medida en que la producción cubre las demandas creadas y modifica su estructura. Ello, a su vez, estimula el crecimiento de las demandas y plantea nuevas tareas de producción. Engels previo  que, al desaparecer los intereses opuestos, sería precisamente esa peculiar emulación entre la fuerza productiva y consuntiva de la sociedad el resorte y estímulo de su desarrollo sin límites 78. El Estado socialista  tiende a asegurar un rápido ritmo de incremento de la producción social y el perfeccionamiento de las relaciones de producción.

 

78.  Véase Federico Engels. Esbozos de la crítica de la Economía política. Carlos Marx y Federico Engels. Obras, tomo 1, página 562.

 

 

En los años ochenta, a partir del avance de la economía, y la mayor eficacia de la producción social se asegurarán la elevación sostenida del nivel de vida popular, el progreso del modo de vida y de todo el sistema de relaciones sociales. La acción de la ley económica fundamental del socialismo va rentada a la consecución de la abundancia de bienes materiales y espirituales y a crear las premisas para que sean distribuidos según las demandas de todos los miembros de la sociedad 79.

 

 

79. Todos esos grandiosos proyectos, se  vieron truncados a raíz de la caída de la URSS en 1989. Ver nota 76. (A.R.P.)

 

 

 

 

EL DESARROLLO PLANIFICADO DE LA ECONOMIA SOCIALISTA

 

 

La planificación es la forma general de ligazón eco nómica de los productores en la economía socialista. Asegura el empleo racional de los recursos sociales y excluye las inmensas pérdidas de trabajo propias de la producción capitalista, las cuales se deben a su carácter anárquico y espontáneo.

 

En este apartado se abordan las leyes objetivas del desarrollo planificado de la economía socialista y el contenido de la planificación como categoría económica del socialismo y la ley del desarrollo planificado, proporcional de la economía.

 

 

 

Bases objetivas y contenido del desarrollo planificado de la economía

 

 

La  necesidad objetiva del desarrollo planificado de la producción. En cualquier sociedad, comoquiera que existe en ella la división social del trabajo, la producción implica una distribución en determinadas proporciones de la mano de obra y lo medios de producción entre los diferentes sectores de la economía. En una carta a Kugelmann, Marx escribía: “las masas de producción correspondiente a diferentes masas de necesidades, exigen masas diferentes y cuantitativamente determinadas de la totalidad del trabajo social. Es self evident que esta necesidad de la distribución del trabajo social en determinadas proporciones no pueden de ningún modo ser destruida por una determinada forma de de producción social; únicamente puede cambiar la forma de su manifestación” 80.  

 

 

 

80.  Carlos Marx. A Ludwing Kugelman. Carlos Marx y Federico Engels. Obras, tomo 32, páginas 460-461.

 

 

Esta o la otra forma de distribución del trabajo social entre las esferas de la producción dependen del carácter de la propiedad capitalista, la forma general de conexión económica de los productores son las relaciones monetario-mercantiles espontáneas. En este caso la regulación de la producción social la efectúa la ley del valor que rige en forma espontánea a través del mecanismo de la oferta y la demanda del mercado 81.

 

 

81.  La ley del valor que rige de forma espontánea en la producción social del capitalismo a través del mecanismo de la oferta y la demanda, es una ley pavorosa y depredadora, que en caso necesario, y en último recurso, se llegan a comer entre sí. (A.R.P.)

 

 

 

La propiedad social de los medios de producción origina una nueva forma, distinta por completo, de conexión económica de los productores: la planificación. La regulación  de la producción socialista, la efectúa directamente la sociedad fijando la correspondencia entre sus demandas globales, la estructura producto social bruto y los recursos materiales y de mano de obra. El socialismo, en tanto que sistema de producción planificada directamente social, es opuesto al capitalismo como sistema de economía espontánea, de mercado.

 

Las premisas para la organización planificada de la producción social se crea sobre la base de la gran industria mecanizada, la cual imprime un carácter social a la producción. Esto se manifiesta, primero, en que avanza y se profundiza en la división social del trabajo y, consecuentemente, se hace mayor la interdependencia de los sectores especializados de la producción; segundo, en que desaparece al dispersión de las unidades económicas merced a la cooperación y la centralización de la producción; tercero, en que la producción se concentra cada vez más en las grandes empresas; y cuarto, en que se intensifican los vínculos económicos y el intercambio de actividades entre las diferentes zonas económicas.

 

El carácter social de la producción hace necesaria su regulación planificada. La gran industria mecanizada, a diferencia de las fases anteriores, requiere insistentemente un regulación planificada de la producción y el control social sobre ella.

 

La gran producción mecanizada se forma bajo el capitalismo, pero la propiedad capitalista,  y la espontaneidad y la anarquía concomitantes, hacen que resulte imposible su desarrollo planificado. En las circunstancias del presente, tampoco el capitalismo monopolista de Estado elimina el desarrollo espontáneo de la producción. Comoquiera que la base económica de la producción sigue siendo la propiedad capitalista, persisten el antagonismo entre el trabajo y el capital, la desvinculación y falta de coordinación de la actividad económica, la competencia de capitales y la anarquía de la producción a escala de conjunto de la sociedad.

 

El desarrollo planificado de la producción social se hace objetivamente necesario no sólo cuando se suprime la propiedad capitalista y se implanta la propiedad socialista de los medios de producción. La socialización socialista de los medios de producción destierra la contradicción inherente al capitalismo entre el carácter social de la producción y la apropiación privada del producto. La apropiación de los bienes materiales creados por el trabajo colectivo se pone en consonancia con el carácter social de la producción. La comunidad de intereses económicos cardinales de los trabajadores condiciona la necesidad y posibilidad de coordinar la actividad económica de todos miembros de la sociedad, lo cual requiere una organización planificada del trabajo a escala de toda la economía. El desarrollo planificado se convierte en una necesidad objetiva.

 

 

En el socialismo la producción social se desarrolla de manera coordinada. Siendo como es propietaria de los medios de producción decisivos, la sociedad, encarnada por el Estado, toma en consideración tanto las demandas globales como los recursos laborales disponibles y las condiciones materiales de la producción. De este modo tiene la posibilidad de distribuir directamente entre sectores, zonas económicas y empresas los recursos necesarios y asegurar las proporciones del producto global para satisfacer mejor las demandas.

 

La primera forma histórica de regulación de la producción de beneficios de los trabajadores es el control obrero. Este propicia las condiciones para la nacionalización socialista de los medios de producción básicos: posteriormente al ocupar los puestos de mando de la economía, el Estado proletario es capaz de dirigir la producción socializad siguiendo un plan estatal único, desde un centro económico único, siendo de notar que la regulación planificada del sector socialista incide en las demás formaciones económicas del período de transición en virtud del papel decisivo que desempeña en la economía.

 

De este modo se abre por primera vez ante los trabajadores las posibilidades de poner fin a la explotación y romper las redes de la anarquía económica. La anarquía de la producción cede lagar a la dirección científica y planificada de la economía.

 

La existencia de dos formas de propiedad de los medios de producción deja su impronta en el contenido del desarrollo  planificado de la producción social. La sociedad socialista organiza de forma planificada toda la producción. Pero el grado y las formas de organización  planificada  del sector económico de todo el pueblo alcanzan un nivel superior que los del sector de los koljoses y otras organizaciones cooperativas. En el sector de todo el pueblo, los recursos materiales pertenecen  al con junto de la sociedad y el desarrollo planificado está orientado a incrementar y perfeccionar las fuerzas  productiva en las esferas decisivas de la producción. De ahí que desempeñe el papel rector en la organización planificada de la economía.

 

La propiedad de los koljoses y otras organizaciones cooperativas no es capaz de asegurar, por si misma, el desarrollo planificado no sólo del conjunto de la economía, sino de las empresas cooperativo-koljosianas. Estas se desarrollan bajo el influjo decisivo del sector de todo el pueblo. Los koljoses son incorporados a la economía global del país a través de los planes estatales, los cuales fijan la parte que les corresponde en la creación del producto social global a tenor con las demandas de la sociedad. Sobre la base de dichos planes los koljoses entran en contacto con el sector de todo el pueblo como parte, orgánica de la economía nacional.

 

El despliegue de la revolución científico-técnica hace que gane esfuerza el carácter social de la producción: Se ahonda la división social del trabajo, aparecen nuevos sectores y tipos de producción, avanza la especialización de las empresas productivas, se ensanchan las dimensiones de la producción y aumenta su concentración. Todo ello eleva de manera sustancial el nivel de socialización  de la economía y multiplica y complica los nexos entre lo eslabones de la producción y las zonas económicas.

 

En la etapa del socialismo desarrollado se ha credo en la URSSA un poderoso complejo económico único que se asienta sobre una moderna industria pesada altamente desarrollada y alcanza todos los eslabones de la producción del país. La fisonomía de las diferentes zonas viene3 determinada en gran parte por los complejos de producción territoriales. La propiedad social de los medios de producción une todos los eslabones de la economía fumando un todo único.

 

 

El desarrollo del complejo económico nacional lo determina e aceleramiento del programa científico-técnico. El fomento prioritario de lo novísimos sectores de la economía. Se concede suma atención al sector agrícola, a la transformación de la base material y técnica de loa producción agropecuaria con el fin de solucionar de manera radical el problema de los alimentos.

 

En lo sucesivo, tal como se consigna en los Documentos de XXVI Congreso del PCUS, se contempla además “llevar a cabo un desarrollo dinámico y equilibrado de la economía de la URRS como todo un complejo e incrementar de manera proporcional todas sus ramas y la economía de las repúblicas federadas”.

 

 

 

 

El desarrollo planificado de la economía como categoría económica. El desarrollo es una forma económica objetiva de avance de la producción en la que la asociación de trabajadores, encarnada por el Estado socialista, aparece como organizador directo de la actividad de los hombres. Caracteriza las relaciones entre los trabajadores –copropietarios de los medios de producción—en el proceso de administración coordinada por ellos de la producción social en beneficio de la sociedad.

 

La sociedad socialista regula la producción de conformidad con Saks desmandas. Lenin señala que la misión principal de la clase obrera victoriosos es, de la conquista del poder y la nacionalización de los medios de producción, “el trabajo positivo o constructivo de formación de una red extraordinariamente compleja y sutil de nuevas relaciones de organización  que abarquen la producción y distribución metódicas de los productos necesarios para la existencia  de decenas de millones de hombres” 82.

 

 

82.  V.I. Lenin. Las tareas inmediatas del Poder soviético. Obras completas, tomo 36, página 171.

 

 

El contenido del desarrollo planificado como categoría económica específica del socialismo, consiste, primero, en la regulación directamente social de los nexos que existen entre los trabajadores de la asociación única de todo el pueblo, nexos que incluyen las relaciones de la sociedad con cada trabajador y con los colectivos laborales; segundo, en la distribución directamente social del trabajo global y de su resultado: el producto global de la producción social; tercero, en la fijación y el mantenimiento directamente por la sociedad de una proporcionalidad permanente entre la masa y la estructura del trabajo socializado y de su producto global, de un lado, y la masa y la estructura de las demandas sociales, de otro. En suma, el desarrollo planificado expresa la regulación por todo el pueblo o, lo que es igual, la administración coordinada de la producción social por copropietarios de los medios de producción sobre la base de la distribución por la sociedad del trabajo y de sus frutos en beneficio de todos sus miembros.

 

Si bien las relaciones de propiedad de todo el pueblo sobre los medios de producción, plasmadas en la ley económica fundamental del socialismo, determina el desenvolvimiento de la producción social en beneficio de todos los miembros de la sociedad, en el desarrollo planificado. Dichas relaciones expresan la necesidad objetiva de una gestión económica concordad a escala de toda la sociedad, así como la imperiosidad, dimanante de ello, de una distribución proporcional del trabajo social y de otros recursos entre las esferas de la producción social, de la planificación centralizada de la economía.

 

El desarrollo planificado de la producción significa la previsión  de sus resultados. Antes de comenzar el proceso productivo, la sociedad socialista contabiliza sus demandas y sus disponibilidades y distribuye los recursos laborales y materiales en las proporciones necesarias para cubrir mejor olas demandas personales y de la producción en el período inmediato ya un plazo más largo.

 

Los medios reguladores mayormente a utilizar la retroacción económica de las relaciones de distribución e intercambio (a través del presupuesto y las entidades de finanzas y créditos) sobre el proceso productivo. No alcanzan a las relaciones dominantes de apropiación capitalista privada de los medios de producción y, por tanto, se ponen en marcha en beneficio de desarrollo9 económico. Sería un error ver en ellas una regulación social directa de la economía como un todo único e identificarlas con la planificación económica basada en la necesidad objetiva del desarrollo sistemático que es consustancial con el socialismo nada más.

 

El desarrollo planificado, en consonancia con el presupuesto de socialización de la producción, atraviesa dos fases de madurez. Puede hablarse de fase socialista y comunista de madurez de la regulación social directa de la producción. La primera guarda relación con el nivel de desarrollo de la propiedad de todo el pueblo y la existencia de diferencias sensibles entre la propiedad de los medios de producción de las empresas estatales y la de los koljoses, así como las diferencia en el cracker del trabajo que difaman de ello. Junto con el trabajo socializado a escala de la economía nacional existe en el socialismo el trabajo socializado en gran parte a nivel de los koljoses y otras cooperativas y el trabajo en la hacienda individual auxiliar que no está directamente socializado.

 

Las particularidades de la fase socialista de desarrollo planificado obedece también a la existencia de las relaciones mercantil-dineraria que bajo el socialismo constituyen una forma de reilaciones sociales directas.

 

Dichas particularidades desaparecen a medida que se va creando la base material y técnica del comunismo y se acentúa el carácter social de la producción, llegándose a alcanzar una fase superior de socialización de la economía y de su organización planificada.

 

A veces, en las publicaciones se con taponen la regulación planificada, en tato que método de gestión pretendidamente administrativo nada más, a los métodos económicos, los cuales son a menudo asociado solamente al empleo de las formas mercantil-dineraria. En realidad, de la esencia misma de las relaciones de producción socialista se desprende el contenido económico de la regulación social directa y planificada de la producción.

 

Resultan absolutamente inconsistentes en el plano científico  las tentativas de los hombres de ciencia burgueses de negar la relación indisoluble que hay entre la organización social directa y planificada de la economía y la naturaleza del sistema socialista, de la propiedad social, en  primer término la del todo el pueblo, de los medios de producción. Pretenden suplantar el socialismo científico con toda la suerte de “modelos”, que excluye la regulación centralizada de la producción, e identifican los métodos socialistas de gestión económica con los capitalistas. Los revisionistas de derecha sustituyen la regulación  planificada estatal de la economía con el desencadenamiento de lasa fuerzas ciegas del mercado, con la “libre manifestación de los intereses económicos”. En su tiempo, ¡Lenin dijo que la negación del carácter de las empresas estatales  socialistas como propiedad de todo el pueblo y del singular papel económico del Estado socialista es la expresión de la ideología pequeñoburguesa, cuando lo conceptos de justicia y libertad se copian según el principio de la “libertad” de los propietarios de las mercancías. También son incompatibles con el marxismo-leninismo las ideas de los revisionistas de “izquierda” sobre el desarrollo planificado de la producción socialista, con arreglo a las cuales la regulación social directa de la producción se sustituye simplemente con métodos de administración burocráticos y se menosprecia la importancia del estímulo material de los trabajadores en la gestión planificada de la producción social.

 

Con el avance del socialismo, la esfera de las relaciones planificadas se ensancha, se eleva el nivel de la madurez económica y planificada y se hace imprescindible coordinar de manera cada vez más estrecha el desarrollo de la ciencia, la técnica y los procesos sociales, así como de los complejos  productivos intersectoriales y territoriales.

 

 

 

La ley del desarrollo planificado, proporcional, de la economía

 

 

Contenido de la ley del desarrollo planificado, proporcional, de la economía. Los nexos de causa y efecto propios de las relaciones de  planificación encuentran reflejo en la ley del desarrollo planificado, proporcional, de la economía: La dominación  de la propiedad socialista, la de todo el pueblo en primer término, de los medios de producción condición la gestión coordinada de toda la economía como un todo único sobre la base del mantenimiento consciente de una proporcionalidad entre la producción y el consumo del producto social bruto y entre los diferentes tipos de producción que se corresponde con las demandas sociales.

 

La socialización socialista de la producción hace posible y necesario que la sociedad mantenga de manera constante y consciente la proporcionalidad de la economía. Se trata ante todo de que la estructura de la mano de obra global, de los medios de producción y del producto social que se crea, corresponda a la estructura de las demandas de la sociedad. En cada período concreto, la sociedad socialista contabiliza las demandas de la producción y las necesidades personales de los ciudadanos, determina el grado en que se cubrirán habida cuenta los recursos disponibles y mantiene de manera consciente y constante la proporcionalidad en la distribución de los medios de producción y de la mano de obra global entre los sectores, zonas y empresas de acuerdo con el volumen y la estructura de las demandas globales.

 

La sociedad encarnada por el Estado, determina además el nexo entre el tiempo de trabajo social que se invierte en la fabricación de un bien concreto y la demanda social del mismo. Por eso el tiempo de trabajo aparece también en forma social directa. “Su distribución con arreglo a un plan social –dice Marx—servirá para regular la proporción adecuada entre las diversas funciones del trabajo y las distintas necesidades” 83.

 

 

83. Carlos Marx. El Capital. Carlos Marx y Federico Engels. Obras. Tomo 23, página 89.

 

 

La ley del desarrollo planificado, proporcional, expresa un rasgo esenciadle todo el sistema de relaciones económicas del socialismo, que consiste en la unidad  de  la economía. Sin ella resulta imposible el empleo coordinado de los medios de producción por los productores asociados en beneficio de todos los miembros  de la sociedad.

 

Bajo el socialismo existe la necesidad objetiva de impulsar de manera panificada la esfera de la producción propiamente dicha y de las relaciones de distribución e intercambio, así como de mantener una correspondencia constate entre las formas de organización del trabajo y de la producción y el nivel y el carácter de las fuerzas productivas.

 

El desarrollo planificado de las fuerzas productivas y de las relaciones de producción discurre en un sentido que se corresponde con la ley económica fundamental del socialismo. La eliminación de la anarquía, de las crisis de superproducción y del despilfarro de las fuerzas productivas sociales derivado de ello, así como la creación de premisas para fijar conscientemente unas proporciones económicas acordes con los últimos adelantos de la ciencia y la técnica, aseguran un gasto racional del trabajo vivo y materializado y un aumento constante, sobre esa base, de la eficacia de la producción.

 

Entre el desarrollo planificado  y el proporcional de la economía existe una ligazón orgánica. El primero constituye una relación que asegura unas interconexiones en la economía social bajo las cuales los diversos eslabones de la cooperación general del trabajo se organiza de manera consciente par fabricar el producto social global y, por tanto, implican una proporcionalidad constante, un equilibrio de todas las proporciones económicas principales a  escala de la sociedad. “La proporcionalidad constante –Sedna Lenin--, mantenida conscientemente, significaría, en efecto, planificación”84.

 

                            

84.  V.I Lenin. Una crítica no crítica. Obras completas, tomo 3, página 620.

 

 

Son variadas las proporciones que bajo el efecto de las leyes económicas se con forman en la economía. Podemos distinguir las de carácter eco nómico general, las intersectoriales, las que se establecen dentro de cada sector y cada in Austria, las territoriales y las interestatales. El nuevo tipo de división internacional del trabajo y la integración económica de los países miembros del CAME 85, crean condiciones para el funcionamiento de la ley del desarrollo planificado, proporcional, de la economía en el ámbito internacional.

 

85.  CAME o Comecon fue una organización de cooperación económica formada en torno a la Unión Soviética por los países del llamado socialismo real y cuyos objetivos eran el fomento de las relaciones comerciales entre los estados miembros.

 

Mantener conscientemente las proporciones de la economía no debe entenderse como que dichas proporciones deben conservarse invariablemente. Ello frenaría el desarrollo y el perfeccionamiento técnico de la producción social, la elevación sistemática de su eficacia y, en última instancia, se contradiría con la ley económica fundamental del socialismo. Proporcionalidad constante significa mantener un equilibrio dinámico de la economía, asegurar la coordinación entre la distribución del trabajo social, habida cuenta del progreso tecnológico, de un lado, con las proporciones y la estructura de las demandas sociales globales, de otro.

Las proporciones de la economía se modifican bajo el efecto de diarios factores: Los principales son: el progreso científico-técnico, la elevación de la productividad del trabajo, la eficacia de la producción, el ascenso de nivel de las demandas materiales y espirituales de los miembros de la sociedad y las condiciones políticas exteriores. Provoca cambios sustanciales en las proporciones de la economía, la revolución científico-técnica, la cual transforma los medios tradicionales de producción y la mano de obra y origina nuevas demandas de la  producción y personales. Surgen y se desarrollan rápidamente sectores de avanzada de la producción, se transforma la producción agrícola merced a los métodos industriales, aumenta el dinamismo de la producción y su capacidad de remodelarse habida cuenta de la reducción de los plazos de renovación de los medios de producción, de la elevación de la productividad del trabajo y del crecimiento de nuevas demandas sociales.

En la sociedad socialista desarrollada, las inmensas dimensiones de la producción y su alto nivel de especialización y cooperación complican extraordinariamente los nexos dentro de ella. Al propio tiempo, la regulación social planificada de la producción brinda mayores posibilidades para el sucesivo ascenso de su eficacia y para que las demandas de los miembros de la sociedad se cubran de manera cada vez Ma. plena. A medida que la sociedad socialista avanza hacia el comunismo crece la importancia del desarrollo planificado, proporcional, de la economía. “El ahorro de tiempo –ha escrito Marx --, al igual que la distribución planificada del tiempo de trabajo entre las distintas ramas de la producción, sigue siendo la primer ley económica sobre la base de la producción colectiva” 86.

 

86. Archivo de Carlos Marx y Federico Engels, tomo IV, página 119.

 

 

Regulación planificada de la producción. El Estado socialista, al decir de Lenin, aparece “como regulador de la distribución de los productos y de la distribución del trabajo entre los miembros de la sociedad” 87.

 

 

87.  V.I. Lenin. El Estado y la revolución. O. completas, tomo 33, página 94.

 

 

La actividad del Estado en la regulación de la producción se basa en el conocimiento y la utilización de todo el conjunto de leyes económicas. En el contenido de las proporciones desempeña el papel principal la ley económica fundamental, que expresa la interconexión entre la producción y el consumo en su con junto y la dirección general de desarrollo de la producción. La ley económica fundamental, en tanto que ley del movimiento del modo comunista de producción determina la orientación general del desarrollo de la economía. Algunas vertientes de la producción vienen determinadas por leyes como, por ejemplo, la de la acumulación socialista, al del crecimiento prioritario de la producción de bienes de equipo, etc., que por esta razón, cumplen también en una u otra medida la función reguladores de la producción.

 

Además, la propiedad de todo el pueblo dicta la necesidad de formar las proporciones de la economía en su interconexión, de adecuarlas a la estructura de la demandas sociales globales. Esta función la cumple la ley del desarrollo planificado, proporcional, de la economía, la cual fija la proporcionalidad general. Valiéndose de la ley del desarrollo planificado, proporcional, de la economía, el Estado organiza la actividad conjunta de los miembros de la sociedad, asegura el desarrollo de la economía u coordina los intereses económicos de las clases y grupos sociales, de los trabajadores, partiendo de los intereses de todo el pueblo.

 

La esencia, las formas y los métodos de la gestión estatal de la economía vienen determinados también por las condiciones históricas de l construcción del socialismo. . En el contexto del socialismo desarrollado, la gestión de la producción social se adecua a las relaciones socialistas maduras y al nivel de las fuerzas productivas. La actividad gestionaría va enfilada a incrementar la eficacia de la producción social y a mejorar los resultados finales de la economía.

 

La aplicación consciente de las leyes económicas brinda a la sociedad la posibilidad de dirigir todas las vertientes de la vida social. El socialismo es la época histórica en que, al decir de Engels, “una organización consciente de la produjcción social, en la que la producción y la distribución obedezcan a un plan” 88 eleva a los hombres hasta que llegan a dominar sus relaciones sociales convirtiéndose por primera vez en artífices conscientes de la historia 89.

 

88.  Engels. Introducción a “La dialéctica de la naturaleza”. Carlos Marx y Federico Engels. Obras, tomo 29, página 359.

 

89.  Esta máxima del gran pensador marxista Federico Engels, no se pudo llevar a buen término, sobre todo debido a que en  la Unión Soviética todavía seguían agazapados los contrarrevolucionarios, los oportunistas y toda clase de parásitos, que no habían sido extirpados en el transcurso de la edificación del socialismo real. (A.R.P.)

 

 

 

La importancia de trabajo de Lenin. Las tareas inmediatas del Poder soviético. En su trabajo Las tareas inmediatas del Poder soviético Lenin fundamentó e todos los aspectos el papel de Estado socialista en la organización planificada de la producción y la distribución del producto social en beneficio de los trabajadores. Fue escrito en marzo-abril de 1918, época en la conformación de las relaciones de producción socialistas era problema primordial de la revolución.

 

La creación de la gran industria mecanizada y la nueva organización del trabajo eran, según Lenin, la tarea cardinal con vistas a la consolidación y el desarrollo de formación social socialista. Lenin fundamentó el principio del centralismo democrático en la organización de la economía socialista y avanzó en  calidad de una de las tareas principales del despliegue de la emulación masiva entre los trabajadores y la creación de una disciplina de trabajo nueva, consciente, de camaradas.

 

Posteriormente, algunos postulados del trabajo en cuestión fueron desarrollados. En particular Lenin aportó una importante contribución  a la teoría de la organización y las gestión planificada de la economía, habida cuenta de las condiciones que se conformaron a resultas de la Nueva política económica y el empleo de la relaciones mercantil-dinerarias.

 

El trabajo Las tareas inmediatas del Poder soviético ayuda a mostrar la inconsistencia  científica de las concepciones burguesas y reformistas de la planificación que dimana de los conceptos maoístas de la gestión. También tiene valor de actualidad la crítica leninista del anarcosindicalista de la gestión en el socialismo. Los principios de la gestión elaborados por Lenin siguen manteniendo su significación en las circunstancia de hoy.

 

En el sistema de producción socialista, que funciona de manera planificada, el incremento de la producción acusa ritmos elevados y no va de la mano con crisis y recesiones. Esa es una de las grandes ventajas del socialismo 90.

 

90. Las grandes ventajas sociales provienen del socialismo verdadero o real, cuyos fundadores fueron los tres genios del marxismo: C. Marx, F. Engels y V.I. Lenin.  El resto de los socialismos, sobre todo el aplicado  por la socialdemocracia,  han y son socialismos espurios.

 

 

La proporcionalidad óptima de la economía

 

 

El cambio de las demandas sociales y la estructura de la producción. Las proporciones en que se distribuyen el trabajo social y los medios de producción entre las diferentes esferas y sectores de la producción socialista se hallan en relación directa con la estructura de las demandas de la sociedad. A una producti8vidd dada del trabajo, las demandas determinan la parte del tiempo social que corresponde a estas o a las otras esferas y sectores de la producción.

 

El mantenimiento planificado de la proporcionalidad en la economía implica en primer término asegurar la coordinación de las demandas personales y las de la producción. En este orden, las demandas personales constituyen la base de las dmanndas productivas que los medios de producción tienen por misión cubrirlas. La contabilización de las demandas sociales de bienes de uso y consumo personal y productivo, así como los servicios, le permite a la sociedad socialista determinar los recursos necesarios para cubrirlas, las respectivas proporciones de la producción y su estructura de ritmo de crecimiento. De este modo se establece la necesaria correspondencia entre la estructura de las demandas sociales y el fomento de la producción material y no material.

 

En el proceso de regulación planificada de la producción de la sociedad toma en consideración el cambio permanente que experimentan las demandas. Cuanto más alto es el nivel de la  producción antes rebasa ésta el marco de las demandas ya configuradas. Inciden de manera sustancial sobre la aceleración del crecimiento de las demandas las medidas que el Estado toma para borrar las diferencias sustanciales entre la ciudad y el campo y entre el trabajo  manual y el intelectual, medidas que van enderezadas a lograr el desarrollo total del individuo.

 

La propiedad social de los medios de producción destruye en antagonismo entre la producción y las demandas propias de la sociedad capitalista. El desenvolvimiento de la producción socialista, a diferencia de la producción bajo el capi8talismo, no viene determinando por el afán de lucro, sino directamente por las demandas de bienes de consumo y de los bienes de de quipo necesarios para producirlo. Estas demandas, que viene originadas por la producción, son al mismo tiempo relativamente independiente respecto de ellas y las estimulan si cesar, planteándole nuevas tareas.

 

El desarrollo de las demandas va de la mano con el cambio de su estructura. A medida que se eleva el nivel de vida del pueblo crecen en grado relativamente mayor las demandas personales de bienes de alta calidad. Estos últimos años, el progreso de la ciencia y la técnica ha condicionado la aparición de multitud de nuevas de nuevas demandas y de medios de cubrirlas. Ha pasado a primer plano el problema de asegurar que los bienes producidos correspondan a las nuevas demandas, y de elevar su calidad y fiabilidad. A raíz de ello se hace cada vez más imperiosa la necesidad de elevar el tecnológico y la eficacia de la producción. Las contradicciones no antagónicas que se registran entre las demandas modificadas y las proporciones establecidas de la distribución de la mano de obra y de los medios de producción en los distintos sectores de la economía se superan en el proceso de perfeccionamiento de la gestión planificada.

 

Utilidad social del producto. El tiempo de trabajo necesario para la producción de tales o cuales bienes lo distribuye la sociedad socialista atendiendo la importancia que tienen para satisfacer la demandas de la sociedad. En otras palabras, se toan en consideración los efectos útiles desde el ángulo de los intereses de toda la sociedad, es decir, su utilidad social. Guiándose por este criterio, la sociedad decide qué demandas personales y productivas deben ser cubiertos en primer término en un momento dado.

 

La necesidad de elevar la calidad del producto guarda relación directa con la consecución del objeti8vo de la producción socialista: El satisfacer las demandas materiales y culturales de los miembros de la sociedad. El ascenso de la eficacia de la producción brinda la posibilidad de fabricar bienes que se corresponda con los últimos adelantos de la ciencia y la técnica.

 

Sobre el grado de satisfacción de las demandas de la sociedad incide además las magnitudes de gastos de tiempo de trabajo. La disminución del gasto de tiempo en la fabricación de cada artículo brinda a la sociedad la posibilidad de ampliar la gama y elevar el grado de satisfacción de sus demandas.

 

Así pues, la distribución del trabajo entre las diferentes esferas de la producción tiene lugar en la sociedad socialista habida cuenta tanto el efecto útil de los productos como el tiempo de trabajo que se invierte en su fabricación.

 

 

Optimización de las proporciones en la economía. Una proporcionalidad óptima de la economía significa que la estructura de la producción corresponde a la tarea de alcanzar la más plena satisfacción de las demandas sociales con el mínimo gasto de trabajo vivo y materializado.

 

Entre la proporcionalidad óptima de la economía y la reducción de los gastos de trabajo social en la producción de bienes existe una relación estrecha. Dicha reducción constituye el medio decisivo para asegurar una proporcionalidad económica óptima; a su vez, la optimización planificada de las proporciones es un recurso esencial para el ahorro del trabajo. En el socialismo se da la posibilidad no sólo de suprimir las pérdidas de trabajo provocas por la anarquía y el carácter cíclico de la producción capitalista, el consumo parasitario  de las clases explotadoras, la militarización y las lacras del sistema burgués de relaciones de producción, sino que se propician las condiciones para una distribución racional de los recursos entre las esferas de la producción social.

 

La conformación de las proporciones óptimas implica el estudio de las tendencias del desarrollo de las demandas en un futuro más o menos alejado Los actuales conocimientos científicos permiten prever las principales tendencias del desenvolvimiento de la ciencia y la técnica, las tasas del crecimiento de la población y  la variación de las demandas sociales esenciales. Por otra parte, la organización de nuevos sectores de la producción generados por la revolución científico-técnica, la creación de grandes complejos de producción territoriales, los esfuerzos para sanear el medio ambiente y otras medidas importantes sólo pueden progresar habida cuenta del desarrollo de la economía a largo plazo.

 

Una condición de peso para crear las proporciones óptimas de la economía es la asignación para esos fines de cierta cantidad de medios de producción y de bienes de consumo personal, esto es, reservas (de materias primas, combustible, materiales, capacidades productivas y bienes de uso y consumo). Las reservas se emplean para cumplir las tareas económicas a largo plazo relacionadas con grandes cambios estructurales de la economía.  Permiten prevenir desproporciones parciales que pueden surgir debido a la disparidad en el ritmo de crecimiento de los diversos sectores, y a la inadecuación de las estructuras de las demandas a la de la producción en el contexto de la aceleración  del progreso científico-técnico, así como a la incidencia sobre la producción, sobre todo de la agrícola, de las fuerzas ciegas de la naturaleza, los fallos en la planificación, etc.

 

La proporcionalidad óptima de la economía está indisolublemente ligada con las relaciones de producción del socialismo, que abren campo al perfeccionamiento de las fuerzas productivas, y con las ventajas, que brinda el sistema  socialista para llevar a cabo la revolución científico-técnica y la elevación de la eficacia de la producción. Las Orientaciones fundamentales del Desarrollo de la Economía en la URRS para los años 1981-1985 y hasta 1990 estipulan medidas necesarias a fin de asegurar el equilibrio de la producción social 91.

 

91.  Ver nota 76 y 79, sobre este particular. (A.R.-P.)

 

 

 

LAS RELACIONES MONETRIAS-MERCANTILES EN EL SOCIALISMO

 

Una de las particularidades de la producción social directa en la fase socialista de la producción social en la fase del socialista es la producción de bienes como mercancía. De ahí que en el socialismo exista la circulación de mercancías y rija la ley del valor. La organización planificada de la producción comprende el empleado por la sociedad de las relaciones monetario-mercantiles, las cuales poseen  un nuevo contenido económico

 

En este apartado se examinan la necesidad, la esencia y el papel de las relaciones monetario-mercantiles en la economía socialista.

 

 

 

NECESIDAD Y ESENCIA DE LAS RELACIONES MERCANTILES EN EL SOCIALISMO

 

 

Motivos por lo que existen las relaciones mercantiles en el socialismo. En la sociedad socialista persiste la premisa general de las relaciones mercantiles: la división social del trabajo. Pero la división social del trabajo

 la división social del trabajo no explica por sí misma la necesidad de producir bienes como mercancías. El motivo de que existan lasa relaciones  mercantiles hay que buscarlo en las particularidades de la fase socialista de la socialización de las empresas.

 

Junto con la propiedad de todo el pueblo de los medios de producción existe en la sociedad socialista la propiedad de los koljoses y otras cooperativas. La dominación de la propiedad de todo el pueblo condiciona la naturaleza social directa de los nexos económicos entre el conjunto de la sociedad y los koljoses. En este orden, es preciso atender los intereses tanto de los koljoses como lo del conjunto de la sociedad y comprobar en qué medida corresponde la cantidad, la calidad y la tendencia del trabajo de los koljosianos a los intereses de todo el pueblo. La forma de conexión que se corresponde con dichos requisitos es el intercambio de mercancías.

 

 El trabajo de cada individuo y de los colectivos de las empresas del sector de todo el pueblo lo organiza directamente la sociedad. Por cuanto existen diferencias esenciales en el trabajo realizado para la sociedad todavía no se ha convertido en primera necesidad vital, es un medio importante de incorporar a cada miembro de la sociedad en el sistema del trabajo social su interés material por los resultados del trabajo. La gestión coordinada de la economía se efectúa a través de la regulación social directa de las producción que incluye el estímulo material del trabajo de los colectivos son socialmente  necesarios.  Este sistema de relaciones planificadas estipula el intercambio de bienes entre los colectivos a partir de la cantidad de trabajo invertido para producirlos, esto es, un cambio equivalente de mercancía.

 

Las relaciones mercantiles son necesarias también en los nexos económicos con el exterior. En las relaciones económicas entre los países  socialistas participan distintos propietarios aunque son socialmente homogéneos. En este caso el intercambio mercantil estimula la gestión económica eficaz en beneficio de cada país socialista y del sistema socialita mundial en su conjunto. El intercambio de bienes entre los países socialistas y capitalistas adquiere inevitablemente la forma de cambio mercantil puesto que intervienen propietarios socialmente opuestos.

 

Así pues, la razón de que en la economía socialista exista la producción de mercancías, de relaciones mercantil-monetarias, reside, atendidas las condiciones internas y exteriores, en las particularidades de propiedad social socialista y del carácter de trabajo. Estas particularidades, a su vez, vienen condicionadas en definitiva por el grado de desarrollo de la producción social y el nivel  de las fuerzas productivas. Las relaciones monetario-mercantiles constituyen un rasgo esencial de la relaciones de prodeucción socialista.

 

 

 

Diferencia carnal entre las relaciones monetario-mercantiles del socialismo y del capitalismo. Las relaciones mercantiles-monetarias expresa, bajo el socialismo, unos nexos económicos entre los hombres fundamentalmente nuevos por su contenido y sus formas, por cuya razón defieren de modo cardinal de las relaciones monetarios-mercantiles habidas en las precedentes fases de la historia de la sociedad.. Su principal peculiaridad en que descansan sobre la propiedad social socialista y constituyen una forma de nexos planificados, directamente sociales entre los productores asociados a escala de la sociedad.

 

Bajo el capitalismo, la producción mercantil se desarrolla de forma anárquica, lleva a los productores de mercancías a la ruina y encierra loa posibilidad y la inevitabilidad de las crisis económicas. En el socialismo, las relaciones mercantiles se insertan en el sistema único de gestión coordinada de la economía, y no existen crisis de superproducción ni ruina de los productores.

 

La esfera de las relaciones monetarios-mercantiles es limitada bajo el socialismo. A diferencia del capitalismo, la fuerza del trabajo aquí no es mercancía, dados que los medios de producción pertenecen a los productores mismos. Tampoco so objeto de las relaciones mercantiles las empresas socialistas.

 

En la sociedad capitalista, la producción mercantil se impulsa con el afán de extraer el máximo la máxima ganancia. Contrariamente, la producción socializada de mercancías bajo el socialismo está supeditada a cubrir las demandas de toda la sociedad y al desarrollo total de cada individuo.

 

La relaciones mercantiles bajo del capitalismo constituyen la forma general  y dominante de nexo económico, a través del cual se realiza, de manera espontánea y a través de contradicciones antagónicas, la unidad de la producción  y el intercambio social. El capitalismo es un sistema de producción mercantil anárquico. Este sistema desaparece junto con el capitalismo y, por consiguiente, la producción socialista no constituye un sistema o una modalidad de la producción mercantil. El socialismo es la producción social directa, no regulada por las fuerzas ciegas del mercado, sino de modo planificado por la sociedad y supeditada a los intereses del conjunto de la sociedad y de cada miembro.

 

El hecho de que existan relaciones mercantiles de un contenido nuevo, socialista, significa que hay un mercado y una circulación de mercancías socializados y organizados con arreglo a un plan. La demanda solvente de las empresas socialistas y de los trabajadores se configura de un modo planificado y refleja globalmente  (si se tiene en cuenta también las demandas que se cubren gratuitamente) el volumen de las demandas realmente cubiertas. Las relaciones entre la sociedad y las empresas socialistas se basan en el cálculo económico.

 

Bajo las relaciones monetario-mercantiles, los recursos materiales de la sociedad y de cada empresa adquieren forma monetaria y viene a ser las finanzas de las empresas y del Estado, formando el sistema financiero de la sociedad socialista. Existe a la vez el sistema estatal de crédito. A través de lo sistemas financiero y crediticio el Estado ejerce un fuerte influjo económico sobre la labor  de las empresas y contribuye a perfeccionar las proporciones que se establecen en la economía con arreglo al plan.

 

Las relaciones mercantiles y las formas económicas propias de éstas (dinero, precio, fianzas, crédito, etc.) aparecen en el socialismo como un medio importante de control social de la producción y la distribución de bienes.

 

 

La mercancía y sus cualidades en el socialismo.  La definición de mercancía que se da teniendo presente la producción mercantil basada en la propiedad privada no sirve para el socialismo. Dice Lenin  que “producto de la fábrica socialista, intercambiando por comestibles agrícolas, no es una mercancía en el sentido económico-político, en todo caso no es sólo una mercancía, no es ya una mercancía, deja de ser mercancía 92.


92.  V.I. Lenin. Mandato del Consejo de Trabajo y Defensa a las instituciones  locales de los Soviets. Obras completas, tomo 43, página 276.



El producto de una empresa socialista cambia con arreglo al plan difiere cardinalmente de la mercancía como producto del trabajo individual destinado para el intercambio espontáneo. El producto social directo de la producción socialista, que conserva propiedades de mercancía, no es producto del capital ni es forma de conexión entre productores privados. En la sociedad socialista, la mercancía es un bien que las empresas socialistas fabrican con arreglo a un plan para cubrir las demandas de la sociedad y que se va al consumo a través de un intercambio mercantil planificado. Por consiguiente, en el socialismo la mercancía constituye una mercancía especial que es producto del trabajo social directo.

Son mercancías en la sociedad socialista tanto los bienes de uso personal como los bienes de equipo. Losa unos y los otros pasan del productor al consumidor en forma de compraventa regulada de modo planificado. Las mercancías que se distribuyen con arreglo a un plan en forma de comercio al por mayor entre las empresas estatales expresan la relaciones en el sector de todo el pueblo y las que las empresas estatales venden o comprar a los koljoses reflejan las relaciones entre el conjunto de la sociedad y los koljoses. En ambos casos el intercambio de mercancías aparece como un forma especial de distribución planificada del producto por el Estado socialista y, por tanto, expresa rasgos sustanciales del sistema de relaciones de producción socialista.

Las mercancías de las empresas socialistas tienen, igual que toda mercancía, dos propiedades: valor de uso y valor, pero éstas acusan en el socialismo diferencias fundamentales.

En la sociedad socialista, el valor de uso de las mercancías es un valor social directo. La fabricación de bienes útiles para la sociedad se asegura mediante la organización planificada de la creación del producto  social, de todas sus variedades concretas

Al capitalista le interesa el valor de uso nada más como portador de valor y de plusvalía: La producción socialista se organiza en beneficio de toda la sociedad, y el valor de uso social, como tal, adquiere en ella un significado propio.

El trabajo socialmente útil invertido en  la producción de una mercancía constituye su valor

En el socialismo el valor expresa las relaciones socialistas de producción y es la encarnación  de los gastos del trabajo de los miembros de la sociedad. La reducción del valor de la mercancía a c osta de elevar la productividad del trabajo permite cubrir demandas de manera más plen y contribuye a la expansión y el desarrollo de la producción.

El valor absoluto de un producto suele compararse por lo común con su calidad, la cual se expresa en su defecto útil (por ejemplo, en sus propiedades físicas o químicas, en el temo de uso del mismo, etc.). Con el progreso tecnológico y la mayor diversidad de aplicación de un mismo, producto viene adquiriendo creciente importancia la comparación del valor de la mercancía con la unidad de efecto útil de su empleo. El valor de la unidad de efecto útil se toma en consideración a la hora de optar por las tendencias del desarrollo tecnológico y de mejorar las proporciones en la economía.



 

El doble carácter de trabajo



El nuevo contenido del trabajo abstracto y concreto. Las mercancías tienen valor y valor de uso porque el trabajo invertido en crearlas es a la vez abstracto y concreto.

 

En la sociedad socialista no existe el trabajo privado y el doble carácter del trabajo no expresa contradicciones entre el trabajo privado y el social. El trabajo abstracto y el concreto constituyen las dos caras del trabajo social directo.

 

Bajo el capitalismo, a través del trabajo abstracto se expresa el carácter social del trabajo privado. En el socialismo, el trabajo abstracto expresa el trabajo socializado, lo que de común en las diversas formas concretas y los diferentes tipos (intelectual y manual, industrial y agrícola) de trabajo social directo.

 

La necesidad de expresar el trabajo social en forma de trabajo abstracto está ligada a la fase socialista del trabajo social directo, a las diferencias sustanciales del trabajo que existen y al hecho de que el trabajo para la sociedad no ha llegado todavía a ser la primera necesidad vital de los hombres. En estas circunstancias, el trabajo de cada miembro de la sociedad, como parte del trabajo social directo global, se expresa en valor, siendo contabilizado y controlado por la sociedad a través del intercambio con arreglo a un plan.

 

 

Contradicciones entre el trabajo concreto y abstracto. Existen en el trabajo concreto y abstracto contradicciones que manifiestan en la que tienen lugar entre el valor de uso y  el valor. Son, por su carácter, contradicciones no antagónicas del trabajo social directo y consten en que éste significa, de un lado, la necesidad de una gestión económica coordinada (planificada) en beneficio de toda la sociedad y, de otra, que el trabajo para la sociedad no ha llegado todavía a ser la primera necesidad vital de los miembros de ella. El desarrollo planificado de la producción estipula conjugar los intereses personales y de los colectivos con los del todo el pueblo, siendo prioridad lo últimos.

 

En determinadas circunstancias pueden producirse alteraciones en la correspondencia entre la producción y las demandas. A ello conduce, por ejemplo, la oposición, que todavía puede observarse, de los intereses personales o locales  a los de todo el pueblo, cuando se altera el surtido de bienes planificado que necesita la sociedad en ara de unas ventajas personales de estos o de los otros trabajadores y de unas ganancias no planificadas de ciertas empresas. Sin embargo, todo ello no puede provocar la superproducción general de mercancías y la anarquía de la producción a escala de la sociedad, propias del capitalismo.

 

En determinadas condiciones, la relaciones mercantil-monterías pueden ser terreno de abono para la especulación, la dilapidación del patrimonio público, etc. Estos fenómeno superan principalmente a través de la contabilidad y el control socialistas a escala nacional y de una labor educacional orientada a conseguir una actitud concienzuda y creadora ante el trabajo y nel incremento de riqueza de la sociedad.

 

Al impulsar la producción socialista y perfeccionar el sistema de comercialización planificada de los productos a través del comercio al por mayor y al por menor, la sociedad socialista asegura la solución de dichas contradicciones y que se conjuguen debidamente los intereses de cada trabajador y los del conjunto de la sociedad. Con este fin, la actividad de las empresa se valoran tanto con arreglo a los exponentes que caracterizan el valor de uso de los productos y los gastos directos de tiempo de trabajo, como según los índices del valor propiamente dicho.

 

 

La propiedad social de los medio de producción  elimina el fetichismo de la mercancía y del dinero. El movimiento del producto del trabajo socialista es conmsecuencia de unos vínculos planificados, establecidos de antemano entre los miembros de la sociedad.

 

 

Magnitud del valor de la mercancía. El valor de un artículo o, dicho en otros términos, los gastos sociales para su fabricación, se determinan según los gastos de trabajo socialmente necesarios. Como tale aparece el promedio de gasto efectivo, adoptando como promedio los gastos con los que se crea la masa fundamental del tipo de producto que necesita la sociedad. Estos revisten un carácter objetivo y dependen del nivel de productividad del trabajo social que se haya alcanzado realmente.

 

Una magnitud de gastos concreta implica un determinado efecto útil. Por eso, los gastos socialmente necesarios pueden calcularse también por unidad de efecto útil (digamos por cada caloría que se obtiene de la combustión del carbón), lo cual permite comparar productos mutuamente reemplazables  el proceso productivo por su valor. Dado que cada producto puede emplearse de mil maneras, el problema de su utilización más racional se resuelve habida cuenta de los gastos socialmente necesarios por unidad del mismo.

 

La sociedad socialista establece de manera centralizada unas proporciones eco nómicas que contribuyen a reducir los gastos de producción dy a la aplicación planificada de la nueva técnica, así como el ahorro de toda clase de recursos. Ello influye directamente en la magnitud de los gastos socialmente necesarios.

 

Para la sociedad tienen importancia también los gastos individuales de las empresas en el cumplimiento de las metas establecidas en el plan,         que dichos gastos corresponden a las normas fijadas. Procura superar las contradicción entre los gastos individuales y los socialmente necesarios. Las normas en la plan se establecen por lo común por debajo de las cotas alcanzadas con el fin de orientar a las empresas hacia la reducción de los gastos de producción. Ahora bien, el hecho de que el Estado socialista planifique los gastos de producción no significa que cualquier gasto previsto en el plan sea socialmente necesario. Como tales aparecen los gastos de trabajo en unas condiciones media de producción.

 

En la economía capitalista, las empresa que producen  a unos costes más bajos se ven en una situación privilegiada y se enriquecen,  y las que fabrican producto con un valor individual más alto, se arruinan. La formación de loi gasto socialmente necesarios se traduce en la ruina de la masa de productores, en gastos improductivos de trabajo y de recursos materiales.

 

En la economía socialista no existen la competencia y el secreto comercial. La sociedad contribuye a la aplicación de los adelantos en las distintas empresas en beneficio común. El funcionamiento normal de las empresas debe asegurar la satisfacción de las demandas de la sociedad. La consecución por cada empresa del nivel de gastos socialmente necesarios y su reducción son una expresión de su esmero hacia el trabajo y afianzan las relaciones de propiedad social.

 

En la reducción del valor del producto es decisivo el papel del progreso tecnológico, la implantación y el mejor empleo de la nueva técnica y la organización científica del trabajo. Crece la importancia de la cualificación de la mano de obra. Sabido es que en un trabajo más complicado crea mayor valor por unidad de tiempo. El trabajo cualificado crea a la vez mayor cantidad de valores de uso y contribuye a elevar la calidad del producto.

 

En el socialismo es posible calcular la magnitud de los gastos de trabajo socialmente necesario y reducir el trabajo de diversa complejidad a una determinada  cantidad de trabajo simple y de los varios tipos de trabajo concreto, a trabajo en general. Mediante el balance intersectorial se ha construido un modelo económico-matemático de los gastos totales del trabajo en espacio de tiempo laboral que reproduce las interconexiones de los productores que participan directa o indirectamente en el proceso de creación de un producto concreto.  A partir de este modelo se calculan los índices de densidad social total del trabajo, lo cuales comprenden el tiempo del trabajo invertido por el personal ocupado en la fabricación de un producto concreto, así como los gastos  de trabajo materializado en las materias primas, combustible, equipos y demás medios de producción empleados.

 

 

El dinero en la sociedad socialista

 

 

Necesidad y esencia en la sociedad socialista. Unas relaciones mercantiles desarrolladas implican la existencia del dinero. El hecho de que el valor de las mercancías se expresa mediante su equiparación a una de ellas, y el cambio de mercancías  por dinero, significa que hay un proceso de circulación. El dinero es una forma equivalente universal del valor. El nuevo contendido social del dinero consiste en que se plasma en él el trabajo social condicionado por la dominación de la propiedad socialista, y, por tanto, no puede convertirse en capital, en medio de explotación.

 

A través del intercambio de las mercancías se produce una equiparación de los distintos tipos de trabajo a una determinada cantidad de trabajo social. De ahí que el dinero permite contabilizar los gastos de trabajo en la fabricación de mercancías. El proceso de circulación viene a ser un sistema de actos separados de intercambio unidos entre sí mediante el dinero. En esta sistema aparece como instrumento de control del funcionamiento de las empresas, con dependencia del tipo de producto que se fabrique, como medio para estimular el trabajo y como elemento  necesario de contabilización y control a escala  de la economía nacional. El consumidor final incide en el establecimiento comercial, éste en los productos, los últimos en los proveedores, y así sucesivamente.

 

La circulación del dinero constituye un importante eslabón en el proceso de producción organizado de manera planificada. Las empresas reciben el dinero para su actividad corriente a medida que comercializan sus productos. La adquisición de materias primas y materiales, la compensación de los fondos fijos y circulantes empleados, las acumulaciones y la obtención por los trabajadores de su parte en el producto social dependen de cómo se vende el producto fabricado.

 

El dinero funciona entre los sectores de producción socialista, dentro de cada sector y, en cierta medida, entre los miembro de la sociedad. La especificidad de las relaciones económicas en cada esfera encuentra reflejo en la circulación del dinero. Al mismo tiempo, el mecanismo de la circulación monetaria contribuye a la unidad del proceso de reproducción a escala de la sociedad. El dinero sirve además en el comercio con los países extranjeros.

 

El hecho de que el dinero en la sociedad socialista difiere fundamentalmente del dinero bajo el capitalismo no quiere decir que haya dejarlo de serlo y se haya convertido en recibos o bonos de trabajo. A diferencia de los bonos de trabajo, el dinero circula, y no expresa los gastos de trabajo en horas, sino que representa un tiempo de trabajo materializado, una mercancía que posee valor.

 

La dominación de la propiedad social de los medios de producción y la planificación de la economía restringen la propiedad del cambio universal del dinero. Como hemos señalado en el socialismo la fuerza de trabajo no es una mercancía; tampoco son objeto de  compraventa las empresas. Ha sido eliminada la base del fetichismo del dinero; éste no domina al hombre ni aparece como una fuerza social espontánea.






Funciones de dinero. En la economía socialista, el dinero cumple, en primer término, la función de medida de valor, esto es, sirve de medida de trabajo social directo plasmado en la mercancía. El valor de las mercancía es expresado en dinero principalmente mediante la fijación de los precios del plan que son la forma monetaria del valor de la mercancía.

 

Por medio del dinero se efectúa, en el proceso económico, la contabilidad social sistemática de los gastos de trabajo vivo y materializado, de la producción y la distribución de las mercancías y el control de la medida de trabajo y consumo. La contabilidad en dinero se efectúa a la vez que la contabilidad del trabajo en tiempo de trabajo directamente.

 

En los países socialistas el oro aparece como mercancía dinero. Ello tiene varias razones, en particular la de que el nuevo régimen social hereda la circulación monetaria del viejo sistema, donde los precios de las mercancías tienen un contenido-oro. Los países socialistas mantienen relaciones no sólo entre sí, sino también con el mercado capitalista mundial, en el que el oro aparece en calidad de dinero.

 

La función del dinero como medida de valor se cumple a través de la escala de precios, es decir, de la unidad monetaria mediante la cual se expresan los precios de las mercancías. El Estado socialista no sólo fija a escala de los precios sino que, al planificar los precios y la circulación fiduciaria, incide en la capacidad de compra real de la unidad monetaria, esto es, en la magnitud real de la escala de precios.

 

La ley de circulación fiduciaria exige que se mantenga la correspondencia entre el contenido-oro de la unidad monetaria y el nivel de precios establecido con arreglo al plan. Sin embargo, la variación del valor del oro en el contexto de la sociedad socialista no implica una modificación automática de los precios. Pueden darse períodos prolongados en que existen diferencias entre ambos, puesto que son las empresas de todo el pueblo las que extraen el oro y éste no tiene libre acceso al mercado. La relación  entre el contenido de la escala del dinero y el nivel de los precios revisa el Estado periódicamente y con arreglo al  plan 93.

 

 

93.  El contenido-oro rublo soviético se fijó a 1 de enero de 1961 en 0,987421.

 

El dinero cumple en la sociedad socialista la función de medio de circulación. El proceso  M—D—M 94 es una forma peculiar de control y contabilización, a través de la cual se realizan los nexos entre los distintos eslabones de la economía y las diferentes fases de la reproducción y se revista la relación , fijada por el plan, entre la producción, la distribución y el  consumo de la sociedad.  Es una especie de comprobación del estado del movimiento de mercancías, de su correspondencia con la demanda solvente total y de cada tipo de mercancía.

 

94.  M—D—M, siglas de mercancía-dinero-mercancía. (A.R.P.)

 

El dinero como medio de circulación se haya en el servicio principalmente del comercio al pormenor. En el comercio al por mayor no se hace generalmente de dinero en efectivo.

 

El socialismo se descarta la posibilidad de las crisis de superproducción relacionadas con la función del dinero como medio de circulación. La excesiva acumulación de mercancías sin  venta que se registra a  veces en algunas zonas suele ser consecuencia de no haber estimado enteramente la demanda de los consumidores, de que alguna empresas no cumplen el plan del surtido y de que se lanzan  a la red comercial las mercancías de baja calidad.

 

Con el fin de disminuir los gastos de circulación la mercancía dinero es reemplazada por el papel moneda. Esto vine condicionado no sólo por la propia naturaleza de dicha función del dinero, sino también por la regulación planificada de la cantidad de dinero en circulación. La sociedad determina la esfera de  circulación de dinero en efectivo y dispone de los resortes de panificación precisos para asegurar que la cantidad de dinero a las necesidad efectiva del mismo.

 

El dinero cumple en el socialismo la función de ahorro  y de formación de reservas monetarias. Las empresas e instituciones estatales y los koljoses crean, para atender sus necesidades cotidianas, reservas de dinero que guardan en los bancos. La gestión planificada de la economía y la inexistencias de flotaciones coyunturales y de las especulaciones la bolsa permiten reducir las reservas pecuniarias a una magnitud racional. Los trabajadores pueden guardar r sus ahorros obtenidos de su trabajo en las cajas de ahorro o invertirlos en empréstitos estatales.

 

Bajo las relaciones mercantiles-monetarias, al proceso de acumulación real produce su forma monetaria. Partiendo de los intereses del desarrollo planificado de la economía, una parte considerable de las acumulaciones en metálico de las empresas socialistas se redistribuye a través del porsupuesto del Estado. En este proceso se forman las reservas pecuniarias estatales.

 

Cierta parte de dichas reservas se guardan en forma de reservas de oro. Junto con la masa de mercancías de las que dispone el Estado y que se canalizan al comercio a precios de plan, las reservas de oro constituyen un medio de asegurar la estabilidad del dinero. Permitan, independientemente del volumen de las exportaciones, importar mercancías y, de este modo, aumentar la cobertura mercantil del dinero.

 

En la sociedad socialista el dinero cumple la función de medio de pago en el momento en que se amortizan los créditos, cuando las empresas y entidades cumplen sus compromisos ante el presupuesto estatal y al efectuarse otros tipos de pagos. Como medio de pago, el dinero guarda íntima relación con el sistema de finanzas y crédito con la distribución y la redistribución de la renta nacional y con las funciones de crédito operativas de lo bancos y desempeñan, por tanto, un papel fundamental en el control de la marcha de la producción y la circulación de las mercancías.

 

Bajo el socialismo, la función del dinero como medio de pago no conlleva la posibilidad de crisis económicas. Los atrasos en los pagos suelen ser consecuencia del incumplimiento de los planes de producción y de las deficiencias en la organización de las cuentas entre las empresas. El Estado socialista toma medidas para erradicar tales fenómenos.

 

El dinero desempeña la función de dinero mundial. En esta función opera en los mercados socialistas y capitalistas mundiales.

 

En las operaciones financieras con los países Capitalistas, los países socialistas emplean el oro, así como las monedas de otros países convertibles en oro o que circulan a la par con él.

 

En las cuentas entre los países socialistas, el oro cumple la función de medida de valor. Estas cuentas se liquidan por compensación por clearing 95. Los países miembros del Consejo de Ayuda Mutua Económica emplean en sus cuentas recíprocas el rublo transferible que es una divisa intencional de carácter especial.

 

 

95. Se trata de un acuerdo comercial entre dos oi más países  por lo que se compensan las importaciones y las exportaciones con el fin de alcanzar el equilibrio de intercambio entre ambos.

 

 

La cantidad de dinero que la economía socialista necesita para asegurar la circulación de las mercancías viene determinada por una ley económica y debe equivaler, de acuerdo con la conocida fórmula de Marx, la suma de los precios de la mercancía, divida por el promedio de ciclos de circulación de una unidad monetaria del mismo signo.

 

La suma de los precios de las mercancías depende, en el socialismo también, no sólo de valor de las mercancías, sino del valor de la mercancía dinero. Por cuanto el papel moneda no posee valor propio, su valor relativo equivale, al cómputo de la cantidad de mercancías que deben ser vendidas, al fijar los precios de las mercancías, la cuantía y los plazos de los distintos pagos a la población, y al planificar la emisión de dinero, al presupuesto estatal y al conjunto de la finazas, determina a modo planificado los factores esenciales que influyen en la cantidad de dinero que hace falta para la circulación.

 

 

Comoquiera que en la esfera del comercio al por menor de los países socialistas se admite un cierto volumen de ventas a plazos, del total de dinero necesario para asegurar la circulación se descuenta la suma de los precios de las mercancías que se hayan vendido a plazos y se suma el monto del crédito que debe ser autorizados.

 

Las condiciones objetivas de la economía socialista brindan la posibilidad de asegurar una firme estabilidad del dinero. Ello se logren primer término mediante la masa de mercancías que se halla a la disposición del Estado y se vende a precios estables. El fortalecimiento de la circulación  monetaria y la estabilidad del poder adquisitivo  del dinero se garantizan a partir del desarrollo planificado de la economía, del incremento del tráfico de mercancías y la estabilidad de lo precios.

 

 

 

La ley de valor en el socialismo

 

 

Contenido de la ley del valor. La producción de mercancías en la economía socialista significa que rige en ella la ley del valor, la cual condiciona la producción y el intercambio de mercancías en consonancia con su valor social.

 

En el conjunto de leyes económicas de la sociedad socialista, la ley del valor no es un regulador espontáneo y se hace uso de ella en la gestión planificada de la laz producción.

 

La acción de la ley del valor se manifiesta, ante todo, en el cómputo en valor de los gastos de trabajo. La aproximación de las proporciones del intercambio a las que vienen dictadas por el valor social de las mercancías estimula la producción de los bienes que necesita la sociedad.

 

La orientación a realizar los gastos socialmente necesarios incita a las empresas a rebaja el valor i individual de las mercancías y acelerar el progreso tecnológico. El socialismo posee, frente al capitalismo, grandes ventajas en lo que a la reducción de los gastos sociales de producción se refiere.

 

La acción de la ley del valor y el precio.  Bajo la dominación de la propiedad privada de los precios reviste un carácter espontáneo, mientras en el socialismo los precios se finjan de modo planificado. Por medio de ellos se determinan las proporciones del intercambio planificado de productos entre las empresas socialistas y se venden las mercancías a los consumidores individuales.

 

El precio repone los gastos de trabajo pretérito y vivo  plasmado en la mercancía. Merced a ello se forman fuentes de recursos monetarios  para la reproducción ampliada y para cubrir otras necesidades sociales.

 

El empleo del precio para el cómputo de los gastos sociales de producción incita a las empresas a reducir los gastos individuales a costa del incremento de la productividad del trabajo social, es decir, a elevar la eficacia de la producción. Una disparidad duradera e infundada entre el precio y el valor social de los productos hace que las empresas pierdan el punto de referencia objetivo en su trabajo, disminuye su interés por el perfeccionamiento tecnológico de la producción y por la elevación de la calidad de los productos.

 

Por otra parte, el empleo planificado de la ley del valor no descarta, sino que estipula que los precios no corresponden siempre al valor. Los precios se forman bajo el influjo de la ley desvalor como de otras leyes económicas, correspondiendo el papel determinante a la ley económica fundamental.

 

Al objeto de estimular el desarrollo de este o  el sector económico se recurre a la elevación de los precios de sus  productos acabados o a fijar precios más bajos para algunos medios de producción. El precio relativamente alto se utiliza para el reemplazo de productos deficitarios o caros o otros menos deficitarios o más baratos (la sustitución de metales por plásticos, por ejemplo). La aplicación de la nueva técnica estimula unos precios que hacen que resulte más ventajoso su uso para el consumidor y su fabricación para el productor.

 

La política de los precios se orienta a admitir unas desviaciones racionales de los precios respecto al valor, vidas cuenta de las condiciones  concretas de la producción, el intercambio, la distribución y el uso y consumo de las mercancías. El Estado arranca del valor-trabajo de las mercancías, esto es, admite como base del precio los gastos del trabajo socialmente necesarios. Cualesquiera que sen las alteraciones en los precios de algunas mercancías respecto a su valor, el valor total de las mercancías  producidas por la sociedad es igual a la suma de sus precios 96.

 

 

96. Esto es, Vtmp  =  Sdsp,  donde Vtmp es el valor total de las mercancías producidas; y Sdesp es igual a la suma de sus precios. (A.R.P.)

 

 

La variación de la magnitud del valor de las mercancías debida a los cambios en la productividad del trabajo social incide en las proporciones establecidas en la economía, pero no es su principal factor regulador.

 

En la magnitud de los precios influye también la relación entre la oferta y la demanda. La discordancia entre la oferta y la demanda puede incidir en los precios, provocar su alza.

 

Ahora bien, la ampliación de la capacidad del mercado no es causa del alza de los precios. Si en un momento dado resulta menor la oferta que la demanda, los precios de las mercancías no suben generalmente, sino que se amplia su producción para satisfacer la demanda acrecentada. Como se señala en los Documentos del XXVI Congreso del PCUS, la satisfacción más plena de las demandas solventes de la po9blación tiene en las presentes circunstancias especial relevancia entre las medidas tendentes a elevar el nivel de vida de los trabajadores.

 

Los precios de los bienes de amplio consumo se fijan de manera que los productos se fijan de manera que los productos y los servicios esenciales estén al alcance de todos los trabajadores. Con el progreso tecnológico disminuye el valor social de los productos, lo cual crea premisas objetivas para rebajar los precios 97.

 

 

97. Contrariamente en la formación socioeconómica capitalistas, los procesos tecnológicos sirve como novedad al principio, sobrevalorando al máximo el precio de venta, y más tarde una vez saturado el mercado y cuando los stocks estén atiborrados, bajar el precio del objeto fabricado. Y así sucesivamente con cada novedad de mercancía que quiten el en el proceso de fabricación. Más tarde, con esta forma de proceder insolidaria y judaica, sobrevienen las crisis de mercado debido a la situación inmovilizada de mercancías fabricadas con exceso en su afán de obtener plusvalías al máximo, por no poder dar salida en los mercados a sus stockajes. (A.R.P.)

 

Así pues, la ley del valor, en el socialismo, no se opone a la planificación, si no que constituye un elemento del desarrollo planificado, ya que la magnitud del valor de la mercancía se forma bajo el influjo regulador de la sociedad.

 

El hecho de que la mercancía posea un carácter doble implica que el empleo planificado de las relaciones mercantiles-dinerarias se halle ligado a su forma expresada en el valor de unión con su valor de uso.

 

En la planificación de la producción socialista se aplican tanto los índices físicos como los expresados en valor.

 

En el socialismo se expresa el valor del productos global (Bruto), la renta nacional y la riqueza nacional. El cómputo de la dinámica de la producción y de las interconexiones y los balances intersectoriales se efectúa  por medio del índice del producto global. Para hallar el volumen de la producción se usa en varios sectores el índice de producto para el mercado (construcción) y producto comercializado habida cuenta de la nomenclatura de los artículos fabricados (industria). En las medidas que se estipulan para perfeccionar la planificación y reforzar la influencia del mecanismo económico sobre la eficacia de la producción ocupa un lugar especial el índice de producto normativo neto, que en su forma valorativa expresa los gastos de trabajo vivo socialmente necesario en cada empresa concreta.

 

El análisis de la esencia de las relaciones mercantiles y de la ley del valor bajo el socialismo muestra la inconsistencia de las teorías que niegan la necesidad objetiva de la las relaciones monetario-mercantiles en la economía socialista. Según dichas teorías el socialismo es incompatible con las relaciones monetarias mercantiles. De ahí se deduce la conocida alternativa de “plan o mercado” muy propagada en las teorías de la “economía dirigida de un centro” y la “economía de ordeno y mando”. Igual de inconsistentes son la teorías del “socialismo de mercado” que presentan la propiedad como una propiedad de grupos de empresas, y las relaciones mercantiles espontáneas como la forma universal dominante de los nexos económicos entre ellas. Estas teorías sostienen que el desarrollo planificado es un elemento de todo el sistema de la producción mercantil. En suma, el socialismo aparece como una modalidad de la producción mercantil. Los revisionistas de “izquierdas” y los maoístas identifican el hecho de las relaciones mercantiles con la producción mercantil capitalista. En realidad, la producción mercantil es una necesidad objetiva y constituye un elemento de sistema de la producción social directa 98.

 

 

98.  Los revisionistas de izquierda, es decir, la socialdemocracia, sí identifica las relaciones mercantiles con la producción mercantil capitalista. Sin embargo, los maoístas, es decir, el PCCH han sido menos ortodoxos que el PCUS, y dentro de su desarrollo del socialismo real, han adoptado las cosas aprovechables del sistema capitalista. (A.R.P.)

 

 

Los destinos de las relacione mercantiles. A medida que la sociedad vaya acercándose al comunismo, la mercancía y el dinero irán perdiendo cada vez más su contenido específico y dejarán de existir con la construcción de la sociedad comunista. La ley del valor dejará de regir cuando no haya necesidad de producir bienes como mercancías, cuando desaparezca la necesidad del intercambio mercantil y se creen las premisas para el cómputo del trabajo social en tiempo de trabajo.

 

La premisa general para la transformación definitiva del producto social directo con propiedades de mercancía en producto social directo de la producción comunista serán el desarrollo gigantesco de las fuerzas productivas, la consolidación de las relaciones de propiedad comunista, la supresión de las diferencias esenciales entre los diferentes tipos de trabajo y la conversión del trabajo para la sociedad en primera necesidad vital 99. En la etapa del socialismo desarrollado, en cambio son necesarios el estimulo material del trabajo, la contabilidad y el control de la producción, la distribución y el intercambio de productos, haciéndose uso de manera consecuente de las relaciones mercantil-monetarias 100.

 

 

99. Esta premisa general para la transformación definitiva del producto social directo, la tendrá que hacer el comunismo como fase superior del socialismo real marxista, cundo dicho socialismo como fase inferior, haya alcanzado un desarrollo gigantesco de producción de bienes. (A.R.P.)

 

100.   CON LO QUE FUE, PERO NO PUDO SER, PERO ANTES O DESPUES SERA, concluyo Este manual de Economía Política  (ver  llamada **) que he transcrito  desde el capítulo XIX al capítulo XXII, que a mi juicio, es un verdadero poema la libertad, solidaridad, justicia social y laboral, reparto de riqueza y de trabajo, que exime al ser humano de la explotación del hombre por el hombre. Los economistas burgueses no entienden este tipo de Economía Política, pero lo que mucho más sangrante, no quieren enterarse  ni  entender. (A.R.P.)

 

 

 

Bibliografía:

 

* Los diversos tipos de socialismo fue extraído  del modo de producción socialista del Club de Ensayos, bajado  de Internet, así como el interesante ensayo de Alexander V. Buzgalin sobre el Socialismo del siglo XXI, y la Estructura ideológica y la economía de equivalencias sobre el Socialismo del Siglo XXI, de Heinz Dieterich Stefan

 

** Síntesis del material didáctico del Manual de Economía Política. Parte II desde el capítulo XIX hasta el capítulo XXII, páginas 348 hasta 422, editado por la Editorial Progreso – Moscú-1982, redactado por un grupo de autores integrado por: A. Rumiántsev, G. Kozlo, M. Vólko, A. Miliekovski  correspndientes de la Academis de Ciencias de la URSS y M. Azárova, M. Atlas, R. Bioloúsov, V. Mántsev, M. Mójov, I. Mrachkóvskai y S. Skípetrov, profesores y doctores en Economía.

 

 

*** Las llamadas son reflexiones de (A.R.P.), excepto todas aquellas que se refieren a la  síntesis del material didáctico del Manual de Economía  Política, editado por la Editorial Progreso-Moscú o,  de otra procedencia.

 

 

Fecha: 18-febrero-2014

3 comentarios:

  1. Y es para la realización de estos cometidos para lo que se requiere un periodo histórico especial: el de la transformación revolucionaria de la sociedad capitalista en sociedad socialista, período que comienza cuando el proletariado conquista el poder e instaura su dictadura y termina con la victoria plena del socialismo. La esencia económica de este periodo consiste en la eliminación de la base capitalista y la creación de una base nueva, socialista, del sistema económico del socialismo. Señalaba Lenin que la meta de la construcción del socialismo “no puede alcanzarse de golpe; ello exige un período de transición bastante largo del capitalismo al socialismo….porque se necesita tipo para introducir cambios radicales en todos los dominios de la vida y porque la inmersa fuerza de la costumbre de dirigirá de modo pequeño burgués la economía sólo puede superarse en una lucha larga y tenaz”
    eso estaba bien antes, en la sociedad actual, llegar al socialismo y romper con el sistema seria mas rapido, internet nos deja que una fabrica de componentes de vehiculos en cadiz se pueda poner de acuerdo con una planta en barcelona, lo cual hace que todo sea mas sencillo, incluso la reunion de representantes de las asambleas o soviets, se pueden hacer por video conferencia

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  2. Efectivamente Pedro Recio, debido a los fuertes avances de los medios de comunicación, hoy en día nos podemos comunicar más de prisa y por tanto avanzar más rápido para que el período de transición se acorte.
    Pues sí, Internet de momento, es una herramienta que ayudará a los seresa progresistas del planeta, pues es el talón de Aquiles que en estos momentos tiene el caduco istema capitalista.
    Pero también es cierto, que el sistema capitalista aún moribumbo, todavía no está muerto ideologicamente, y como los tiburones antes de llegar a hacerlo, dará aletazos por todos los lados, y posiblmente se den cuenta (aunque las plusvalías de la comunicación les está cegando), hagan o ideen alguna cosa para eleminar el medios que ahora se tiene de extraordinaria comunicación.


    alfonso

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  3. tienes razon alfonso, el problema tambien y mas grave quizas es que la llamada izquierda, en lugar de tener claro que el capital debe morir, ellos quieren pactar con el capital, como dijo bernstein socializar el capital hasta que lleguen a la conclusion de que el socialismo es la opcion, eso no se puede hacer, necesitamos un programa, si no revolucionario, cuasi revolucionario, que de el pistoletazo de salida a la clase obrera
    saludos

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